Pasión Prohibida [Keanu Reeves y Tú] •Terminada•

Jugar con Fuego.

Nos acurrucamos en la cama como dos abuelitos que se quieren sin decir nada y esperan algún día morir juntos.

Me rugía el alma por saber que misterios guardaba detrás de esas pestañas.

Lo ví desnudó y lo ví dormido. Ví cuan invencible era cuando se quitaba la ropa y cuán vulnerable era cuando dormía.

Roce mis labios con los suyos y Keanu abrió lentamente los ojos para luego deslumbrarme con su sonrisa.

— Buenos días, Preciosa— dijo en un susurro y depósite un beso en sus labios.

El dulce sabor de sus labios me Hizo estremecer.

— Sonríe más a menudo, me encanta verte así— le dije.

— Con una condición.

—¿Cuál?

— Que despierte a tu lado siempre— dió un beso en mí frente.

Comencé a depositar besitos en su pecho. Subí su polera y recorrí su piel con mis yemas.

Keanu me beso y su lengua y la mía entraron en contacto, mientras el fundía sus dedos en mi cabello.

Keanu se giró y Se acostó sobre mí

— Eres tan hermosa— dijo y bajo mis bragas—, ¿Cómo puedo ser tan afortunado?.

Jugué con el tirante de su bóxer, hasta que la quité por completo. Keanu comenzó con las embestidas, quise contestarle pero el éxtasis que me invadió no me lo permitió. Me encorve de placer y Keanu colocó sus manos en mi cadera para que el balanceo fuera más placentero.
y continuó empujando dentro de mi. Fue lo suficientemente rápido como para complacer a los dos. El suave sonido del choque de nuestra piel llenó la habitación junto con los gruñidos ocasionales de Keanu y mis gemidos. Me besó y acarició mi mejilla.
Acarició mi seno y mi pezón parecía un botón duró del placer.
Sentí un nudo en el estómago y luego una oleada de intenso placer me envolvió. Ambos nos corrimos y luego Keanu se retiró y me envolvió con sus brazos.

— Hey, tortolitos despierten o el camión nos va a dejar— gritó Candy, mientras golpeaba la puerta como con intensión  de derrumbarla.

Reí y me levanté de la cama, Keanu me tomo del brazo y me regreso a él para darme un beso antes de que me fuera.

Me metí al baño y dí una rápida ducha, para luego colocarme un vestido de color______, y unas sandalias, dejando mi cabello húmedos suelto.

— Estás preciosa, me gustaría quitartelo, pero Tenemos que irnos— me guiño el ojo y sonreí.

— Te amo, Chuck Spadina — ambos reímos y luego el se levantó de la cama.

Entrelazó nuestras manos y salimos de la cabaña, el me ayudó a cargar mi maleta y luego fue a su cabaña por sus cosas.

Candy y yo lo esperamos afuera del camión.

— _____ ¿Te gustaría estar conmigo en el autobús?— preguntó Harry y ví a Candy ponerse triste.

— Ella se va a sentar a mi lado, ayer se sentía mal y es mi deber ver qué esté bien— intervino en la conversación Keanu.

— Se preocupa mucho por tí ¿Cierto?— dijo y frunció el ceño.

— Si, bueno él es así— le respondí.

— Te amo— susurró a mi oído, Keanu.

Subimos al autobús y todo el camino pude sentir la mirada de Lissa fulminandome con la mirada.

(...)

Llegamos a casa y realmente estaba agotada, aparte de que mi piel tenía un leve color rojo.

— Hola ¿Cómo les fue?— nos recibió mi padre.

Ayudó a Keanu con las maletas.

Mentirle a la persona que ha dado todo por tí, me provocaba el dolor más grande en el pecho y el sentimiento de culpa que no podía guardar por mucho tiempo.

— Bien, todo tranquilo— contesté cabizbaja.

No podía mantenerle la mirada.

— Charles, mañana iré a buscar un departamento y quería que _____ me ayudara a decorarlo.

— Oh, Claro ella es muy buena con esas cosas, me encanta la idea aunque estaría más feliz si decidieras quedarte aquí.

— Gracias pero es hora de buscar mi propia guarida.

— Ni que tuvierais algo que ocultar— río y Keanu y yo nos miramos.

Me atragante con mi propia saliva. Siempre he creído que morir atragantada por mi saliva sería más probable a que un camión me pasará por encima.

— Si, eh...nada— contesto Keanu.

—¿Estás bien____?— mi padre me dió palmaditas en la espalda para que me aliviará y funcionó.

Keanu y yo jugábamos con Fuego y eso lo teníamos claro.

Sabía que Si juegas con fuego te puedes quemar, pero si no lo haces, te morirás de frío. Y yo tengo la culpa mi corazón era tan frío que Apenas sintió su calor de dejó llevar.

Quiero arriesgar, quiero intentar, quiero jugar con fuego y encender este amor.

Será difícil mantener esto en secreto...