ellos querían hacer bien su trabajo,
pero sus sentimientos estaban dificultando todo.
•Hyunlix
•minsung
•mi segundo bebé☺
•errores ortográficos
•mención de otros ships
•contiene LENGUAJE FUERTE
•BL
•si no tes gustan estos ships abstenerse de leer.
•...
La fiesta anual del hotel, era una de las celebraciones más importantes del imperio sky, Ese día nos encontrábamos preparando todo para la dichosa reunión, aunque últimamente mi humor estaba para la mierda y todo debido a que jisung los días pasados se había comportado como un niño berrinchudo, tratando de darme celos, tratando de probarme, tratando de que me rindiera.
Pero no podía... Mi deber era cuidarlo, no importaban mis sentimientos, lo único que importaba era su seguridad.
Ahora siempre nos pedía pasar a recoger a su novia, almorzaba con ella y pasaban más tiempo de lo normal juntos.
Todo seria normal para mi, si no hubiese permitido que llegáramos a ese beso.
Ahora, mis sentimientos estaban en un laberinto sin salida. Me gusta jisung Pero... es mi es protegido. Debería renunciar. Pero... no quiero dejar de protegerlo. Odio que este con ella. Pero... no soy nadie para impedirlo.
¿Que puedo darle yo? El nunca ha tenido una relación con un hombre, por mi parte, mi homosexualidad la he vivido tranquilamente, solo dos parejas en mi vida y un amor imposible por el chico por el cual tendría que morir si fuese necesario.
-¿Estas listo?
Le pregunté mientras lo veía arreglarse en su habitación frente al espejo.
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"Hermoso" Solo eso podía pensar, se había teñido el cabello hace poco, pero no era algo duradero, lo hacia seguido.
- si... estoy listo.
Me respondió fríamente mientras se acercaba a mi.
- ¿Te parece que me veo bien minho?
Me preguntó, mientras muy cerca me miraba a los ojos y una de sus manos tomó mi mano.
- me parece apropiado el traje joven jisung.
Le dije manteniéndome en calma sin mirarlo a la cara, mis ojos enfocaban cualquier cosa menos su hermoso rostro.
- tu también te ves bien... diria que demasiado bien.
Se acercó hasta que su pecho se pego al mio, inclinó su cabeza hacia un lado, la escondió en mi cuello y sus dos manos se posaron ahora en mi cintura.
- No deberías ser tan frío minho. Y no deberías verte tan bien. Vas a atraer muchas miradas y eso me va a hacer enojar.
Mi corazón latía rápidamente, pero yo seguía quieto, sin devolver el dulce abrazo, sin caer en su coqueto juego.
- su NOVIA lo debe estar esperando joven, debemos partir.
Sentí su leve sonrisa, su nariz recorrió mi cuello y sentí un pequeño roce de sus labios... Un pequeño beso que desestabilizaba aun más mi mente.
