LA CAIDA DEL CIEGO

Despertando mis sentidos.

Capítulo 28

Me desperté, Carolina estaba dormida abrazada a mí, traté de incorporarme sin despertarla. Pero ella se despertó se aferró a mi cuerpo y me dijo:

-Amor, quédate esta noche conmigo.

-linda voy a llamar a mi hermano, tal vez ya se fue.

Le timbre varias veces y me contesto.

-Hola romeo, ¿como esta? Dijo Sebastián

-Hola hermanito bien, maravillosamente, y tu como sigues.

-Bien, ganándole un partido a mis primos y tomándonos unos wiskis. bromeo

-Que bien, entonces, ¿te vas a quedar esta noche?

-Obvio, relájate, mañana nos vamos. Dijo efusivamente

La abrace, la observe mientras dormía. Trasmitía una paz, me sentí satisfecho. Esa era la paz que estaba buscando en esos días.

Mi hermana nos trajo comida,

-Holas, ay que despertar a la bella durmiente tiene que comer.

-Linda, le acaricie la cabeza, te trajeron una comida deliciosa. La ayude a incorporar y comimos los dos.

-Hermanito te vas a quedar, Sebastián no sabe ni de donde es vecino, esta de una alegría. Dijo mi hermana

-Envido a mi hermano, el si se toma la vida como es. Hoy vivo millonario, mañana mendigo y sin importarle.

-Ese si es la mejor manera de describirlo, ese es un gitano. Dijo Alicia

-Me voy a comer la patacona, la carne, y la ensalada. No más. Quiero unos waffles con café caliente y no más. Dijo Carolina

-No, que haremos, waffles a esta hora, café. Dijo Alicia

-Está bien amor comete eso, yo miro como te consigo los waffles. Le dije

-Vamos, hermanito tú vas y has los waffles, te quiero ver en esas. Caro todo el tiempo quiere comer waffles nace tu bebe y le coges fastidio a los waffles. Dijo Alicia

-Me fascinan, de sal, de dulce, no importa. Dijo Carolina

Mire a Alicia, con cara de ayúdeme.

-No, eso sí que no, tú los va hacer, me respondió Alicia

-Bien camina y me dices como y yo los hago. Le dije jalándola de las manos

-Bueno, vamos, pero Caro te comes todo lo que dijiste, pago por ver, no nos vas hacer trampa. Dijo Alicia

-Si ya me lo estoy comiendo. Murmuro Carolina

-Es por tu bien, tienes anemia y estas embarazada. Le dijo Alicia

-Bueno, bueno jefecita ya me lo estoy comiendo. Bromeo Carolina

-Vamos Jefa bromee,

Me tomo del brazo y me pellizco.

-Uy, no violencia intrafamiliar. No te pases le dije

Me divertí haciendo waffles con ella, una tasada de harina de trigo, leche, huevos, se incorporaba toda la mezcla, tenía que quedar una mezcla homogénea, ni muy liquida ni muy espesa. Se calentaba un sarten de teflon, se coloca un poco de mezcla, cuando este cocido por un lado se le da la vuelta.

para colmo cuando estábamos terminando llego mi primo y mi hermano.

-Wafflex preparados por mis hermanos, que delicia. Dijo Sebastián

Hicimos más, me gusto estar los tres, siempre no la llevamos muy bien.

Le llevé los Waflex a Carolina, Mientras los devoraba yo le dije:

-Linda, vas a vivir aquí mientras nace nuestro bebe, es el tiempo que necesito para arreglar mis asuntos con la familia y nos vamos a iniciar una nueva vida, nos vamos con Ana mile y Diego. Y ese par de diablillos donde andan. pregunte

-Con la señora Rosita en la miscelánea, no me he sentido muy bien, El señor Alejandro, llego a un acuerdo con ella, siguen estudiando en el mismo barrio, vienen a visitarme, parece que en la miscelánea todo va bien.

-Si ellos se sienten bien así, dije

-Si ellos, les gusta estudiar en ese colegio, decidimos vivir así mientras nace mi bebe, Ana miles es muy voluntariosa, dice odiar a tu hermana. Es una niña, tu hermana dice que ella se ira acoplando.

-Preciosa, mañana voy y hablo con ese par de pillos, tampoco puede hacer lo que les dé la gana. Le dije

-Gracias amor, a mí me parece que así las cosas están bien.

La abrace, no quería contrariarla, Me abrazo de nuevo, me encantaba como se pegaba a mí, la abrace, metió sus manos debajo de mi playera, acaricio mi espalda, empezó a decender lentamente dibujando mi cuerpo con sus manos. Nos besamos intensamente, sus manos se deslizaban por mi abdomen.

Empezó a desabotonar mi pantalón, me toco mi pene, sentí mi sangre correr con más impulso. Se dio cuenta que estaba muy excitado. Le cogí las manos y las retiré de mi cuerpo.

-Que pasa me dijo

-Linda... tu estas en embarazo.

-sí, que pasa, estoy en embarazo, no estoy enferma. No pasa nada me dijo.

La bese suavemente, me deje llevar por ella. Suavemente, dulcemente, la bese por cada parte de su cuerpo. Ella hizo lo mismo, la acaricié despacio, sin ninguna prisa, Me di cuenta que me deseaba tanto como yo. Su vagina estaba muy húmeda. Me dijo al oído.

-Amor te he extrañado tanto. Me beso frenéticamente. se colocó encima mío, termine penetrándola, suavemente, me encantaba escuchar sus gemidos.

-Te amo me dijo. Mientras cogía mis manos y las besaba, lamia uno a uno mis dedos. Me olvide del mundo a mi alrededor, nuestros movimiento, fueron acelerando, sentí que me iba a desarrollar, pero no quise deje que durara un poco más. Se confundieron nuestros gemidos. Se combinaron nuestros líquidos en el momento que terminamos en un orgasmo. nunca me había sentido tan complacido, me acorde de Gabriel García Márquez "No te vayas a morir sin probar la maravilla que es tirar con amor". En ese preciso momento comprendí esa frase, la ame y me deje amar, me quede dormido arrullado por la brisa de los árboles, hasta la brisa me parecía maravillosa, por fin desperté todos mis sentidos. Y empecé a disfrutar de todas las maravillas que había a mi alrededor. Basto dejar de pensar en mí. Solo quise complacer a Carolina. Ella era la dueña de mis días y noches.

Enci Silva.