Chim!; 윤민

o c h e n t a

Finally, un cap en tiempo y forma.

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— ¿Puedes creer que Tae le pidió matrimonio a Jeongguk? — habló el azabache mientras alimentaba a su pequeño con leche tibia en su biberón.

— Uhm, no sé qué es eso, hyung... — hizo un puchero.

— Es... pues le dijo que si se casaban..., no sé cómo explicarlo.

— ¿Es cuando te dan un anillo? — movió su dedito anular.

— Eso.

— Oooh..., ¿y qué tiene?, ¿Qué no eso es bueno porque se quieren mucho mucho?

— Se supone que es bueno..., el problema es que Jeongguk se asustó y se fue corriendo a su cuarto y Tae durmió en el sofá llorando.

— Oh..., que feo..., ¿entonces dijo que no?

— Jeon no ha salido del cuarto desde ayer que pasó eso.

— Aah..., yo diría que sí.

— ¿A Tae?

— S-, ¡No!, a usted, hyung.

Soltó una risilla y le dio un piquito en los labios.

El minino mayor se encontraba acomodando al menor en su cuna (la cual estaba alado de la cama de la pareja). Sintió unos delgados brazos abrazarle por detrás.

— Por fin se durmió — habló el azabache y pegó su rostro al rubio cabello del minino que abrazaba.

— Sí — bufó —, fue difícil... y me jala mi cabellito — se dio la vuelta quedando de frente al mayor.

— ¿Te he dicho lo hermoso que estás?

Se sonrojó enormemente — Hyuuung... — cubrió su rostro con sus manos.

— Déjame hacerte cumplidos, bebé — retiró sus manos de su bello rostro y lo volvió a abrazar por la cintura.

— Me da mucha penita...

— No debería — bajó sus manos hasta su trasero y lo alzó.

Cruzó sus piernas en la cadera del mayor y lo abrazó por los hombros.

— Aaah, hyung... Estoy en celo, noo...

— ¿Por qué no?, creí que en tu celo lo necesitabas...

— Pues sí, pero lo hicimos ayer..., ¿no le molesta hacerlo mucho?

— Claro que no, lindo — besó su naricita.

— Bueno... — tomó sus pálidas mejillas y lo besó.

El mayor se recostó con el menor sobre él sin dejar de besarse.

Introdujo sus manos al bóxer del otro, quien al sentir el tacto se alejó del beso.

— Sus manos están frías — gritó en voz baja para no despertar a su hijo.

— Lo siento..., deberías calentarlas, ¿no?

— Hyung puerco — dijo con una risilla y se volvió a inclinar para besarlo nuevamente.

— Mmm, hyung — gimió bajito mientras daba cortos saltitos sobre el miembro del mayor.

— Aah, Ji Min — apretó su cintura.

Tener al minino dando brincos sobre él era una imagen que quería tener incluso impresa. Era rara la ocasión en que el menor aceptaba hacerlo en aquella pose, y cuando lo hacían era glorioso.

— H-hyuung — murmuró en un leve gemido.

Recargó sus manitas en el pecho pálido del azabache y dio unos brincos un poco más lentos.

Finalmente, el mayor terminó y dio un largo suspiro. El rubio se inclinó lentamente mientras sacaba el miembro de su pareja de su interior.

Soltó un pequeño quejido y se recostó siendo cobijado por el mayor.

— Tengo frío, hyuung.

El azabache lo abrazó y lo apegó totalmente a su cuerpo para que generaran calor.

— Duerme bien, hermoso — plantó un beso en una de sus orejitas.

— ¡Yoon Gi, Yoon Gi, Yoon Gi, Yoon Giiiii! — gritó el castaño desde la entrada hasta que llegó al cuarto del mencionado. Al ver que no despertaba comenzó a removerlo con algo de brusquedad — ¡YOON GIIIIII!

— ¡¿QUÉ MIERDA QUIERES?! — despertó y lo empujó sin levantarse.

— ¡Necesito contarle algoooo!

— ¿Es ese algo tan importante como para que entres a mi casa y a mi cuarto sin permiso?

— ¡Sí!

Bufó y se sentó aun cubriéndose, debido a que seguía sin ropa — ¿Qué?

— ¡Jeon aceptó!

— ¿En serio?, yo te hubiera mandado a la mierda...

— No diga esooo... Me dijo que corrió en el momento porque estaba asustado, que no se lo esperaba, pero justo hace un rato me dijo que sí — redactó todo con una gran sonrisa.

— Bien por ti...

— ¿Y usted para cuando, eeh? — lo codeó un poco.

— Sabes que no me gustan esas cosas, Tae. Por más que ame a Ji Min no le pediría eso..., y menos si es la mierda de ir a la iglesia y estar como idiotas escuchando lo que dice un tipo... Por suerte él no entiende de eso.

— Bueno..., pero quiero verlo en mi boda, hyung. Se verán muy lindos con trajecito, de solo imaginar a Cha Min me dieron ganas de vestirlo ya.

— Claro, estaremos ahí, pero primero preocúpate en tener dinero para eso.

— Es verdad, soy pobre..., ya veré qué hago, si todo sale mal, me caso en tu patio, es lindo y tiene alberca.

— Como quieras.

— Bueno, adiós, hyung — se levantó de la cama —. Iré a comer.

— No me importa, adióos... — se dio la vuelta para recostarse de nuevo, pero se encontraba su pareja sentado viéndolo fijamente — ¿Qué sucede?

— Casémonos.

— ¿Qué?

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¿Podría alguien decirme si les debo algún cap?, estoy algo revuelta con eso de que no actualizo y luego les subo el que debía y así.

Si les debo un cap díganme y lo hago llegando de la escuela para subírselos y no deber nada.

Lastkm.