Un, dos, tres, Jueves

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Me desperté con el sonido de la alarma, tenía a Rodolfo abrazándome completamente dormido y aunque intenté moverme con cuidado para apagar la alarma mis movimientos lo despertaron.

-Buenos días- me apretó con fuerza y besó mi frente

-Buenos días- me acurruqué en su pecho después de apagar la alarma

-¿Ya debemos levantarnos?- se apartó un poco y me miró

-Ya corazón, ya es hora- acaricié su rostro y él hizo un puchero –necesito estar lista para cuando Óscar pase por mí-

-No quiero- se envolvió con el edredón

-Duerme otro ratito en lo que yo tomo una ducha, ¿te parece?- salí de la cama, tomé mi ropa y me fui directo al baño

Hoy volvían Liliana y Manolo junto con la mamá de Sebastián pero no estaba segura de si llegaban por la tarde pasado el mediodía o por la tarde después de comida. El clima estaba un poco soleado, así que me decidí por usar falda:

Volví a la habitación para despertar a Rodolfo pero antes me tomé unos segundos para mirarlo dormir, se veía tan frágil, no se parecía en nada al futbolista rudo que veía a través de la televisión, parecía un joven universitario, con su barba volv...

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Volví a la habitación para despertar a Rodolfo pero antes me tomé unos segundos para mirarlo dormir, se veía tan frágil, no se parecía en nada al futbolista rudo que veía a través de la televisión, parecía un joven universitario, con su barba volviendo a salir y unas pequeñas bolsas en sus ojos. Suavemente acaricié su mejilla y deposité un beso en sus labios

-Rodolfo, despierta bombón- susurré cerca de su rostro y una sonrisa apareció

-¿Puedo despertar así todos los días?- se estiró y se sentó en la cama

-Quizá en unos años- dije poniéndome mis tacones:

 Él me abrazó por la espalda-Espero que no sean tantos- de mala gana me soltó y me hizo mirarlo –yo podría llevarte hoy- entrelazó nuestras manos

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Él me abrazó por la espalda
-Espero que no sean tantos- de mala gana me soltó y me hizo mirarlo –yo podría llevarte hoy- entrelazó nuestras manos

-Te lo agradezco pero es mejor que me vaya con Óscar para que tú te alistes y te vayas a el barrial- lo hice seguirme a la sala –voy a preparar mi desayuno y comida, ¿quieres que te prepare algo?-

Amor a manos llenasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora