JungKook es un médico reconocido y YoonGi su paciente omega embarazado.
Mientras el dolor consumía mis entrañas, y la soledad se aferraba a las tristes paredes del alma de este omega, llegaste como si de una luz cegadora se tratase. Bañando todo. M...
JiMin terminó de acomodar a MinHyuk en su sillita especial, acarició las mejillas del pequeño lobo llamado su atención. — Quedate quietecito, ¿de acuerdo? — El niño simplemente asintió.
— Yo lo cuidare, señor Park, no se preocupe — La señora Iki le tranquilizó a la vez que revolvía con una cuchara dentro de un tazón, de lo que supuso era la avena de MinHyuk.
— Ya regreso, dele de comer, cachorro no hagas desastre con la comida.. — Dijo y así echando un ultimo vistazo a su hijo, dio media vuelta y se dirigió escaleras arriba, comino un par de pasos al final y la tercera puerta a la derecha fue tocada suavemente con su puño, tres veces para ser exactos — Tae voy a entrar.
No espero respuesta de el omega, hace tiempo no la recibía, se encontro con la habitación a oscuras y un bulto de sabanas en medio de la cama como era costumbre desde hace algun tiempo, contemplo un par de segundos desde la puerta y suspiro reuniendo un poco de fuerza.
— ¿TaeTae? — Llamó suavemente a quién escuchaba sorber su nariz debajo de aquella especie de cueva de cobijas. — ¿No tienes hambre, cariño? — Sintió mas que vio como las sabanas se sacudían, era sin duda una negativa por parte de el menor.
Llevo sus manos a donde localizó una de las puntas de las muchas sabanas y entonces tiro de ella, descubriendo para su suerte el rostro perlado de sudor de el omega. — Tae... — El menor llevo las casi temblorosas manos a su rostro intentando cubrir sus ojos acuosos.
El alfa destapó por completo a TaeHyung quién no puso mayor resistencia, su cuerpo estaba más delgado que de costumbre y parecía que no había tocado el agua en días, y es que así era, pese a que JiMin traía el trabajo consigo a casa para estar más a su pendiente, Tae no había mejorado demasiado.
— Todo señala a una depresión posparto — Había sido el diagnóstico del médico unos dias atrás cuando encontro a TaeHyung ahogandose en su propio llanto sin obtener una respuesta o al menos una coherente sobre ello.
— Tae... — Volvio a utilizar aquella dulce voz para llamar la atención de el omega que justo en ese momento dejaba ver bien su rostro. — Vamos a comer algo delicioso, ¿de acuerdo? — Tae volvió a negar con la cabeza y sus ojos se apartaron de los de JiMin un par de segundos hasta que este le volvió a llamar — Si sabes cuanto te quiero, ¿verdad? Eres mi pareja y tenemos un hermoso hijo juntos y esperamos otro... — Una de sus manos viajo hasta el vientre de el omega. — Ven, te ayudare a bañarte y bajaremos a comer, quizás después salgamos con MinHyuk, ¿sabes? Nuestro cachorro te extraña.
TaeHyung fruncio el ceño y sorbió de su nariz aún con ojos apunto de rebalsar — N-no ... Eso no es cierto... — Su voz fue congestionada e incluso frágil para el gusto de JiMin.
— claro que es cierto, Tae — JiMin dijo, a la vez que jalaba suavemente la mano del otro hacía el baño. — Eres su madre, el ha extraña tu presencia.
— No es verdad — Volvió a negar y sus lágrimas antes retenidas salieron pesadas.
JiMin no supo que más hacer, solo abrazar a TaeHyung con fuerza porque parecía que el ahora frágil se desmoronaba justo ahí.
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