«Y todos los caminos que tenemos que caminar son sinuosos. Y todas las luces que nos guían nos están cegando. Hay muchas cosas que me gustaria decirte y no sé cómo»
«En tu miedo, sólo buscas la paz. En su miedo, buscas sólo amor»
«Nada me...
Llegó la noche. La parte del mirador de la Torre se encontraba lista para recibir a los invitados. María había llamado a la banda para confirmar el encuentro lo cuál fue confirmado.
Eran las 9pm cuando se escuchaba la música, la chica ya estaba vestida con un lindo vestido blanco pegado y corto, con unos tacones y su cabello liso por la plancha, se maquilló sólo un poco pero dejando sus labios rojos.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Salió de la habitación minutos después con su teléfono en mano para estar atento a la llegada de la banda.
Al ascensor abrirse apreció el decorado del lugar, la música retumbando por cada rincón y personas por aquí y por allá, y por supuesto la gran vista de los ventanales a la cuidad de Nueva York.
Visualizó a su padre hablando con el portador de Máquina de Guerra y Clint. En unos sillones estaba Banner conversando con su madre. En la barra estaba Steve con Natasha y la pasante de Amanda. María frunció el ceño al ver lo cómodos que se veían hablando Rogers y Smith ya que Nat hacía un trago y de vez en cuando miraba a las dos personas.
La chica se acercó a ellos y le guiñó un ojo a Nat sin prestarle atención a la reacción de Steve al verla.
—Que guapa Nat—dijo tomando una cerveza de una cava con varias y mucho hielo.
—¡Oh mírate!—Nat la miró de arriba a abajo ya que estaba con ella en la barra.—¡Estás wow! ¡Definitivamente conseguirás muchos números hoy!—ambas rieron y María bebió de su cerveza al destaparla.
La chica observó a Steve quién dejó de platicar con Karina y le sonrió.
«Maldita sonrisa»
—Karina, te ves maravillosa—elogió María tomando otro trago.
—Gracias María, tu también—le sonrió. Se giró quedando frente a Steve.—tú también estás muy guapo, no te lo había dicho—dijo mirándolo mejor y sonriendo coqueta.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Le está coqueteando?—susurró Nat en su oído mientras veían la escena.
—Pues gracias, tú estás muy linda—dijo sonriendo levemente.