Capítulo 30

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"Mira lo que haz hecho por mi, bebé. Bebé mira lo que hiciste ahora. Bebé yo nunca te dejaré si tu me sigues sosteniendo de esta manera"

P.D.V William

Los ruidos fuera de la habitación me despiertan, espero que Trevor no sean el culpable o le sacaré la mierda por despertarse cada maldito día antes de las ocho de la mañana. Cuando soy consciente de que el peso de Grace ya no está en mi hombro, la busco en la cama pero

no está. Supongo que conociéndola como lo hago, ella debe estar preparando el desayuno para todos nosotros. Enseguida me salgo de la cama y vuelvo a calzarme los boxers que ayer usaba, mi remera no está por ningún lado, así que tomo un pantalón corto y una musculosa limpia y salgo.

- Es perfecto, Gracy. - La voz de Ronnie es la primera que escucho. Había olvidado que ella estaba en casa.

Cuando entro a la sala, la chica y Grace están mirando el cuadro que hicimos, bueno que ella hizo y en el que yo colaboré pasando pinturas y pinceles y moviendo diarios en el suelo, pero ella es la experta, tenía que dejarla sola en lo que hacía, ella se veía realmente caliente pintando en mi sala en ropa interior ayer.

- Parece que este dolor de cabeza nunca va a irse. - Ronnie le dice y Grace la mira preocupada. Diganme qué es lo que está haciendo esta chica de gran corazón junto a mi.

- Voy a darte una aspirina, ahora mismo y estarás bien. - Ella se levanta del sofá y me ve apoyado en el marco de la puerta - Buen día. - Me sonríe y me acerco a ella. Efectivamente no encontraba mi remera porque la lleva puesta.

- Hola, cariño. - La beso en los labios y ella se cuelga de mi cuello - Hola, Ronnie. - Saludo a la amiga de Grace y ella me sonríe.

- Hey, Will.

- Preparé el desayuno pero Trevor y Carol siguen durmiendo. - Ella hace una pequeña mueca - Y Ronnie dice que si come algo muere. - Agrega.

- Bueno, yo estoy muerto de hambre así que más comida para mi. - Le digo. Alzo a Grace en mi cintura y ella enrieda sus brazos en mi cuello y ríe. La llevo a cuestas hasta la encimera de la cocina y la dejo allí.

- Hice muffins y chocolate con crema, tu madre dijo que te gusta. - Comenta mientras se hace una cola alta en el cabello.

- Mi madre vino aquí?

- No, ella llamó por teléfono, le sorprendió oírme aquí, creo que estaba alegre, dijo que te gustaba el chocolate con crema y los muffins de chispas de chocolate. - Grace me sonríe.

- Eso es cierto. - Asiento, abriendo la puerta del horno. El aroma entre por mi nariz y tomo un trapo para sacar la bandeja - Se ven ricos. - Dejo la bandeja en la cocina y ella da un salto al suelo y los pone en una pequeña tablita sobre la mesa.

- El chocolate se está enfriando EB la heladra. - Ella señala el refrigerador y saco la jarra de la bebida y la pongo sobre la mesa.

- Donde conseguiste todo esto? - Miro la mesa llena de mi desayuno preferido y sonrío.

- Fui de compras.

- Oh.

Los dos nos sentamos en la mesa y sirvo el chocolate en dos grandes tazas. Ella toma un muffin y también yo. Cuando lo pruebo es obvio que están malditamente ricos.

- Mmm... Son buenos, mejor que los de Gemma. - Bromeo. Ella me sonríe.

- Nunca le digas eso o va a odiarme. - Grace prende la televisión.

- Esto me da una idea de cómo será todo cuando vivamos juntos. - Comento. Ella comienza a toser ahogándose y me mira con los ojos abiertos. Estaba pensando en voz alta, carajo. Grace toma un poco de chocolate y respira hondo.

Inducción |h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora