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-¿Que tal si cambiamos usamos esto? -Michael tocó algunos acordes que había estado ensayando en los últimos días.

-Me agrada, sonara increíble en el coro.

Calum anoto con rapidez en su libreta para no olvidarlo o confundirlo con alguna otra anotación. Tenían una canción más casi terminada y eso emocionaba a todos, menos a Luke. Se encontraba en un pequeño sofá en la esquina, alejado de  los demás observando como ellos trabajaban. ¿Porque? Sencillo, el rubio ya no tenía cabeza para escribir canciones desde hace mucho tiempo.

Habían pasado días desde su encuentro con Alex y no había ocurrido nada más. Todos los días había ido a esperar a la misma calle a la espera de que volviera a salir, ella ni su acompañante se volvieron a ver. Parecía que habían desaparecido de la faz de la tierra.

De nuevo.

-¿Que opinas? -Calum se giró para verlo e intentar incluirlo en la elaboración de la nueva canción - ¿Que crees que quede mejor...

-No lo sé -contesto tangente.

-No siquiera me has dejado decirte que.

-No lo sé.

-Oye, viejo. Intentamos hacer algo grandioso aquí -se quejo Michael mostrándole mala cara- podrías participar un poco.

-Pues no quiero -se levantó y salió de la habitación.

No quería aceptar que comenzaba a tener una actitud demasiado infantil con sus compañeros de banda y amigos de toda la vida. Se sentía frustrado, molesto y desesperado, no quería desquitarse con ellos pero eran los únicos cerca de él.
Fue hacia su habitación sintiendose el peor amigo del mundo y entró en busca de un abrigo. Cada vez el frío se podía sentir peor y pronto necesitarían ropa más abrigadora.
Decidió ir de nuevo a la misma calle para pasar el día y despejarse un poco.

Tal vez, solo tal vez, la volviera a ver.

Todos los días había regresado a la unica cafetería por el lugar, había descubierto que el café era exquisito y siempre volvía por más. Hasta la amable cajera ya lo reconocía y sabía su pedido.

Un café con leche y galletas.

Eso era lo que ella siempre tomaba en días de frío y lo hacía sentir un poco más cerca de ella.

Tomo asiento junto al gran ventanal y fijo su atención a las personas que pasaban por ahí. Tenía que tener toda su atención.para poder identificarla. Aún no quería aceptarlo pero en estos dos años la habían cambiado por completo. Oraba para que si interior siguiera siendo el mismo.

Luego de tomar un poco de café, saco su celular para entrar a sus redes sociales. Todos los días tenía Miles de notificaciones de cualquier tipo de publicación. Las fans sabían que ellos se encontraban en Alaska, todo el mundo sabia donde se encontraban pero nadie pensaba que ahí mismo estaba la misma Alexis Paes, la exnovia del vocalista de Five Seconds Of Summer.

-Disculpa -sintió unos leves golpes en el hombro. Cuando giro su rostro se encontró con una chica cerca de los diecisiete- ¿Puedo tomarme una foto contigo? Lamento la molestia pero me encanta tu música.

-Claro -sonrió con amabilidad y se puso de pie.

La chica lo abrazo con la cintura con demasiada fuerza como si se fuera a escapar. Quien pensó que era su madre, tomo la fotografía y le agradeció por haber complacido a su hija.

-¡Oh dios! -exclamó al ver la fotografías- no puedo creer que esten aquí y te haya encontrado. ¡Dios! Eres el mejor.

Luke solo pudo sonreír y agradecer por su apoyo. Cuando la vio lejos, tomo asiento y volvió su atención a su celular. A veces odiaba entrar a internet, muchas veces lo volvían a etiquetar en fotografías dónde salía con Alex, fotos tomadas por paparazzi o que él había subido personalmente.

the finale | lrhDonde viven las historias. Descúbrelo ahora