ESPECIAL: Un milagro (1/2)

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[Narra Mizumi]

Esto va cada vez peor: en el último carné tuve cuatro asignaturas bajas, y tengo que dar los exámenes en una semana. Pero con todo lo que pasa en mi casa, no puedo concentrarme en estudiar. Yo quiero esforzarme en subir las asignaturas que tengo bajas, y en aprobar los exámenes, pero simplemente no puedo.

Ahora que conocí a Takeshi, él me va a ayudar a estudiar para aprobar los exámenes. Hay temas que él no sabe (porque él está en primero y yo en tercero) pero para eso llamo a Eien, quien está cada vez más enamorada de Suzuki.

Tengo que aclarar algo de Eien que jamás dije: ella no quiere ser mujer. Así es, quiere hacerse varón. Se cortó el pelo beige que tiene, se hizo tres piercings en el labio, dos en las orejas, usa caravanas, y siempre la veo usando ropa masculina. Se ve linda. Mejor dicho: lindo. Y se quiere cambiar el nombre a Kaito. Tengo que acostumbrarme a llamarlo Kaito y no Eien.

En fin, las cosas en casa me tienen harta: anoche mis padres discutieron desde las doce de la noche hasta las cuatro de la mañana. Hubo vidrios rotos, madera estrellándose contra la pared, golpes, palabras obscenas, de todo. Yo escuché toda la noche cada palabra y ruido que venía de la cocina.

Lo que me llamó la atención, fue cuando papá dijo:

─¡Ya me tienes harto, Kazue! ¡Siempre te vives quejando de todas tus desgracias! ¡Yo nunca creí que al hacerlo una vez sin condón ya te dejaba embarazada!

─¡Me dejaste embarazada con quince años, y por culpa de eso me echaron de la casa! ¡Tuvimos que criarnos solos hasta encontrar esta casa abandonada! ¡Me hiciste la vida imposible, Akio!

─¡Perfecto, me voy! ¡Me voy de esta casa de mierda, para no ver más a esta gente de mierda! ¡Hasta nunca!─ se fue de la casa dando un gran portazo.

Yo estuve espiando todo desde el pasillo. La verdad es que no me entristeció el hecho de que mis padres se separaron, es más, los golpes y estruendos por las noches podrían parar...


Ya han pasado unos días desde entonces. Mamá sale durante toda la noche con sus amigas, y yo me voy a lo de Takeshi a dormir (porque ni loca me pienso quedar con mi hermano), o sino con Eien... Digo, Kaito.

Di los cuatro exámenes pendientes y los salvé apenas con la mínima. Ahora puedo darle un descanso de tres meses al estudio.

Pero no un descanso para ser feliz: tuve que soportar a mi madre discutiendo muy feo con mi hermano. Yo trataba de no salir de mi cuarto, porque ellos son capaces de hacerme de todo (¡siempre que tengo aunque sea una nota baja ya es suficiente para que me den una cachetada!). Cuando mamá sale por las tardes, yo salgo al pasillo a ver si es seguro, y salgo, salgo corriendo a la casa de Takeshi o Kaito a pasar la tarde. Fue así toda mi vida (ojo, antes de entrar al Toho no contaba con ellos: hacía tiempo en alguna plaza, o si llovía o hacía mucho frío, recorría las góndolas del supermercado).


Ya ha pasado un mes desde entonces. En dos meses empiezo la preparatoria. Tengo que juntar mucho dinero para conseguir útiles (siempre trato de cuidarlos mucho los que uso el año anterior, ya que en mi casa la plata no existe).

En ese momento, mamá regresa a la casa. Yo la veo entrar con un hombre desde la otra esquina. Camino despacio hasta entrar finalmente, donde estaban mi hermano y mi madre con ese hombre misterioso.

El tipo lleva unos jeans azules y una camiseta manga corta color rojo. Lleva el pelo marrón lacio y se nota que es diez años mayor que mamá (ella tiene treinta y seis, o sea que el tipo tiene cuarenta y seis).

─Kotaro, Mizumi, sé que me he ido por mucho tiempo durante las noches...

─Así es, me termino muriendo de hambre─ le reclama mi hermano.

─¡A nadie le importa, hijo de puta!

Veo que el hombre pone una cara de: "¿por qué maltrata así a su hijo?".

─Él es mi nuevo novio: Daisuke Misato.

─Un placer conocerlos, chicos─ dice el hombre con una sonrisa.

¿Dijo "nuevo novio"? Eso explica sus constantes desapariciones...

─Ellos son los errores de la casa: Kotaro y Mizumi...

Daisuke vuelve a poner la misma cara.

─Un placer vivir con ustedes─ vuelve a sonreír, tratando de pasar por alto las palabras de mamá.

─¿A qué se refiere con "vivir con nosotros"?─ me atino a preguntar.

─Se muda mañana a esta casa. Así que no quiero quejas de ninguno de ustedes dos. Su padre se murió para mí, y también para ustedes.

─Ni siquiera me importa el tipo ese─ dice mi hermano y se va a su cuarto.

─¡NO SEAS ASÍ FRENTE A MI NUEVO NOVIO, ESCORIA!

Daisuke me mira y me susurra (mientras mamá sigue insultando a mi hermano):

─¿Qué le pasa a esta mujer?

Suspiro, y le digo:

─Siempre fue así.

𝗠𝗔𝗟𝗗𝗜𝗧𝗢 𝗙𝗘𝗟𝗜𝗡𝗢 ❱ 𝗖𝗧 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora