Contra el tiempo

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Capitulo 45

Estaba encargado de recoger el cadáver de mi sobrino, no quería que se lo llevaran, ni el Teniente García, tampoco los hombres de Alexander. Junto con Sebastián lo entramos a la mansión.

-Quédate con papa, no lo podemos dejar con ese par de locos, estos sus están ese de siquiatra. Me dijo mi hermano.

Reaccioné y fui donde mi padre.

Alexander se estaba subiendo en una camioneta junto con papa. El teniente García junto con unos hombres lo trataban de detener.

-García, déjalos ir, puede matar a mi padre, la pelea es entre ustedes. Le dije

-Cállate me dijo apuntándome con el arma.

-Cállate acabo de perder un hijo, y también una batalla, no la guerra, Te juro, te juro que cualquier miembro que nazca de la familia Arango, no vivirá tranquilo, porque yo me voy a encargar de que desaparezcan todos los Arango de la faz de la tierra. Nos amenazó

Se montó en su camioneta y arranco. Se llevaron a mi padre. Nos dedicamos a recoger a los heridos y muertos. Gabriel mi sobrino, murió de una bala en el pecho, entro por el tórax, perforo el pulmón derecho y salió, formo un colapso pulmonar. Muriendo instantáneamente. Dejamos el cadáver del niño, con mi madre y mi tía Alicia,

-Sebastián vámonos para donde mi hermana, quiero saber cómo esta. Dijo mi hermano

-Soliman encárgate de todo aquí, protege la mansión, Les orden a todos obedecerles a Soliman.

Fui al laboratorio, mi hermana estaba viva y él bebe a salvo, nació de siete meses lo colocaron en incubadora. Jean Paul estaba que se cortaba las venas.

-Como es posible decía, Alexander no sabe en el problema que se metio, el teniente Garcia es de la mafia. él lo mata, porque lo mata, condeno a toda la familia.

-No esto ya se salio de todo contexto, ¿tía Margarita sabía algo de ella?

-Si la escuche nombrar a tu madre, una vez que estaban peleando con Alexander. "A mi hija no le vas hacer lo mismo que a Margarita, no te lo voy a permitir, primero te mato le dijo".

-MI madre y sus secretos, ella todo lo sabe y lo oculta. Vamos a esperar que Alicia este bien y vamos por mi padre, no lo podemos dejar tanto con Alexander. Esta loco, no conoce limites.

-Gabriel, debemos pensar en un buen plan. Podiamos utilizar el caos a nuestro favor, se esta escondiendo, tiene pocos hombres. Tenemos que eliminar a Martinez, y Alexander es nuestro.

-Tranquilo ocúpate de tu hijo. ¿Ya nació?

-Si esta en la incubadora, estamos esperando que tu hermana reaccione.

- ¿Esta bien, como esta ella?

-Bien, en lo posible, no.. tu hermana, me duele cuando reaccione y se de cuenta que mataron a su hijo, logramos salvar uno pero al otro no.

-Mi hermana es una mujer fuerte, le tocara que aferrarse al que tiene vivo y criarlo, debe ser muy duro, pero es lo que le queda. Dije tratando de controlarme.

Mi tía Margarita se enamoro de un hombre que no tenia noble cuna, su hermano Rafael estaba a cargo de la familia, intento separarlos, lo único que logro fue matarlos. No podía engendrar un hijo varón y adopto a Alexander, el niño del orfanato, este niño fue elegido por El teniente Garcia para entrenarlo a favor de el, el odio que le trasmitió, jugo encontrar de él, lo enseño a codicioso, la ambición lo llevo a traicionarlo. No sé qué se traía entre manos. Me consolaba pensar que no era así, que Martínez disparo por la presión, que no lo quiso matar, que no había nada más.

Fui a la mansión. Busque a Carolina.

-Hola amor.

-Princesa como estas.

Se arrojó a mis brazos llorando.

-Se murió el niño, no, puede ser. ¿Tu hermana como esta?

-Si linda le dije llorando. Todo es un completo caos. Abrázame solo abrázame.

Me abrazo, le correspondí, lloramos los dos. Me sentía culpable, debí llevar a mi sobrino a otro lugar, miré a mi hijo, él estaba dormido en su cuna.

- ¿Cómo está él bebe?.

-Bien amor, creciendo, esta hermoso. Gabriel Arango está muy bien.

-No sé si fue buena idea colocarle ese nombre. Pertenecer a esta familia ya es una desgracia.

-Como dices eso, amor, si es nuestro hijo, mira le compre una cadenita de la virgencita, tiene la misma tuya. ¿Amor y tu cadena?.

-No sé, se me perdió hoy, la perdí, el día que fui por él, por el niño de mi hermana.

Se quitó la de ella y me la dio.

-Ponte esta, no te la quites,

Le hice caso, estaba muy nerviosa, en esta circunstancia todos estábamos así, nos aferrábamos a la idea que esto era un mal sueño y que pronto despertaríamos, tratábamos de actuar normal.

Le di un beso al bebe y me acosté al pie de Caro. Ella no me pregunto nada. Solo se acomodó en mi pecho.

-No te preocupes amor, vamos a rescatar a mi padre, nos iremos de aquí, Ya no quiero saber nada de la familia Arango. Alexander que haga lo que quiera. Solo quiero paz, es lo único que deseo.

-Como tú digas amor, yo iré contigo hasta el fin del mundo, contigo y con mis hijos.

-Ana miles y Diego, podrían terminar de estudiar. Cuando terminen el año nos lo llevamos con nosotros, lo importante es sacar a nuestro hijo de aquí, no quiero que Alexander se dé cuenta de su existencia.

-Odio a ese señor, con solo oír su nombre se me revuelve todo. Vámonos amor es lo mejor.

-Si planeo rescatar a mi padre y nos vamos para otro país. Donde nadie nos conozca, empezamos de cero.

-Te amo, amor, yo no sabría vivir sin ti y sin mi hijo. Dejemos a ese señor, tu mamá me da mucha pena, pero es que ella parece la mamá de él, me acuerda de mi con mi hermano. Se drogaba, robaba, se metía en problemas y yo ponía la cara por él. No es sano, ese tipo la manipula.

-Linda yo trato de comprenderla, pero te juro que no puedo. Yo haría todo para protegerte y proteger mi hijo. Por eso la comprendo, ella piensa que estando al lado de él nos protege a nosotros.

Enci Silva

LA CAIDA DEL CIEGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora