Inducción |h.s

Capítulo 24

" Toda mi vida he estado solo. Solía usar una luz para llegar a casa. Pero ahora juntos, estamos solos. Y no hay otro lugar en donde preferiría estar"

PRIMERA PARTE

La locura se desata en cuanto las sirenas de la ambulancia se sienten. La gente en la fiesta está observando con atención, sin siquiera pestanear. Yo sostengo a Will contra mi cuerpo con fuerza mientras él se queja del dolor, paso una mano por su frente para limpiarlo y abro mis ojos cuando noto que el trozo de remera que habia puesto en su herida está bañado en sangre, como también mi mano entera.

- Apartense, a un lado por favor! - Los paramédicos bajan de la ambulancia y corren hacia nosotros.

- No llames a mis padres, Grace. - Will susurro casi inaudible y asiento.

Los paramédicos lo levantan juntos hacia una camilla y sigo sosteniendo mi mano en su herida. Una de las chicas más joven me mira mientras sube a Will a la camilla.

- Eres su novia? - Pregunta y asiento - Gracias por tratar de detener la hemorragia cariño, ahora dejamelo a mi. - Ella me sonríe y saco mi mano, pero Will la toma nuevamente entre la suya.

- Tranquilo. - Pongo un beso en su frente y él respira hondo pero cuando lo hace se retuerse del dolor.

- Carajo. - Dice entre dientes.

- Tenemos que llevarlo al hospital, ha perdido mucha sangre y debemoa ver si no hay nada perforado ¿Con qué ha sido la herida? - Uno de los paramédicos me mira pero soy incapaz de hablar.

- Arma blanca. - Will susurra.

El viaje al hospital es completamente eterno y me pregunto por qué es que todavía estoy en estado de shok. Me angustia de sobre manera ver a alguien que quiero sufrir, pero por alguna razón los ojos verdes y profundos de William en la camilla me llegan directo al alma, como si la fachada de "hombre invencible" que trata de dar siempre se comenzara a caer. Nadie es invencible, todo mundo le teme a algo.

Cuando lo bajan de la camilla lo llevan rápidamente a urgencias y ruego porque mi madre haya terminado su turno, pero a penas traspasamos la puerta logro verla correr con su uniforme hacia la camilla de la siguiente víctima. Cuando ve a William ella abre los ojos y luego de un momento me ve.

- Herido de arma blanca en el vientre, vino aquí con su novia, por alguna razón todavía está consciente pero ha perdido mucha sangre. - El paramédico le informa a mamá y ella da las instrucciones.

- Ven aquí, cariño. - Dice y los sigo rápidamente por detrás. Ella me mira fijamente y cuando un reflejo de preocupación pasa por su rostro mi estómago se encoge - Espera aquí. - Mamá entra a la sala y me siento en las incómodas sillas de plástico con la peor sensación de angustia desde hace mucho tiempo y las lágrimas no tardan en llegar.

Mientras el tiempo transcurre demasiado lento, nadie me dice nada y las llamadas de amigos de Will entran a mi busón de mensajes porque no puedo siquiera hablar. Todavía sigue en mi mente la fresca imagen de Rick apuñalandolo en el estómago, una de las peores sensaciones que pude sentir alguna vez hasta ahora. Realmente solo ahora me doy cuenta de cuanto es que quiero a William, cuando parece que mi corazón es partido en mil pedazos.

- ¡Gracy! - Carol y Trevor traspasan la puerta de la sala de espera y ella me enrieda en sus brazos - Tranquila, él va a estar bien. - Ella acaricia mis hombros y me mira.

- ¡Le dije a Will que no se metiera en esa maldita mierda! - Trevor golpea una de las sillas y luego se sienta en el piso, con la cabeza entre las manos.

- ¿Meterse en qué? - Seco mis lágrimas, pero mi primo no responde y Carol alza los hombros.

Los minutos pasan lentamente y nadie dice nada. Yo levanto la vista y veo salir a mamá de la sala, ella se retira la mascarilla y camina a nosotros.