Camila

Una primera

Lauren

-No puedo arriesgarme a eso Camila, por favor trata de entenderlo, muchos conocen a mi padre, el aporta una gran cantidad de dinero a la universidad, quiero evitarte problemas a ti, no quiero que el trate de hacer algo para afectarte, solo quiero esperar.
Mi amigo tenía razón, Camila estaba siendo poco comprensiva. Tenía la idea particular de querer demostrar nuestra relación abiertamente. A mi no me molestaba pero temía que mis padres se enteraran de alguna manera y pudieran hacer algo en contra de ambas. Mi padre no estaría de acuerdo y no dudaría en actuar de forma decisiva.
Yo quería que el resto del mundo supiera que estaba con ella, es la mujer más hermosa que conozco, era mi novia y...por dios. Y deseaba poder presentarla y que ellos la aceptaran sin dudar pero que se enteraran indirectamente haría todo peor.

Camila estaba en el otro extremo del sofá. Cruzada de brazos. Sin querer creer en mi justificación. Yo quería abrazarla y simplemente no podía creer que tuviéramos una pelea tan rápido.

-Entonces tal vez debamos esperar para tener algo ¿No?
Rodó los ojos.

-Por favor, yo...no creo que sea correcto eso de esperar, quiero estar contigo ahora...es solo...dame un tiempo. Pedí de nuevo.

-No quiero ser fastidiosa con ese tema así que si seguimos deberías saber que tal vez te presione hasta que lo hagas.
Dijo con un tono desconocido. Como estresada.

-Perdón por molestarte así. Me senté a su lado y tomé su mejilla para que me mirara.
-No lo sé, pero tengo el presentimiento de que tu y yo llegaremos lejos ¿Entiendes? Quiero estar contigo todo el tiempo y de verdad estoy pensando en decírselo a mis padres, presentarte, pero no es un buen momento, quiero estar en un lugar más estable, por que las probabilidades de que mi padre intenté hacerme la vida imposible son muy altas, unos meses ¿Esta bien?
Camila sonrió por fin.

-Estas muy segura de mantenerme contigo tantos meses ¿Porqué?
Aclaré mi garganta. De la nada me puse tímida. Yo solo quería que esto durará siempre pero no podía decírselo y asustarla.
Apareció una sonrisa resplandeciente en sus labios.

-Me gusta ponerte nerviosa.
La miré. Con una mirada de amor tal vez por que ella no dejó de sonreír.
-Esta bien, hagamos entonces un trato.
Dije que si con la cabeza. -Tendrás meses para decírselo a tus padres, por el momento propongo poder decirlo a dos personas ¿Bien? Yo le tendré que decir a mi madre y a la abuela.

-Pero ya dos personas que conoces lo saben. Por dios. No quería conocer a su madre tan rápido, Camila la mencionaba a menudo en las conversaciones, y la verdad sonaba a que era un tanto difícil.

-Oh no no, Brennan cuenta como neutral, es amigo de ambas y lo de Vanessa fue casual, no cuentan.
Le di la razón. De todas formas no había muchas personas a quien deseara contarle.

-Me parece bien, yo pensare muy bien a quien.
Extendió su mano y yo se la di pero ella no se quedó quieta y me llevo hasta su cuerpo. Dejo un beso en mis labios y metió sus manos en mi cintura por debajo de la ropa. Mis manos se sintieron congeladas. No sabía si bajarlas y tocar su cintura o llevarlas a sus piernas.
De inmediato me sentía entusiasmada. No podía. No podía tenerla así de cerca y estar normal. Mi cuerpo siempre terminaba actuando por si solo. Correspondí a su beso pero como siempre lo hacía, me retire, miraba la cara llena de duda de Camila, cada que lo hacía.
Sobre las demostraciones me podía que no pudiera tomarla tan seguido de la mano como quisiera o darle un beso, pero resistiría hasta que estuviera preparada para contarle a mis padres que tenía una novia, si, una chica y demasiado increíble. No habría mucha gente que se resistiera a su encanto, podría convencer fácilmente.

-He estado pensando, yo uso baby para llamarte y quiero que digas un sobrenombre cariñoso, tienes doble tarea. Dijo cuando pasó por su plato y no perdió la oportunidad de golpear mi glúteo. Me hizo reír.

De la nada estábamos en la sala, comimos y vimos una película, ahora compartíamos unas horas de estudio. Llamó Clarice su abuela para explicarle que estaría hasta tarde.
Ella tenía su cabeza en mi hombro e intentaba leer algo del libro que sostenía. Yo revisaba los apuntes de clases. Nadie podría molestarnos y me gustaba estar tan unida. Ella buscaba la forma de apegarse a mi. Su aroma estaba en la sala y esperaba que en mi ropa.
-Tengo un poco de frío. Dijo perezosa.

-Cambiaré la calefacción.

-No Lauren, mejor préstame algo para ponerme.
Sonrió dulcemente y asentí, esos ojitos cafés eran una trampa. Tomé la primera sudadera de mi armario y se la llevé.
-Gracias. Besó mis labios. Algo muy corto. Dios ¿Era tan malo llevar la cuenta de nuestros besos?
Puse la cafetera y la miré a la distancia. Poco a poco conocía la forma de actuar. Ella leía pero mordía constantemente el lápiz con el que trabajaba. Colocó sus piernas en la mesa de centro para descansar y buscaba algo de café en su taza. Me dió risa su expresión al notar que no tenía más.

-Lauren.

-Ya llevo. Dije en respuesta.

-Eres increíble. Nuevamente volvimos a nuestra posición en el sofá. Cuando el sol se ocultó e hizo falta luz en el departamento la vi por fin soltar el libro.
Ella iba a querer irse. Debía llevarla.
Mando un mensaje en su móvil.

-Debo irme.

-Tienes que irte. Dijimos las dos al mismo tiempo y sonreímos. Leía mi mente o algo así. Había disfrutado tanto estar con ella que no quería que se fuera pero entendía que debía acompañar a su abuelita.
La ayude a guardar sus cosas en su bolso y la guíe a la salida. Esta vez las dos bajamos las de emergencia para pasar desapercibidas y viajamos a su casa.
Nadie estaba en la entrada, tomé iniciativa para besarla. Correspondió por mucho y nos separamos por el sonido de un auto pasando la calle.

-Te veo mañana baby.

-Hasta mañana Camz.
Dije esperando a que le gustara que la llamara así. El otro que se me había ocurrido estaba segura no le gustaría.
Sonrió abiertamente y beso mis mejillas antes de dejar otro beso de aquellos en mis labios, quería alargarlo pero salió del auto con prisa.

SIENTO QUE CUANDO TE CLAVAS CON ALGUIEN, BESAS Y BESAS Y NO TE CANSAS. ESTOY INSPIRADA POR CORAZÓN ROTO 💔 DEN UN CONSEJO.

TIENES A UNA PERSONA SÚPER CERCANA, ES TU AMIGO, ES COMO UN CRUSH POR QUE SABES QUE DE AMIGO PUEDE QUE NO PASE. LUEGO RESULTA DE QUE SIENTES ESPERANZA, VIBRA SUPER PADRE Y ATRACCION, LO SIENTES PERO CUANDO TE LANZAS Y ADMITES LO QUE SIENTES, ESA PERSONA LO NIEGA Y QUIERE SOLO AMISTAD ¿QUE HACEN? DE VERDAD UNO SIEMPRE SABE CUANDO HAY ALGO MÁS PERO EN ESTA OCASIÓN ES UNA CONFUSIÓN TOTAL. ESTA PERSONA SUFRE UNA DECEPCIÓN DE AMOR CON UN INICIO SIMILAR Y PIENSO QUE PUEDE SER MIEDO. AYUDA!!!