Coleccionista de desastres [Completa]

XXVII • Sorpresas y incendios

Tras la segunda victoria por parte del equipo de Adrien, Alice volvió en insistir en otra celebración. Adrien, volvió a negarse, diciendo que todavía era muy pronto para celebrar, y que no tenía ganas de celebrar cada victoria conseguida, pero la pelirroja hizo caso nulo a sus negaciones y los arrastró consigo hasta un salón de karaoke que ella había reservado con anticipación, diciendo que estaba segura que ganarían.

-Siento que esto es un desperdicio de tiempo y dinero - Volvió a mencionar la deportista por enésima vez, frente a la puerta que daba a la sala musical.

-No me seas aguafiestas.

Adrien no quería hundirla, ya que sabía que su exagerada emoción se debía a que hubiera terminado su última relación, pero tampoco estaba de ánimos para celebraciones que para ella carecían de absoluto sentido. No quería alegrarse hasta que hubiera obtenido el trofeo. 

Alice abrió sonriente el salón y entró en una especie de correría. 

Los ojos de la deportista se abrieron de par en par al ver a Alice en brazos de Alexandre, con el que supuestamente había terminado su relación.  Su alegre sonrisa se vio cubierta por los labios de la pelirroja y el sonido de su beso provocó un suave eco al finalizar.

-Adrien, felicidades por tu victoria - Él se acercó a ella, teniendo a Alice abrazada a su brazo derecho, con una sonrisa única de amor.

-Ah, pues... Gracias.

Seguía preso de la suma impresión que le había provocado dicha escena. Léon a su lado mantenía su semblante casi inexpresivo, aunque también le había sorprendido.

-Ah, Alice, ¿no nos habías dicho que lo vuestro había terminado? - Cuestionó antes de abordar la habitación, allí, inerte.

Una tierna y tímida sonrisa colgó de los labios de su amiga, la cual abrazó a su novio por los hombros.

-Bueno, resolvimos nuestra diferencias - Dejándose llevar por su alegría estampó un beso en la mejilla de su pareja, logrando en su rostro un ligero rubor.

-Ah...

Adrien avanzó a paso de tortuga y se tiró sobre el mullido asiento, que compartió segundos más tarde con su amigo, Léon.

La pareja ocupó el asiento delantero, manteniéndose totalmente pegados, como una perfecta amorosa.

Era totalmente extraño ternerlos de aquel modo después de haber visto a Alice tan decaída por la ruptura, que según su ver era definitiva, pero, era sin duda una muy buena noticia que ambos hubieran sabido resolver sus diferencias y que estuvieran de nuevo juntos, demostrandose abiertamente lo tanto que se querían. 

Adrien decidió dejar su cara de sorpresa y aceptó divertirse como según Alice le había repetido mil veces. Por ello decidió hacerse con el micrófono. 

-¿Alguna sugerencia? - Preguntó a sus amigos, lista para comenzar a cantar. 

Alice sugirió las canciones que ahora muchos jóvenes escuchaban, rap o reggaetón. Léon torció la nariz en respuestas, mostrando abiertamente lo tanto que le fastidiaba aquel tipo de... Lo que fuera.

-Photograph sería mi recomendación - Dijo, añadiendo una pequeña sonrisa - No me agradan ese tipo de canciones - Le dijo sin tapujos a la pelirroja.

-A mí tampoco -Confesó Alexandre, asintiendo al tiempo.

-¡Qué aburridos! - Soltó la chica, poniendo la barbilla sobre sus manos, fingiendo un berrinche.

-Menos mal que no todos comparten tus gustos musicales - Soltó Adrien, buscando la canción en el buscador del karaoke.

Tras un gesto de enfado por parte de la pelirroja, la habitación sucumbió bajo la agradable melodía, acompañada de la suave voz de Adrien, la cual se suavizaba al entonar cada palabra, delatando su verdadero sexo. Léon cerró los ojos, apreciando la agradable voz, mientras que los otros dos testigos se mostraban notablemente sorprendidos.