Capítulo 42

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" La cama en la que estoy se hace más fría. Deseo que nunca hubiera dicho que terminó. Y no puedo fingir que no pensaré en ti cuando sea más viejo. Porque nunca tuvimos realmente nuestro cierre. Este no puede ser el final"

No tengo idea de cómo sucedió. Pero estoy parada frente a la puerta de la casa de mi padre, con mi gran bolso con ropa, esperando por él.

Trevor espera a mi lado, se que a mi padre le cuesta subir y bajar escaleras, así que después de unos minutos las luces de la sala se encienden y abre el pequeño vidrio de la puerta.

- Soy yo, papá. - Murmuro, secandome las lágrimas.

- Caramelito.

Mi padre abre la puerta y entonces muy para mi sorpresa, me echo a sus brazos y lo abrazo, con mucha fuerza, rompiendo en llanto otra vez.

- Oh, pequeña ¿Qué sucedió? - Él acaricia mi cabello y todas sus faltas y errores se borran de mi cabeza. Yo necesito este abrazo de mi padre.

- Él no quiere este bebé, papá. - Sollozo en su hombro.

- ¿Qué...? - Él me toma de los hombros para alejarme y me mira a los ojos - Oh, pequeña. - Y me abraza otra vez.

Trevor se va cuando estoy más calmada y me quedo con mi enfermo padre, sentada en el sofá. Él me entrega una taza de café y se sienta a mi lado, sin decir nada.

- ¿No usaron protección? - Su profunda voz corta el silencio y mis mejillas se colorean.

- Papá...

- Lo sé, lo echo, echo está. - Él suspira - ¿Ustedes terminaron o...?

- No lo sé. - Me encojo de hombros y él asiente - Solo se que no quiere este bebé.

- Tal vez deban darse algún tiempo separados, para saber qué es lo que pasará. Creo que es mejor que no se precipiten, como tu madre y yo lo hicimos, nosotros nos casamos y mudamos juntos a los pocos días y no funcionó.

- Lo sé. - Alzo las cejas y mi padre se pone de pie.

- Espera aquí, pequeña. - Él va hacia la cocina y saca un papel de la puerta de la nevera, un sobre de papel madera que dice "Gracy".

- ¿Qué es esto? - Lo tomo y frunzo el ceño.

- Iba a dartelo dentro de algunas semanas, es por tu cumpleaños, ábrelo. - Mick me sonríe.

Yo abro el sobre y mi corazón se acelera del todo cuando veo mi regalo adelantado de cumpleaños. Esto saca la agustia que tengo dentro y mi rostro se divide con una sonrisa.

- Oh, mi Dios, papá. - Susurro.

- Puedes cambiar la fecha. - Me dice y tengo que contenerme para no gritar y llorar otra vez.

P.D.V William

El coche de Trev sale del estacionamiento y estoy literalmente jodido. De rodillas en el suelo. El rostro de Grace no desaparece en mi cabeza, incluso cuando cierro los ojos. Ella me dijo que no iba a dejar que lo arruinara todo, como su padre lo habíe echo con ella.

El punto es que estoy malditamente enojado conmigo mismo. La dejé ir, diciendole que no quería el puto bebé que lleva dentro y ahora me arrepiento de ello. Pero ¿Cómo se supone que tengo que reaccionar? Es decir, es un bebé. Nuestro bebé.

Cuando puedo hacerlo, me pongo de pie y subo las escaleras. No quiero ir por el maldito ascensor. Estoy perdido sin ella, estoy siendo un completo hijo de puta. Pero no puedo ayudarla. Yo no se cómo jodidamente hacer para ser un padre. Lo único que recuerdo es que el mio asesinó a mi madre frente a mi, que me golpeaba cada noche ¿Cómo puedo saber qué hacer con un niño? Son molestos y... no siento estar preparado. Se que Des me dio el mejor ejemplo de lo que un padre puede hacer, que se sacrificó por mi en Londres y al llegar aquí, pero estoy malditamente asustado ¿Qué pasa si soy como él? Como la bestia de mi padre. Dios, yo no puedo ayudar a Grace, no se cómo hacerlo. Puta mierda.

Inducción |h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora