Capitulo 45 "Lo correcto"

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-No es correcto- susurre


-Te mostraré lo que es correcto- dijo mientras se hincaba. Lo mire sin comprender y el me guiño un ojo. Lamio mi vagina haciéndome gemir alto


- Steven..- gemí cerrando los ojos


Separó mis piernas con sus manos dejándolas en mi trasero dándole más espacio a su lengua para lamer por completo mi feminidad.  Mi cuerpo agradeció el tacto de nuevo, solo necesitaba un pequeño empujon para caer y era realmente lo que estaba teniendo justo ahora. Me sentía en el borde de una cascada, a punto de caer por esta y al caer sentir como todo me envolvía. Y ahí estaba, lo estaba sintiendo, sus movimientos comenzaban a ser mucho más rápidos y el mero hecho de que en cualquier momento alguien podría entrar y vernos lo volvía todo mucho más excitante.  De pronto lo sentí y ahí estaba, gimiendo su nombre lo más alto que mi garganta me lo permitía. Las piernas comenzaron a temblarme, bajé la vista hasta donde estaba Steven quien subió mirándome de manera pervertida y burlona:


-Estas temblando... - dijo riendo mientras llegaba hasta mis labios


- Lo se... - susurré


-Y estás completamente roja- dijo mientras tomaba mi barbilla con su dedo para besarme con lujuria y desesperación.




Deje hundir mis dedos en su cabellera rubia mientras el bajaba sus manos de nuevo hasta mi trasero para tomar impulso y cargarme sin mucho esfuerzo hasta dejarme encima de los lavabos para besarme el cuello mientras acariciaba mis pechos.  Solté un gemido y el sonrió volviendo a besarme donde deje que abriera mi blusa y desabrochara mi sostén.  Se llevo uno de mis pechos a la boca mientras escuchaba como se desabrochaba el pantalón



-Steven nos pueden ver... - susurre


-Van a ver lo que tenga que ver- susurró en mis labios y entonces le bese. Le bese con extremo deseo y necesidad, sentí como algo duro entraba en mi vagina, gemi alto.



Me abracé a él para sentirlo más, para sentir que él estaba ahí, para sentirlo más profundo, más intenso. Sus siguinhes embestidas fueron mucho más duras y más profundas mientras el gruñía en mi oído y yo gemía en él suyo.  Aunque sabía que estaba bastante mal me gustaba y ahí fue donde me di cuenta que después de tantos años aún me seguía sintiendo atraída por el peligro. Se que soy joven pero desde tiempos inmemorables hice cosas peligrosas y aquí las consecuencias de no haber parado.



-¿Puedes hacerlo más rápido?  Por favor... - pregunté gimiendo mientras me abrazaba con mucha fuerza a él.



-Por supuesto que si- gimió mientras lamía mi cuello haciéndome explotar.


Y justo como lo pedí sus siguientes movimientos fueron mucho rápidos,  ambos gemiamos al mismo tiempo disfrutando lo que estabamos haciendo.  Quería explotar juro que si pero no queria que parara. Quería que lo siguiera haciendo duranto mucho tiempo porque .... Escucharlo gemir era el sonido más placentero y su gemido avisando que ya había terminado fue todo lo que necesite para yo también terminar.

-Esto está mal. Jodidamente mal. -pensé.


-Tenemos que irnos, tú padre va a sospechar- dije empujándolo para bajar de un salto.


-Podemos quedarnos un rato más y decir que te sentías mal- dijo acercándose de nuevo



-No! Basta! - dije empujándolo mientras me acercaba a la puerta- Es injusto!  Esto es una puta miérda Steven!  Tú padre es quien esta allá afuera esperándonos! - grite desesperada



-Carajo no se va a enterar! - grito Steven


-Steven esto esta mal!  No puedo enredarme contigo!  - grité furiosa- No puedes pillarlo?  Me irá muy mal de ser así!  Estaré jodida!  Y no solo me refierona que tu padre estaría furioso conmigo si no que, no puedo permitirme estar más contigo!  Simplemente no puedo! - grite




-¿Porque no puedes? - pregunto serio tratando de decifrar mi rostro




-Carajo ! Está mal Steven! - grite saliendo por la puerta pero sin pensarlo ya tenía a Steven aún lado de mi jalandome hacia el -¿Qué? - grité



-Dime una respuesta exacta ahora- dijo serio, bastante serio.  Un escalofrío recorrió toda mi espalda sintiendo miedo



-No puedo estar con tú padre y contigo a la vez- dije seria. Odiándome justo en ese momento. No pude ver su reacción puesto que mis ojos se llenaron de lágrimas que ya corrían por mis mejillas.






-Yo no te dije que te enredaras con el para empezar- dijo molesto soltandome de su agarre para después irse furioso.


-De no haberlo hecho jamás te hubiera conocido... - susurré para mi mientras dejaba que las lágrimas solo cayeran, cayeran y se fueran. Sus palabras realmente me habían lastimado en el alma, como si me apuñalaran una y otra vez en la misma herida.

*****

-Listo, ya está -dije sentándome en la silla tratando de actuar normal.




- Estuviste durante una hora en el baño... ¿Estas bien? - pregunto Antonio preocupado



-Si por supuesto. Solo que mi estómago no, algo de verdad me hizo mucho daño- dije sin mirar a Steven



-¿Necesitas algo? - pregunto aún con preocupación


-No no no- contesté rápido. - solo necesito llegar a casa pero necesito saber antes que pasará con Ginger y conmigo- dije seria



-Mira Megara no tienes nada de que preocuparte solamente de no decir nada que te incrimine y mantener siempre tú palabra para que no logren confundirte o algo así.  - comenzó diciendo serio- Te cuidaremos lo más posible para que no te pase nada malo.  Seguramente Zac querrá atacarte de manera que yo no me de cuenta que es él , así que por favor sé muy desconfiada con todas las personas que quieran acercarse a ti.  No podemos correr riesgos en estos momentos cielo- dijo ya más tranquilo.


-De acuerdo, todo estará bien- respondí sonriente



Pero por mi mente solo pasa una sola cosa y era que Steven estaría bastante cerca de mi y ahora estaba todo mal.

★Sugar Daddy★[+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora