Advertencia: Este capítulo contiene a un personaje que saldrá más adelante en el libro y un posible spoiler de lo que pasará después del siguiente arco. Puedes leerlo sin problema, si surge una duda, puedes dejar un comentario y más adelante lo aclararé. Disfrútalo.
-Bien, ahora les contaré la segunda historia de esta tarde previa a Navidad- los niños y niñas aplaudieron contentos, tomaron algunas almohadas y peluches que estaban a su alrededor y se acomodaron mejor en el espacio-. Erase una vez, en la víspera de año nuevo, una joven trabajadora que estaba organizando todo para la fiesta de esa noche...-.
"-Muy bien, ahora quiero que coloques esa parte en el centro- la maestro del gremio señaló con su bolígrafo el espacio donde deseaba que se colgaran los números del nuevo año que venía, pero el pobre hombre que les estaba ayudando con el acomodo de los adornos de la fiesta no alcanzaba dicho lugar-. En serio, Damian, es muy fácil poder ubicarlo y colocarlo- le dijo entre risas y el hombre agachó la cabeza dándose por vencido de sus intentos de hacer las cosas bien en ese día-. Préstamelo- Damian le vio confundido.
Rose dejó la libreta y el bolígrafo en una mesa cerca a ella, dio un par de pasos hacia atrás y, con un salto, llegó a la parte del techo donde estaban acomodando los decorativos del evento. Rose tomó el enorme número con una sola mano sin problema, le puso el gancho y lo colocó en el lugar que quería sin ninguna dificultad.
-Listo- dijo Rose con una enorme sonrisa.
-Por eso usted es el maestro de este gremio, señorita Murakami- le dijo Damian mientras le aplaudía con admiración.
-Bien, sigan con los demás, ya saben cómo ponerlos- les ordenó Rose, Damian y su compañero asintieron y bajaron de las enormes escaleras para seguir con su trabajo.
-¡Jefesita!- la voz de Mike rebotó en todo el espacio, a pesar de que la gente estaba haciendo mucho ruido con sus movimientos por el gremio con los preparativos.
-Ya bajo- dijo Rose sin necesidad de alzar la voz, nuevamente saltó y calló de pie sin provocar un solo estruendo.
-Eso fue impresionante- dijo Dante llegando con los dos.
-Gracias- le dijo Rose con una amplia sonrisa-. ¿Qué pasó, Mike?- le preguntó mientras tomaba su libreta y bolígrafo.
-Tienes un mensaje- cuando Rose escuchó decir eso a Mike, detuvo su andar y se dio la vuelta para verlo con sus ojos encendidos-. Lo sé, me dijiste que en estas fechas festivas no te molestara con estas cosas, pero es urgente- la mirada de fuego de Rose se apagó.
-Bien, reprodúcelo- Rose siguió observando a su alrededor y palomeaba las cosas que ya estaban listas.
-Pero...- Rose le vio alzando una ceja-. Bien, lo siento, jefesita- tragó saliva nervioso Mike y sacó la lácrima que contenía el mensaje.
Mike colocó el objeto sobre la barra que dividía el pasillo principal y la cocina del gremio, el oji-azul tocó dos veces la esfera verde y se proyectó la imagen de una joven mujer con una fina tiara de diamantes sobre su cabeza.
-¿La reina Anastasia?- dijo Dante y Rose alzó su vista; cabello rojo y ojos azules, definitivamente era la reina de Arestia.
-"Hola señorita Rose, soy la reina Anastasia del reino vecino Arestia, se que usted entregó un mensaje al consejo mágico especificando que en estas fechas usted y su gremio no se encontrarían en disponibilidad de llevar a cabo misiones y cada uno de los reinos de todo el mundo respetó aquella decisión. Lamentablemente, la razón de mi mensaje es que debo solicitarle una misión de emergencia de clase perla"- en ese momento, toda la atención de Rose se fue sobre el mensaje de la reina y tapó de la vista de Dante aquella belleza-. "Como sabe, nuestro reino es muy conocido por la estrella de cristales que tenemos en el centro de nuestra plaza. El cual, cada fin de año, dicha estrella se coloca hasta abajo y conforme se acerca la hora, dicho objeto va subiendo quedando en la parte alta anunciando el comienzo de un nuevo año. Como sabe, dicha estrella es la representación de una de nuestras más especiales tradiciones, ya que dicha estrella fue regalada al pueblo por el fundador de nuestro reino hace diez mil años. De igual forma, debo recordarle que el objeto fue hecho por nuestro fundador y es la suerte materializada en una hermosa estrella de cristal"-.
ESTÁS LEYENDO
K.A.R.M.A. II
Fiksi PenggemarEn un mundo sin existencia, en un lugar sin vida misma, mis manos se tocan. Todo a mí alrededor está oscuro, todo está perdido, ya no hay nada. Todo por lo que luchamos, todo por lo que vivimos, todo ha dejado de ser. Lo que una vez llamamos vida ha...