Rouse: El Internado Misterioso (Finalizada)

Cincuenta

~Matías~

Yo no se como empezó esto, desde que Vicktor vino a este lugar, me sigue a todos lado, me regala cosas, me invita a comer, hace favores por mi, me ayuda en mi trabajo y es muy atento.

Se que lo hace porque le gusto, pero no se si pueda corresponderle, mi corazón se lo había regalado a mi único amor no correspondido, se que estoy loco por haberme enamorado de alguien que no debía, era mi amigo y así lo fue siempre, murió sin saberlo y eso es algo de lo que estoy arrepentido, se que no iba hacer correspondido y también sabía que no iba a ser odiado, pero nunca me atreví a decirle como me sentía. La verdad es que Klart Rouse, se llevó mucho de mi, mis sentimientos y parte de mi corazón y no se si podré amar de nuevo.

Tenía un perrito faldero llamado Victor, me seguía a todas partes y no podía safarme de él, es como si supiera donde y cuando iba a estar en el lugar y a parecía de la nada.

-¡Quedate aquí, yo tengo que ir a ver algunos asuntos, soy el director no tú!

-¡Bien!

Me fuí, dejandolo con la sub directora, que por cierto Lucy siempre deja su puesto de trabajo, nunca está cuando se le necesita, pero al menos ahora está entreteniendolo un poco. Fuí hacer mis diligencias y luego volví, como siempre Lucy no está en su escritorio, al entrar a mi oficina, veo a Vicktor algo extraño.

-¿Que pasa?

-Entonces... ¿Puedes llegar a amar alguien más y no puedo gustarte yo?

-¿Que dices?

-Dime ¿Aún amas a Klart? Él ya no esta aquí, yo puedo hacerte muy feliz, yo si puedo ser un amor correspondido.

-¿Como diablos sabes eso?

-Yo, veía tus cosas y sin querer leí una libreta que está en tu cajón del escritorio, se que es atrevido pero, ya no puedo más, pensé que no me hacias caso porque te gustaban las mujeres, pero es porque aún no dejas de amar a alguien que ya está muerto.

-¡¿Como pudistes tocar mis cosas?! Y como hablas así de Klart, era tu amigo también.

-¡Si y lo respeté mucho! Pero, odio que tuvo tu amor y yo no, yo quiero que me ames con esa intensidad pero no logro hacerlo realidad.

-Yo, no decido a quien amar y solo sucedió, se que nunca debí tener estos sentimientos, pero no pude evitar enamorarme de mi mejor amigo.

-¡Entonces, enamorate de mi!

-¡No digas locuras, no es como si mandara en mi corazón!

-Entonces obligalo, amame, quiereme, por favor ¡No ves que estoy loco por tí, desde el momento en que te vi, no pude evitar sentirme de esta manera!

-Por favor, sal de mi oficina, no quiero hablar contigo por ahora.

El puso una cara muy triste, bajo su mirada y salió de la oficina, sin decir ninguna sola palabra. Ya ni enojado estaba, me siento tan mal por el, me estaba rogando cariño, ¿Tan enamorado esta de mi? ¡Mierda!

Después de esa vez, pensé que no volvería a molestarme, pero en vez de eso, se puso más meloso, me abrazaba, me agarraba las manos, me besaba en la mejía, me acariciaba el cabello, me decía más de alguna palabra cursi y siempre estaba acosandome. Pero eso no me molestaba y empezé a dejarlo que se saliera con la suya de vez en cuando.

Hasta llegaba el punto de no detenerlo y más bien disfrutarlo, en fin no tengo nada que perder, es un hombre muy atractivo y con un buen cuerpo y altura, además toca y besa muy bien, tampoco puedo estar perdiendo mi vida, ya estoy más arriba de los 35 años y creo que algunas aventuras no son tan malas.