CAPITULO 45

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Mis parpados se abren de golpe, al mismo tiempo que mi espalda se endereza. Mis ojos buscan rapidamente a Katniss, asegurarme de que sigue con bien. Su cabeza descansa sobre mi regazo, su respiracion me confirma que sigue dormida. Se ve tan pacifica cuando duerme, sin embargo, la leve capa de sudor que cubre su frente y su respiracion irregular demuestran que aun no esta completamente recuperada del choque con el campo de fuerza.

Aparto mi mirada de su rostro, para poder asegurarme de que los demas miembros de la alianza sigan bien. Finnick duerme sobre una red tejida a pocos metros de mi, a su derecha Mags descansa su cabeza sobre un poco de musgo mientras duerme tranuilamente. Ella es la unica, al pareser, que puede dormir bien.

Giro mi cabeza a la direccion contraria, al lugar por donde veniamos esta tarde. Entre las gruesas lianas verdes y los arboles de la selva veo como un destello gris se forma, hasta convertirse en una nube brillante. Es un color intenso, pero brillante con propia luz, justo como los ojos de Katniss. Me separo de Katniss, dejando cuidadosamente su cabeza sobre el suelo. El brillo me hipnotiza, sin poder partar la vista de la nube gris estiro mi mano hasta ella. Sus tentaculos tocan mi piel, envolviendo mis dedos en su interior. Me es imposible evitar el grito que escapa de mi garganta.

-¡Despierten!¡La neblina es venenosa!- digo con voz ronca, mientras contraigo mi mano en un puño. Tratando de mitigar el dolor.

Finnick despierta sobresaltado y corre hacia Mags. Mags despierta por el llamado de Finnick, quien al final logra ponerla sobre su espalda. Katniss deperto ante mi grito, volteo en mi direccion y al verme bien comenzo a correr cuesta abajo. Yo los sigo, bajando por la colina de raides y rocas mohosas. La neblina es un enemigo del que solo podemos correr. No lo podemos combatir.

Corro rapidamente hasta llegar a Katniss, quien va al frente del grupo. Finnick y Mags corren detras nuestro. Escucho los gritos de dolor de Finnick. Al voltear, puedo ver que han caido y la neblina recorre su espalda. Me muevo en su direfcion, pero desisto al ver que Finnick se a puesto de pie nuevamente y corro con Mags en su espalda. Cuando volteo veo que Katniss me lleva una ventaja, la cual espero mantenga. Entre antes salga de aqui mejor.

Mi pie tropieza con una raiz, por lo que caigo directo al piso. La neblina se acerca y con sus puntas quema mi brazo derecho y parte del cuello. El grito que escapa de mi garganta se vuelve debil y ronco. El veneno no solo quema la piel, tambien afecta los norvios de los musculos. Antes de poder ponerme en pie, siento las manos de Katniss que me ayudan a levantarme. Ella deja escapar un grito al sentir la lengua de la neblina quemandole la espalda.

Me pongo de pie torpemente e intento con todas mis fuerzas apartarla de la neblina y seguir corriendo. Al hacerlo la nube gris envuelve una de mis piernas, provocando otro grito aun mas potente. Katniss comienza a correr para alejarse de la neblina. Yo intento seguirle, pero mis pasos se vuelven torpes e inestables por lo que tropiezo varias veces. Ella se acerca y me toma la muñeca, obligandome a seguir su ritmo.

Cada vez tropiezo mas seguido, siendo Katniss quien soporta mi peso y evita que caiga. Finnick parese tener los mismo problema para sotener a Mags, ya que en su camino escucho los gritos de el al caer. Mi pie se enreda con una raiz, Katniss no logra detenerme a tiempo, por lo que caigo sobre la superficiel mohosa.

-Peeta, porfavor ponte de pie-me suplica intentando con todas sus fuerzas levantarme-Peeta, porfavor, debemos seguir- noto la desesperacion ensu voz, pero es inutil no consigo que mis piernas respondan.

-No puedo cargar con el. ¿Puedes llevarlos a ambos?- escucho la vos de Katniss, levemente distorsionada por las lagrimas que retiene.

-No puedo- dice Finnick con un tono de voz cansado.

EN LLAMAS: LA NUEVA HISTORIADonde viven las historias. Descúbrelo ahora