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-Buenas tardes a la chica más bella de este planeta.
New aparece por detrás de mí como salido de la nada mientras me tiende un pequeño ramo de flores.
-Desde que sabes a qué hora tengo clases de inglés, ¿vas a acompañarme hasta allí todos los días?
-¿Y por qué no? No tengo nada mejor que hacer y de esta manera puedo pasar tiempo contigo. ¿Tu hermana no va hoy?
-No. Está enferma. Supongo que ya volverá a las clases la semana que viene.
-Deséale que se mejore de mi parte.
-Lo haré. Y gracias por esto -alzo el ramo.-¿Cómo sabías que los lirios eran mi flor favorita?
-Porque son tan elegantes como tú.
Me sonrojo por su piropo y le pego un pequeño golpe en el hombro.
-No digas mentiras o te crecerá la nariz como Pinocho -contesto ruborizada.
-No miento. ¿No lo ves? Mi nariz sigue teniendo su tamaño normal -dice tocándosela.
-Yo creo que te ha crecido un poco, ¿no? -bromeo.
-¿Qué? -grita alarmado.-¿Me lo estás diciendo de verdad?
-No, tonto. Que todo te lo tomas muy en serio.
-Si es relacionado con mi físico, por supuesto que sí.
Lo miro de reojo con mala cara. Ese es un argumento típico de un narcisista.
-Tengo que estar guapo para ti -añade rápidamente.
-Deberías saber que para mí el físico no es lo que importa. Hay muchas otras cualidades de una persona que son más atractivas que el físico. A la que sí le importa es a mi hermana. Es tan superficial...
Él se queda callado. Su móvil comienza a sonar. Mira el nombre brillante de la pantalla y maldice por lo bajo.
-Sigue tú, ahora te alcanzo -me dice parándose.
Me gustaría saber quién lo ha llamado porque parece haberse enfadado pero no soy una cotilla. Lo único que le escucho decir es "te he dicho que no me llames" muy molesto. El primer pensamiento que se me viene a la cabeza es que probablemente sea una chica con la que también liga como lo hace conmigo. Los celos hacen su aparición, cosa que no comprendo porque New ya me pidió salir una vez y lo rechacé, pues tenía el punto de mira en otro chico. Se lo tomó bastante bien y me dijo que seguiría intentando conquistarme. Aún no ha cesado en el intento. A veces pienso que cualquier día voy a acabar cediendo a sus encantos (que tiene muchos).
-Siento mucho la interrupción -se disculpa cuando me alcanza.
-No tienes porqué.
En la puerta de la academia nos despedimos, le doy las gracias por acompañarme. Aunque le insisto en que se marche a casa, sé que se quedará por los alrededores esperando a que yo salga.

Tal y como me esperaba, al terminar la clase, New me espera fuera.
-¿No te dije que volvieras a casa? Conozco el camino de vuelta.
-Me gusta asegurarme de que llegas sana y a salvo.
-¿Todos los días? -le pregunto alzando una ceja.
-Por supuesto. Es verano y no tengo nada mejor que hacer. Aún sigo sin comprender que vayas a clases en vacaciones.
-Quiero avanzar en inglés para presentarme al examen oficial en diciembre.
-Eres tan inteligente y aplicada -me elogia.- Cuando te examines, puedes enseñarme a mí. ¿Qué te parece?
-¿Y qué piensas darme a cambio?
-Mi amor -hace un corazón con los brazos mientras lo dice.
Debido a lo adorable que se ve, tengo que apartar la mirada porque sino me dejaría llevar y lo achucharía como un peluche o le pellizcaría los mofletes.

Llegamos a la puerta de mi casa. Toco al timbre.
-Te doy las gracias de nuevo por acompañarme. Aunque no tienes porqué.
-Ya te lo he dicho, no me las tienes que dar. Lo hago porque quiero no porque nadie me oblige -me dedica una sonrisa.
Mi hermana abre la puerta. Tiene la nariz roja por culpa del resfriado y la cara apagada, pero aún así se ve guapa. A veces la envidio. Ella saluda a New, el cual parece haberse quedado sin palabras. No sé si por timidez o por vergüenza. Antes de poder despedirme, mi hermana dice:
-¿Qué te parece si te quedas a cenar?
Me mira buscando mi aprobación. Ruedo los ojos y asiento disimuladamente.
-M-me encantaría, gracias.

Lo dejamos pasar y mientras se encamina hacia la cocina, mi hermana me habla en susurros para que no se entere.
-Se nota que está colado por ti pero como no te des prisa, me lo pediré para mí -dice a modo de advertencia como si New fuera un caramelo.
No le contesto porque la rabia me invade. Sabe que es guapa y que muchos chicos están por ella, pero que quiera a New solo por capricho me pone enfurecida. Se interesa en él porque él está interesado en mí. Solamente por esa razón, que yo sepa.
Mis padres le dan la bienvenida animadamente, ya que lo han visto más veces. Cenamos tranquilamente.
-Estás muy callado, ¿te pasa algo? -le pregunto.
Cuando está delante de mi familia se vuelve otro chico, muy tímido y nada charlatán comparado con como es cuando está solamente conmigo.
-No, nada. Solo que me siento cohibido. He estado más veces en tu casa pero no me había quedado a comer -me revela sonrojado.- Cambiando de tema, mañana voy al centro a comprar un traje para una boda que tengo. Si quieres puedes acompañarme.
-Mmm... -me llevo un dedo a la barbilla mientras pienso en las tareas que tengo que hacer mañana.- Vale -acepto sonriendo.
-Puedes decírselo a tu hermana por si le apetece también.
-Seguro que no. Habrá quedado con algún chico -miento.
Él se queda como callado, disgustado pero solo dura unos instantes. Luego me dice al oído:
-Más tiempo para nosotros dos solos.
-¡Ssshhhh! -exclamo alarmada por si mis padres lo escuchan.
-Di que no estás deseando que sea mañana -me sigue susurrando.
-Mamá, ¿me pasas la sal, por favor? -pido cortando la conversación con New para no sonrojarme más.

THE BOYZ ❁ཻུ۪۪ imagina ❁ཻུ۪۪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora