Comencé a sentirme mareada así que me acerqué al espejo con la pequeña mesita donde se encontraba un florero. No logré llegar, escuché pasos. Todo se volvió negro.
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¿Algúna vez han estado tan cansados que tratan de dormir pero no pueden? Tú mente sigue corriendo, escuchas todo a tú al rededor pero simplemente no puedes abrir los ojos. Los párpados te pesan tanto que te lo impiden además de el cuerpo se mantiene completamente rígido. Justo ahora así es como me siento. Siento que todo esta dando vueltas, escucho una voz y música de fondo acompañada del suave sonido de la intensa lluvia. Si, eso sabía que era lluvia, podía escuchar como caía y golpeaba los cristales, posiblemente de una camioneta o de un auto, no lo sabía en ese momento. Necesitaba escuchar más pero aunque lo hiciera no entendía nada. No porque estuvieran hablando en otro idioma si no porque eso suele pasar cuando tú mente esta corriendo y tú cuerpo esta dormido.
-Si ya la tengo aquí prefiero hacer yo las cosas a que ustedes lo arruinen..... Si ahí te veré..... Yo te amo aún más .... Esta muerto... Fue un.... Si estará....
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Ya no escuchaba nada, seguía todo negro, seguía aún en el vacío y apenas podía tener el control de mi cuerpo. Trate de abrir los ojos, fallé. Sentí como un viento helado golpeaba a mi rostro, no hizo ningún efecto en mi cuerpo. Unas manos fuertes y masculinas se apoderaron de mi cuerpo levantándome, escuché grillosy a otros animales que no supe distinguir y al parecer ya no estaba lloviendo.
Después de unos minutos el hombre de brazos fuertes me dejo caer con brusquedad sobre un suelo duro. No sentí el golpe. Sé que si pudiera estar consciente lloraría, sabía que el piso desnudo estaba frío pero tampoco lo sentía y me torturaba que mi mente siguiera corriendo pero esta vez fue diferente, entendía todo:
-Pero que linda te verás más tarde. Me voy a divertir mucho contigo- dijo una voz grave para después estallar en una amarga carcajada.
Entonces logré sentir como un escalofrío recorría mi espalda después de que la puerta de la habitación o de cualquier otro lugar cercano se cerrara. Sus palabras se quedaron en mi mente vagando hasta que poco a poco me quede completamente dormida.
Desperté al sentir una fuerte presión en mis muñecas y en mis tobillos. Abrí los ojos viendo como todo a mi al redodor daba vueltas. Segundos más tarde todo cobró forma, la habitación era bastante oscura, había una ventana cubierta por una gruesa cortina obviamente negra que impedía el paso de la luz. Tome todas las fuerzas de mi cuerpo aún doliendome para correr hasta la ventana y tratar de slir de ahí. Mis intentos fueron nulos. Llevaba atadas las manos en mi espalda y al parecer parte de la soga bajaba hasta mis tobillos atandolos. Trate de pararme con las rodillas y así tratar de caminr, solo necesitaba un poco de luz. Todos mis intentos fueron completamente inútiles, mi cuerpo pesaba bastante, mis piernas se encontraban completamente entumidas tanto que podía dolerme demasiado el hormigueo en ellas. Alguien abrió la puerta de golpe iluminando la habitación.. Vi aún chico alto y de rulos rubios. Era Zac.
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Abrí los ojos muy despacio, mis ojos seguían pasando bastante, me sentía débil y muy cansada. Mi cuerpo ya no dolía tanto, ahora me encontraba atada en una silla vieja de madera, observé la habitación que parecía un sótano de una cabaña, estaba amueblada con anaqueles que parecia que contenían todo tipo de productos farmacéuticos o algo así, a decir verdad parecía un labotario. Busque alguna ventana pero no había ninguna definitivamente estaba en otra habitación :
-Deja de buscar una salida no la encontrarás - dijo el mismo chico rubio de cabellera rulosa casi a los hombros mientras jugaba con la jeringa que tenía en sus largos dedos.
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★Sugar Daddy★[+18]
Teen FictionAmor- dijo Ginger llamando a su novia Megara que se encontraba observando su atuendo en el espejo -Mande- contestó sin mirarla. -¿Y si nos conseguimos un Sugar Daddy? - pregunto levantando una ceja. Megara soltó una carcajada mientras se giraba a...