7 Minutos en el cielo.

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Aquí Estamos los dos solos, encerrados en un closet.

- Así que Mary Ann ¿Cierto?- dijo Keanu en un tono algo extraño.

- Si, exacto- contesté y el río.

- ______, no tienes que mentir- dijo y entonces sentí mi rostro enrojecerse.

- ¿Cómo me has descubierto? - le pregunté.

- Es difícil no verte a los ojos o verte sonreír y no reconocerte- añadió con una sonrisa en el rostro.

-¿Qué ha pasado después de aquél día?- le pregunté cabizbaja.

- Tú padre se ha endurecido conmigo y me ha dicho lo decepcionado que estaba de mi y que no quería que me acercará de nuevo a tí, no pude más con esa culpa, por eso decidí que debía dejarte ir.

-¿Y no te preguntaste lo que yo quería?- le reproché.

- No lo pensé.

- Yo me hubiera ido contigo sin pensarlo, pero...nunca volviste y no me contestaste ningún mensaje tampoco.

- Lo único que sabía es que te quería y no podía hacerles daño. - añadió.

¿Te quería? ¿Acaso ya no lo hacía?

- ¿Me querías?

- Te quiero.- dijo en un susurro.

-¿Qué?- le pregunté.

- Te Quiero.

- Te he escuchado.

- ¿Entonces?

- Esperaba un bes...

Entonces me besó. Lo único que quería en estos momentos son sus labios junto a los míos.

- término su tiempo- gritaron y abrieron el closet.

Keanu y yo nos separamos rápidamente. Salimos del closet sin decir nada y Candy aprecio entre la multitud y me abrazó.

- Aquí estás...¿Te diviertes?- dijo y comenzó a reír frenéticamente.

- ¿Estás ebria?- le pregunté.

- Un poco...- añadió y continuó riendo.

- Vale, dame las llaves del coche te llevaré a tú casa.

Candy forcejeó conmigo hasta que logré quitarle las llaves y ella Hizo un berrinche como niña pequeña.

Había perdido de vista a Keanu por el hecho de cuidar de Candy.

Ayudé a caminar a Candy que con trabajo caminaba sin tambalearse.

- Candy deja de reírte

- Eres una aguafiestas- dijo y río.

Candy se tambaleó y casi nos hace caeré.

- Candy necesito que me ayudes- le reproché pero ella sólo río y jugó con mi peluca.

- Te ves bonita de rubia ¿No te gustaría serlo?, Yo de pequeña quería ser rubia- desvarío y comenzó a llorar.

«Oh por dios»

- ¿Necesitas ayuda?- escuché su voz.

- Yo...un poco- le contesté a Keanu.

- Vale- dijo y colocó el brazo de Candy en su cuello para ayudarle.

Abrí el auto y Keanu me ayudó a recostar a Candy en el asiento trasero. Resople y me retiré la película dejando mi cabello revuelto al Natural nuevamente.

-¡Gracias!- dije y le sonreí.

- No hay de que, sabes que siempre te ayudaré.

Keanu me abrió la puerta del conductor y estube a punto de entrar. Me paré en seco frente a él.

-¿Qué pasará con nosotros?

- Yo...no puedo seguir haciéndole daño a Charles- Keanu bajó la mirada-, ¿Amigos?

«Como dolía esa palabra de sus labios»

Me siento en blanco, ni siquiera sé que sentir.

- Amigos- le contesté con los ojos vidriosos.

Keanu me acerco a su cuerpo y nos abrazamos.Dejé de existir en ese momento cuando supe que ese había sido el último abrazo como algo más que amigos y al recordar el último beso que no se volvería a repetir.Deje todo mi corazón en ese último abrazo

Nos separamos como quien no quería la cosa.

- ¿Te vere de nuevo?- pregunto.

- Si, tal vez podríamos hablar con mi padre y arreglar las cosas ¿No crees?

- Lo intentaré - contestó.

Asentí y entonces le dí un beso de despedida en la mejilla para luego meterme en el auto y encenderlo. Dejé que el rugir del motor me aliviará un poco el ruido de mi mente.

Keanu se alejó y entonces me quedé mirandole Mientras se alejaba cada vez más para ver si volteaba a verme una última vez... Keanu se giró y nuestras miradas se cruzaron. Nos miramos demasiado tiempo para ser "Solo amigos".

Los dos bajamos la mirada al mismo tiempo, Porque ambos sabemos que si nos miramos los sentimientos vuelven a alborotarse, por eso hemos dejado de hacerlo. Porque cuando volvemos a coincidir sus ojos cuentan que no me han olvidado y los míos le confirman cuanto quiero estar entre sus brazos para siempre.

(...)

El camino a casa de Candy se me hizo eterno pero me ayudó a derramar unas cuantas lágrimas.

—¿Lo amas?— dijo Candy arrastrando las palabras.

— No, somos sólo... Amigos— le contesté y ella bufó.

— Si sólo son amigos ¿Por qué lloras como Magdalena?

— Por qué es difícil pensar en perderlo. Pero más difícil es estar enamorada del mejor amigo de mi padre y no lastimarlo a él, a mi padre o a mí.

— Yo sólo se que si lo amas y el te ama deberías hacer algo hoy, si no mañana se que despertarás  y desearas con todas tus fuerzas repetir este momento una y otra vez pero será imposible y te arrepentirás de no haber hecho algo a tiempo— añadió Candy y luego se sumió en un profundo sueño.

Candy me había dejado pensando en cada una de sus palabras.

(...)

Llegamos a su casa y la bajé con cuidado del auto, la llevé hasta su habitación sin hacer ruido para no despertar a su padre.

—¿Me prestas tú auto?— le pregunté y ella asintió medio dormida. —¡Gracias!.

Corrí hacía el auto. Candy tenía razón, bueno...dicen que los niños y los borrachos siempre dicen la verdad ¿No?.

Entonces emprendí rumbo hacía el departamento de Keanu... Hablaría con él y arreglaríamos las cosas.

Ella le deseaba. Él la amaba. Y a pesar de las diferencias y de los obstáculos ¿Lograrían ser felices?.




Pasión Prohibida [Keanu Reeves y Tú] •Terminada•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora