♠ Capítulo 38 ♠

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Una semana después

JungSook despertó agitada en la oscuridad de la habitación, unas manos le detuvieron en el acto e identificó a JungKook, volvió a recostarse en la cama tomando la mano de su padre calmando su respiración, desde hace una semana exactamente estaba teniendo pesadillas respecto a YoonGi.

Todavía no lo encontraban y eso la estaba desesperando.

— ¿Estás bien?

— Sí, yo...lo siento.

— Tranquila—acarició el dorso de su mano—Bastante soportas todo este desastre.

— ¿Realmente no hay noticias sobre él? —susurró suplicante.

— NamJoon está haciendo lo imposible, hemos ido a distintos lugares que podrían estar—contestó—No hemos encontrado nada y la policía es un caso perdido, ya sabes.

— No quiero que le pase nada, él...

— Él realmente gusta y te preocupa, lo sé—se recostó a su lado—Lo encontraremos pronto—dijo para calmarla, pero la verdad es que JungKook tenía miedo de lo que podría pasar con su hija si YoonGi salía herido o peor...muerto.

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Estaba odiando tener que ir a trabajar con tantas cosas pasando por su cabeza, sus pies la llevaban casi a rastras, JungSook no podía dejar de pensar en YoonGi, todos estaban así, lo frustrante era no saber dónde conseguirlo, Sook en ocasiones llamaba a su celular pensando que tendría respuesta, pero no, nadie respondería porque ella había conseguido el celular del chico en su cama.

— Estará bien—susurró—YoonGi es fuerte, sólo tiene que esperar—se dijo así misma deteniéndose frente a la puerta de la tienda, le había pedido a JungKook que le dejara en la acera y ella caminaba a la tienda, el chico claro no le quitaba el ojo hasta que entrara—Aguanta Min YoonGi—suspiró entrando a su área de trabajo sorprendiéndose al ver que Jimin tenía compañía.

— ¡JungSook! —llamó sonriendo un poco—Quiero presentarte a alguien—indicó que se acercara y Sook miró a la chica de pie junto a él, su cabello caía por su espalda, era negro, contextura delgada, piel pálida, rostro dulce pero un poco más alta que JungSook—Ella es Lee HaRa, trabajará con nosotros desde ahora, el dueño de la tienda la contrató, no tiene experiencia en estas cosas, pero ambos le enseñaremos.

— Soy Jeon JungSook—se presentó haciendo una reverencia.

— Gusto conocerte—hizo lo mismo—Prometo dar lo mejor de mí en este lugar.

— Ve a cambiarte, en los vestidores tendrás tu casillero—indicó Jimin. Ambos la vieron alejarse y cuando quedaron solos, éste miró a Sook— ¿No sabe nada aún?

— No—suspiró—Te juro que estoy a nada de volverme loca, es como si la tierra se los hubiera tragado.

— ¿Viniste sola? —preguntó serio mirando a la puerta.

— No, JungKook me trajo en el auto.

— Oye, lo encontraremos, ¿Sí? No pierdas la esperanza—le sonrió dulcemente—Ve a cambiarte, abriré la tienda.

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YoonGi tenía hambre, mucha, a decir verdad, la fiebre se había ido, de hecho, todo el malestar había desaparecido, YoonGi no sabía cómo seguía vivo, estaba simplemente encerrado en esa habitación, no podía hacer nada, comer o beber nada y eso le enloquecía. Intentó romper la ventana, pero no funcionó, su mente no estaba precisamente en huir sino en alimentarse.

Se acercó a la puerta acercando su oreja a ella, escuchaba algunos murmullos a lo lejos pero no entendía nada.

Aquello no podía ir peor.

YoonGi sabía que había estado durmiendo, se había despertado por la madrugada escuchando que entraban a su cuarto, pero ahí fue donde todo se volvió oscuro. No tenía su celular, no le había dado tiempo de tomarlo, estaba totalmente jodido.

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JungSook hacia el inventario de la tienda y contando los productos se equivocaba, negaba con la cabeza intentando enfocarse, pero los recuerdos de sus pesadillas querían mantenerla pensativa toda la tarde, Sook había estado soñando con YoonGi, éste estaba encerrado en una habitación y le pedía ayuda, se escuchaba agitado pero asustado, cuando ella intentaba abrir la puerta, su abuelo aparecía con una sonrisa maliciosa.

Por las noches ya dormía poco.

Suspiró mirando al techo, llevó su mano al pecho, justo al corazón.

— Por favor no dejes que nada le pase a YoonGi—susurró—Por favor, mamá, dame una señal, si realmente estás cuidándome allá arriba...dame una señal—un ruido le hizo voltear, HaRa estaba allí intentando levantar una caja que se le había caído, en realidad, se le rompió haciendo que varios envases de Yogurt cayeran al suelo rompiéndose.

— Lo siento, yo...voy a recogerlo, es...—miró alrededor buscando algo con que limpiar el suelo, JungSook dejó lo que estaba haciendo acercándose.

— A un lado del baño están los productos de limpieza, recogeré esto y tú limpiarás el suelo antes que Jimin lo vea, ¿Bien?

— Sí—asintió obedeciendo al instante.

JungSook subió las mangas de su blusa hasta sus codos, fue a buscar una bolsa de basura arrojando allí los envases que estaban rotos, los que seguían intactos los guardó en otra caja más nueva y resistente, HaRa vino con un trapeador y un balde, comenzó a limpiarlo totalmente avergonzada.

— Por favor no le diga a...

— Tranquila, no diré nada—sonrió forzosamente— ¿Cuántos años tienes, HaRa?

— Dieciocho, acabo de cumplirlos la semana pasada—contó— ¿Puedo saber tu edad?

— Veinte años...

— ¡Oh! Creí que tenías menos—se sorprendió y la verdad es que la apariencia física de JungSook era muy dulce para alguien así, HaRa en cambio lucía mayor que ella— ¿Tienes mucho trabajando aquí?

— Exactamente cuatro meses—asintió—Jimin tiene más tiempo, él me enseñó todo lo que sé y ahora me toca enseñarte.

— Es muy amable—sonrió limpiando el suelo con el trapeador—Estaba muy nerviosa cuando logré obtener el empleo.

— ¿Estás estudiando?

— Sí, estoy en mi último año de secundaria, hubiera acabado la escuela hace un año, pero repetí cuando perdí a mi padre—contó.

— Lo siento mucho—dejó la bolsa junto a la puerta regresando donde ella—Yo perdí a mi madre cuando nací, jamás la conocí realmente, no tengo recuerdos de ella.

— Lo siento mucho, unnie—se mostró apenada—Papá murió durante un asalto, estábamos celebrando que mi madre había sido ascendida en su trabajo y tres ladrones entraron, mi padre intentó convencerlos de no lastimarnos, pero él acabó siendo herido y....—HaRa respiró profundo dejando en claro que le costaba tocar ese tema—Ahora sólo somos mamá y yo.

— Al menos se tienen una a la otra—sonrió apenas—Termina con eso, debo terminar el inventario...

— Unnie—llamó. JungSook la miró—Creo que te he visto antes en otro lugar.

— ¿Qué? ¿Dónde?

— No lo sé, pero tengo la sensación de haberlo hecho.

•••

No se sorprendan cuando anuncie el antepenúltimo capítulo ✌

En multimedia tienen una foto de quien es HaRa.

Bloodline ♠ [BTS] COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora