Una profecía no puede ser comprendida;
y de ser comprendida, no sería profecía.
Es un ser transformado, que habla sin sentido;
palabras del azar, sin orden, ni sentido...
Es una palabra, que no puede ser eludida;
que no puede evitarse, por no ser comprendida...
"Palabras nunca oídas"... y ha de pasar el tiempo;
ha de arrepentirse, y han de ocurrir los hechos...
Al recordar, entonces, la profecía será cierta;
habrá pasado el tiempo... y con claridad, será vista.