El paisaje frente a nosotros se veía tan blanco, que parecía que había nevado un mes entero. Algunos copos aún flotaban en el aire, dejando en suspenso si la tormenta iba a continuar o detenerse. Nuestros pasos hacían crujir el hielo sobre el pavimento en medio del silencio de aquella noche de invierno. Lo bueno de haber pasado el último tiempo en Portland era que el frío de Newark ya no se sentía tan frío; eso, además de sentirme un esquimal capaz de reconocer 50 matices de blanco distintos. El ruido del taxi partiendo a nuestras espaldas, coincidió con la mano de ________ sosteniendo la mía. Miré su rostro, coloreado por las luces navideñas que colgaban en la fachada de la casa de mi madre, y solo pude ver nerviosismo.
—¿estás seguro?
Solté una risa, divertido de oír aquella pregunta que repitió sin cesar durante todo el viaje a Nueva Jersey.
—¿qué problema podría haber?
—es la cena de navidad y no le avisaste a Donna que venía, y ya sabes cómo se pone si es que falta comida en la mesa—dijo atropelladamente.
—en ese caso seré yo quien se quede sin comer, ¿por qué te aproblemas?
—pues, no quisiera incomodar—se encogió de hombros.
—ay vamos, sabes que eres la favorita en esta casa—entorné los ojos.
________ soltó una risa, bien sabía que era cierto lo que acababa de decir. La acompañe en su risa y saqué la llave de mi bolsillo para abrir la puerta. No obstante, como siempre, me enredé en el orden en el cual se debían abrir las tres chapas con las que mamá aseguraba la casa, y al cabo de un minuto pude escuchar su voz regañándome desde adentro.
—Gerard Arthur, ¿cuántas veces te lo debo repetir? Primero es al medio, luego arriba y al final...—se detuvo en seco al abrir la puerta—¡oh por Dios!—chilló llevándose las manos a la boca, anonadada.
—sorpresa—balbuceó _______, siendo lo único que alcanzó a decir antes que mi madre la abrazara con todas sus fuerzas.
—¿cómo es posible esto? ¿Qué haces acá? ¡No puedo creerlo! ¡Este es el mejor regalo de navidad que pudimos recibir este año! ¡Toda la familia junta otra vez!—por supuesto mamá no paraba de hablar—pero insisto, ¿qué haces acá? No me digas que...
Paseó la mirada entre nosotros dos, llevándose las manos a la boca nuevamente.
—nos estamos dando otra oportunidad—respondió _______, apoyando la cabeza en mi hombro.
—¡qué maravilla! Cariño, me alegro mucho—la abrazó con ternura, y luego de eso se giró hacia mí frunciendo el ceño—pobre de ti que la hagas derramar una sola lágrima esta vez, ¿entendiste? Mira si vas a hallar a alguien igual, ¡jamás!
Pude ver a _______ reír en silencio sobre el hombro de mamá. Le hice un ademán dándole a entender que tengo razón respecto a que es la favorita de la casa. Volví la mirada a mi madre y resoplé.
—lo sé mamá, lo sé—pasé mi brazo por sobre su hombro—de todos modos, ¿hace cuánto no me veías? Y lo primero que haces es regañarme... y en vísperas de navidad—me hice el ofendido.
—lo hago porque te quiero—besó mi mejilla dejando un rastro de labial marcado en ella—ya, entremos, que nos estamos congelando acá afuera.
Y apenas pusimos un pie adentro, se escuchó otra voz acercarse a la entrada de la casa. Resultó ser Mikey.
—¡mamá! ¿Qué sucede? El pavo se te va a recocer en el horno, además ya tengo hambre...—se detuvo en seco al toparse con nosotros—¡¿QUÉ!?—gritó.
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Love Has Led Us Astray || Gerard Way y tú
FanfictionEs el Warped Tour del 2004. Gerard Way perdió el control de sus adicciones mientras que su novia (tú) intenta día a día rescatarlo de sí mismo. Agobiada de la realidad, ella prefiere vivir de los recuerdos. Sin embargo con el correr de los días la...