Bloodline ♠ [BTS] COMPLETA

♠ Capítulo 29 ♠

Aquella llamada que YoonGi había recibido hace una hora exactamente resultó ser del hospital, Wheein había tenido un accidente, había sido víctima de un accidente, según los que presenciaron aquello, la chica cruzaba la calle con el semáforo en rojo, uno de los autos no pudo detenerse y acabó causándole graves heridas, JungSook y YoonGi estaban en la sala de espera, Sook veía a un angustiado y desesperado YoonGi, el beso por supuesto había quedado en segundo plano.

— Están tardando demasiado, hace una hora dijeron que nos avisarían de cualquier cosa...—despeinó su cabello.

— Eso significa que no hay noticias malas, tranquilo—intentó animarle.

— O significa que no quieren decirlas—respiró profundo— ¿Qué demonios tenía noona en la cabeza?

— Ahjussi, todo estará...

— ¿Familiares de Min Wheein? —una mujer con bata blanca llamó su atención, ambos se levantaron acercándose de inmediato.

— Yo soy su hermano menor, doctora, ¿Cómo está ella? —YoonGi estaba obviamente preocupado.

— Logramos estabilizarla, pero su cuerpo está muy delicado, sus costillas y su pierna derecha recibieron fracturas serias, pero con el debido cuidado mejorará, lo importante es que su cabeza no recibió golpes—comentó a lo que YoonGi asentía sin saber cómo sentirse—Su hermana estará un tiempo hospitalizada, señor Min.

— ¿Puedo verla?

— En estos momentos está sedada, ¿Quiere verla así?

— Sí—YoonGi aceptó sin dudarlo. Miró a JungSook, pero ésta se apresuró a hablar.

— Ve a verla, quédate con ella y yo iré a casa, en unas horas oscurecerá, será mejor que intente descansar.

— Pero...

— YoonGi, unnie te necesita ahora, cualquier cosa que necesites solo llámame, ¿Sí? —sonrió un poco. El pelinegro suspiró asintiendo, no negaba que quería ver a su hermana y más en esa situación. JungSook lo miró alejarse en compañía de la doctora, respiró profundo llevando sus manos a su cintura—Este día ha sido lleno de sorpresas definitivamente—susurró.

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Aquella casa llena de amargos recuerdos se encontraba con las luces encendidas, para cuando JungSook llegó a ella era de noche, estaba muy cansada con todas esas emociones en un solo día, hizo un repaso mental enfocándose más en el beso con JungKook.

No sabía si ese beso le había abierto los ojos, pero era consciente de que estaba mal lo que hizo, se había prometido así misma que eso no se repetiría, había llegado a la conclusión de que quizás JungKook le había dicho que no dijera nada porque NamJoon de por sí ya estaba molesto con lo que sucedía.

"Pero sigo sin sentirme asqueada por besar a mi propio padre"

Hizo un gesto con su lengua por la parte interna de su mejilla recordando el sótano, las cosas de su madre y de su tío seguían allí, JungSook había leído una sola carta de esa cajita, ¿Qué decía el resto?

Necesitaba bajar al sótano.

Entró a la casa caminando directo a las escaleras, pero se detuvo al escuchar su nombre, respiró profundo dirigiéndose a la sala, su madre no estaba, pero su padre bebía de aquel líquido rojo, ella ya sabía que era y le daba náuseas.

— ¿Dónde te quedaste anoche? —exigió saber.

En esos cuatro meses, JungSook podía ver lo mucho que la sangre hacia efecto en sus abuelos, ellos no lucían viejos, pero tampoco más jóvenes que ella.