Noche sangrienta【Taekook - Sope】¹

Capítulo 12

—¡¿A dónde se lo llevan!? —gritó Jungkook, un hombre lo agarraba dolorosamente de los brazos.

—¡Quien se atreva a interponerse en mi camino, lo encerraré de por vida! —gritó la uniformada rubia a todos los estudiantes, ignorando al maknae.

Hoseok no entendía que era lo que estaba pasando. ¿Porqué tenían esposado a Taehyung? ¿Qué hizo? Miró el rostro del peligris, estaba en shock; Taehyung no parecía reaccionar, sólo se dejaba llevar.

Jungkook no iba a quedarse quieto. No entendía que pasaba ni tampoco quienes eran pero eso no le importó en lo más mínimo. Le pegó un codazo al hombre que lo sujetaba y posteriormente le undió el talón justo en el pie. El hombre gruño de dolor y el castaño aprovechó ese momento en que aflojó su agarre para liberarse.

—¡Hyung, reacciona! —gritó el maknae, Taehyung lo miró. Jungkook empezó a empujar a los uniformados que le impedían llegar hasta él. —¡Más les vale que lo suel-!

Taehyung abrió desmensuradamente los ojos cuando vio lo que pasó. Un hombre le había propinado un puño en la cara al menor, tan fuerte que lo mandó al suelo golpeándose también la cabeza.

—¡Jungkook! —gritaron en unísono los mayores.

Taehyung pudo oler la sangre del menor; la ira lo invadió. ¿Quiénes se creían para tocarlo? Nadie tocaba a Jungkook.

Nadie podía tocar ni un sólo pelo de su Jungkook.

El vampiro rugió con violencia, sacó sus colmillos con ojos inyectados en cólera.

—¡Malditos! —su voz salió profunda y endemoniada. Miró de frente a aquella mujer rubia y le rugió enseñando sus dientes. Sin embargo, la mujer ni siquiera se inmutó, permaneció quieta en su lugar viéndolo con indiferencia.

Poco le importaba que los demás estudiantes estuvieran gritando al ver al peligris transformarse en un monstruo.

Se zafó de uno de los uniformados que lo agarraban, golpeó a unos cuántos que se le lanzaron encima para tomarle de nuevo.

—¿En serio lo quieres matar? —la mujer habló con una calma impresionante. A pesar de hablar tan bajo, el menor la escuchó y volteó a verla.

Un grito agudo lo hizo regresar la mirada hacia atrás del salón. Un uniformado agarraba del cabello a Jungkook y tenía una pistola apuntándole a la cabeza.

—Tú decides —Taehyung miró a la rubia detrás de él. —O vienes con nosotros o los matamos y tú nos matas a todos -la rubia entendía la fuerza del vampiro en frente de ella, sabía que si mataban a esos dos el peligris no descansaría hasta matarlos a todos, pero ¿soportaría luego saber que sus dos amigos ya no estaban con él? ¿Esos dos valían todos sus hombres e incluso ella? No, ella sabía que no.

Hoseok también estaba siendo apuntado. Taehyung los miró con angustia. No quería perderlos, mucho menos verlos morir frente a él.

—Está bien... —le contestó. No quería meterlos en más problemas, esto era por él y él podría salir de esta. —Pero quiero que los liberes... en frente de mí —miró a la rubia con rostro serio y con unos ojos penetrantes.

—Suéltenlos.

La orden fue acatada y soltaron a ambos humanos. Taehyung fue agarrado de nuevo. La rubia se fijó que este último la veía con cara de preocupación y ella entendió en que estaba pensando.

—No les haremos nada más una vez que salgamos, no te preocupes —le dijo a Taehyung. —Sólo nos encargamos de bestias como tú, a los nuestros no les hacemos nada.