De un hilo

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LLAMADA
-Mmmm ¿Hola?-
-Hola, hola-
-¿En serio eres tú?-
-Ya sé que te da gusto escucharme-
-No a estas horas, son casi las tres-
-Lo sé, pero necesito que me ayudes con algo-
-Te ayudaré mañana-
-¡NO!, necesito que sea ya-
-ES DE MADRUGADA-
-¡Por favor!, déjame cobrarme una de las tantas que me debes-
-Ummmmm. Está bien, ¿que necesitas?-
-Quiero que averigües todo lo que puedas sobre la supuesta venta de Rodolfo Pizarro al Inter de Miami-
-Con que se trata de tu novio-
-¿Puedes, puedeeeeees?-
-Si, dame media hora-
-Ok-
FIN DE LLAMADA

La espera se me hizo eterna, bajé y me preparé un café pero lejos de despabilarme me ocasionó mucho sueño y sentía que me iba a quedar dormida cuando sonó mi teléfono

LLAMADA
-Primero te escupo todo y después preguntas-
-Si, está bien-
-La venta está en setenta por ciento a favor de Miami, pero hay asuntos por la cláusula del contrato así que existe la probabilidad de que no se lleve a cabo la negociación. Rodolfo se quedará en Monterrey para resolver eso, así que no esperes verlo en el partido pendiente contra Necaxa a mitad de semana y es probable que asista a el barrial a practicar y si no resuelve nada, tendrá que viajar el jueves a León para el partido del sábado-
-¿Entonces existe la posibilidad de que no se vaya?-
-Exacto, además de que no creo que el Inter ruegue demasiado por él y pague lo que Monterrey no quiere-
-Vaya, que interesante-
-Te sugiero que hables con él, debe de estar hecho un lío-
-Lo más probable-
-Pero date prisa, porque no tienes el tiempo asegurado-
-Lo haré, gracias por la información. Te debo una-
-Al contrario, yo te pago una de las que te debo y ahora ve a dormir que ya es tarde-
-Gracias, guapo-
-Para servirle, mi lady-
FIN DE LLAMADA

Para el miércoles ya estaba peor que nunca, la gripe se apoderó por completo de mí y me sentía agotada.

Óscar intentó convencerme de que fuéramos al doctor pero me negué rotundamente, cuando llegamos a la entrada del edificio no vi señal alguna de Rodolfo, cosa que agradecí.

Después de que Òscar insistiera un poco más y yo me negara, bajé del auto y fui directo al ascensor.

Cuando llegué al piso y las puertas se abrieron vi que Rodolfo me estaba esperando, así que rápidamente presioné el botón para bajar de nuevo, pero alcanzó a verme y corrió a toda prisa.

Por suerte las puertas se cerraron antes de que siquiera se acercara y tuve que recurrir a un plan B.

LLAMADA
-Me siento fatal, necesito ir al doctor-
-Quédate en la entrada, pasó por ti-
FIN DE LLAMADA

Al llegar a recepción salí corriendo y ya me esperaba, de seguro volvió a mil por hora.

-¿Huyes de alguien?- me miró divertido

-Claro que no- dije agitada y el rió por lo graciosa que se escuchaba mi voz

-Tal vez de él- miró a mis espaldas y sabía que Rodolfo estaba ahí

-Vámonos- dije seria tratando de no mirar

-Como quieras- apareció su sonrisa cínica y aceleró

P.O.V. RODOLFO
Estaba que hervía del coraje, cuando me estaba aclarando un poco y me sentía listo para hablar con ella la vi huir con Óscar.

Más que molesto regresé al departamento maldiciendo y reprochándome a mí mismo por haberla estado evitando y más porque el idiota italiano no había mantenido su palabra de estar lejos de ella.

Amor a manos llenasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora