Rouse: El Internado Misterioso (Finalizada)

Veinte

¡¡Por fin terminamos de limpiar este lugar!! A veces los chicos del baloncesto pueden ser desordenados, ahí incluyo a Connie también.

-¡Hey, que lugar más limpio chicos, hacen buen equipo! -Dijo el director acercándose a ambos.

-¡Gracias, hacemos el esfuerzo por cumplir con la tarea! -Dijo Sofia algo sonriente.

-¡Bien! ¡Vamos a comer algo! ¿Que les parece chicos? -Ambos nos quedamos un poco sorprendidos.

-¡¡Si, yo si quiero! -Se emocionó Sofia ¿Pero porque le gusta la idea? A mi más bien me dá escalofríos, es el director, no se debe confiar en él.

-¿Tu que dices Jerome? -No se que contestarle al director.

-¡Bien! -Dije sin ningún interés, de todos modos es mejor que estar a solas por el momento con Sofia.

Los tres nos sentamos y empezamos a comer, la verdad es que ¡¡No puedo creer que le haya tocado sus pechos!! ¡¡Soy un idiota!! Aunque fue un accidente, no estuvo tan mal y no me arrepiento de nada, se sintió bien.

¿Pero en que demonios estoy pensando? ¡Soy un pervertido!

-¡Esto esta buenísimo, Sofia!

-¡Si, es cierto, muy bien cocinado director!

-Aunque no soy muy bueno a la carne, puedo decir que es exquisito.

-Lo mismo digo, director.

Ambos estaban hablando muy animados, ¿Desde cuando se llevan tan bien? Ella se ve muy cómoda con el director ¿Porque tanta confianza entre ellos?

-Te digo la verdad, si yo no fuera el director me hubiera reido en frente de ese chico cuando le estrellastes el trozo de torta en la cara.

-¡¿Enserio?!

-¡Si, fue muy gracioso! Jajajajaja pero como soy el que debe poner orden aqui, tuve que castigarlos a todos, lo siento, aunque eso no quita las ganas que tenía de burlarme jajajaja jaja.

-¡Que gracioso, director! Jajaja jajaja

Ambos se está ríendo, como es posible que esto esté pasando, el director es tachado como el más arrogante, serio y muy disciplinado de este lugar, el hombre frío que no le gusta mostrar su lado amable, no digo que sea un ogro, pero no es el tipo que sonríe tan fácilmente y menos con un estudiante.

-Jamás lo había visto reír así director Matías -Dije en tono serio.

-¿Enserio? Bueno, supongo que ustedes me agradan mucho.

-Bueno, con mi persona no había sido así director, siempre es muy serio conmigo -Traté de sonar algo hiriente.

-Bueno, creo que no he tenido la oportunidad de conocerte mejor, pero sabes, me demostrastes que eres un hombre con los pantalones bien puestos al defender a Sofia de ese chico.

No dije nada más, la verdad no quiero admitir ni negar nada de eso. Seguían ríendose y hablando muy animados, no se porque estoy tan molesto.

-Director y ese inspector que viene el lunes ¿Usted lo conoce? -Preguntó Sofia, esa es una muy buena pregunta.

-No lo conozco, solo sé que me dijeron que es un hombre como de mi edad y es muy estricto con su trabajo -Dijo y nos quedamos en silencio.

Después terminamos de comer y botamos todo lo desechable, seguimos al director porque nos iba a poner hacer la siguiente tarea.

-¿Que vamos a limpiar, director?

-Una parte del patio, está muy sucia y necesita un poco de orden. Aquí es chicos, quiero que limpien todo lo que puedan, después de esto serán libres de todo castigo.

-¿Libres? -Dije sorprendido.

-Así es, Jerome y Sofia, este es su última tarea, apartir de esto ya no están castigados, mañana pueden descansar todo lo que quieran, eso si, no podrán salir del instituto.

-Entonces eso quiere decir, que aún estamos castigados -Dije encogiendome de hombros.

-¡Bueno, pero ya no tendrán que limpiar más! -Dijo y se fué dejándonos solos.

Había un silencio incómodo, no sabía por donde empezar o que hacer, además aún me siento nervioso por lo que hice.

-Oye, se que no quieres socializar conmigo, pero hagamos esto rápido, trabajemos en equipo para terminar y largárnos de aquí -Me dijo con una mirada muy seria.

-Bien, estoy de acuerdo ¿Que quieres hacer primero?

-Porqué no vas por los utencilios de limpieza, mientras yo voy acomodando algunas de estas cosas.

-¡Ya vuelvo! -Dije y fui a la bodega, tomé unas escobas, rastrillos, bolsas para basuras y una manguera.

Regresé y la vi que acomodaba unas masetas, tengo una buena vista desde aquí, no es que sea un mirón, pero admito que Sofia es muy hermosa.

Recogíamos la basura, después yo la hechaba y Sofia sostenía la bolsa, vi que ella puso su celular a un lado y tomó la manguera, lavaba las paredes y regaba las plantas. Yo mientras tanto terminaba con la basura, después la fui a dejar a los contenedores y de último guardé las cosas.

Yo también dejé mi celular junto con el de ella y agarré una manguera que ya estaba conectada al grifo, me puse a rociar las plantas del otro lado y lavar parte del piso y la pared del lugar.

Ya nos falta poco, solo terminamos de regar y ya habrá acabado nuestro castigo; por un lado estoy feliz de terminar con esta tortura y por el otro lado, dejaré de estar en compañía de Sofia, aunque no hablemos de nada, el hecho que está cerca me hace sentir bien.

-¡Hey! -Le grité porque me mojó un poco los pies.

-¡Ups! ¡Cuanto lo siento! -Me dijo con una gran sonrisa.

-¿Como que no creo esas disculpas tuyas? -Le dije molesto.

-Ya me disculpé, así que con eso basta tonto -Me dio la espalda ignorándome y siguió regando.

-¡Aun así, no te creo! -Le dije y pegué el chorro muy cerca de sus pies, la pringué toda.

-¡¡¿Que te pasa?!! -Me gritó muy molesta.

-¡Tú empezastes, esta es mi venganza niña! -Me burlaba de ella.

-¿Venganza? ¡¿Eh?! -Me puso una mirada y sonrisa retadora.

-¡Si! -Le conteste de la misma manera, para retarla.

-¡Toma! -Gritó y me pegó todo el chorro encima.

-¡Aaaah! ¡¡Vas a ver!! -Grité y también le pegaba el chorro.

Ambos nos mojábamos, estabamos teniendo una batalla de chorros de agua con la manguera, ella se reía sin parar y alguna razón yo también, me estaba divirtiendo mucho.

-¡Toma esto, tonto!

-¡Ya veras, tonta!

-¡¡Aaaah!!

-¡Tomaa!

Cuando traté de acercarme, ella hizo un moviemiento tratando de esquivar el agua, pero en vez de eso, ella resbaló cayendo encima de mi y ambos nos caímos al piso. Aun con el quejido del golpe, seguiamos riendonos, debió ser por la adrenalina de la batalla o simplemente porque la estabamos pasando genial.

Nos dimos cuenta de la situación y ambos nos quedamos callados y nos veiamos serios, estaba encima de mi, ambos mojados y ella estaba muy cerca y podía ver su rostro hermoso y no podía quitarle la vista a sus labios, se ven apetecibles...

Mi mano se movió sola, colocándose detrás de la cabeza de Sofia y empujandola hacia mi...

No se que me pasó en ese momento, pero pude sentir como nuestros labios se rozaron.