Zafiro.
Años atrás...
—mami...— esa voz...mi niña.
Voltee a ver a esa pequeña niña, ella se fue acercando a la cama a paso lento, ella había entrado a la habitación sin hacer ningún ruido, llegó a mi, en sus pequeñas manos traía un peine, lo dejo en la mesita de noche, me miró detalladamente para luego fruncir el ceño, subió su pequeña mano a mi cabello rojizo, lo acarició un poco.
«es muy inteligente para su edad»
—bonita...— dijo casi en susurro mirando mi cabello y rostro, solté un sollozo.
«y pensar que podría ser la última vez que la vea...» no pienses en eso todavía...
De la nada dejo de verme y acariciarme, ella miraba sus manos, había unos pocos cabellos rojizos en ellas...mi cabello.
No hizo ninguna mueca, solo se quedó mirando sus manos, supongo que tratando de entender por qué tenia parte de mi cabello en sus manos,
Ella dejó los cabellos en la mesita de noche con cuidado y en silencio.
Se subió a la cama, se acercó a mí y se recostó de mi pecho, empezó a acariciar las puntas de mi cabello que estaban en este.
Yo le acaricié su espalda suavemente.
—te quiero, mami...— logre ver su mirada triste por unos segundos, luego se volvió a poner seria, se sentó, agarró mi mano y la empezó acariciar.
— yo te amo, mi pequeña heredera— como amo ver su expresión cuando la llamo así.
La historia de ese apodo es un tanto curiosa, pero en resumen, su padre al enterarse que era niña sólo pensó que sería la heredera de todo su imperio y yo me burlé de eso ya que yo no lo había pensado, y así se quedó el heredera.
Con la mano derecha le acaricié suavemente la mejilla.
Sus ojos verdes se iluminaron, su rostro se relajó un poco. «es muy seria mi niña...» Lo heredo de mi papá.
—¿me peinas, mami?— señaló con la cabeza el peine que había traído. Le sonreí encantada.
— Claro que si mi niña...— me acomode en la cama y me senté, agarre el peine, mi niña se volteó y sin más empecé a peinar suavemente su cabello rojo que era igual al mío.
Su cabello es muy suave y liso, su piel blanca cremosa y unas pecas casi invisibles en las mejillas.
Termine de peinarla, ella se volteó para verme. Su carita reflejaba un tanto de tristeza...«no le gusta que la vean demostrando sentimientos» es tan parecida a mi papá.
— estarás bien sin mi, Amber...tu papá cuidará de ti y te amará con cada parte de su corazón, como lo ha hecho hasta ahora...podré hacerte falta, pero nunca me iré, aunque no me puedas ver, siempre estaré ahí...te amo mi heredera, eres la felicidad de mi vida y una de las razones por las que intento sobrevivir ¿si?...— dije entre sollozos, ella fruncía el ceño y negaba, desvió la mirada.
Agarre su carita entre mis manos e hice que me mirara.
«Solo tiene 4 años, no recordará nada de lo que le diga»...déjame solo una pizca de esperanza ¿si?
— eres una de las cosas que más amo en este mundo ¿me entiendes?...sé que tú sin mi serás una mujer excepcional, inteligente y preciosa...tu padre hará que lo seas, que seas fuerte...que tengas la fuerza y la frialdad que yo no pude tener para ciertas cosas...— y sin decir nada más, la abracé.
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La heredera de la mafia (terminado, pero en edición)
Storie d'amoreAmber Ackerman, mafiosa, asesina y despiadada. •Capaz de matarte si te metes en su camino y No le tiembla el pulso al hacerlo• •problemas emocionales• •consigue todo lo que quiere sin importar el costo. • ¿amor ? Esa palabra no existía para Ambe...