La confesión

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[Narra Hisako]

Estamos de vacaciones, ¡por fiiiiin! Faltan dos meses para empezar el segundo año de preparatoria. Realmente necesito un descanso eterno de las clases.

Yuri regresó de Francia con una enorme sonrisa. Dijo que había logrado resolver sus conflictos parentales, además de volver a ver a su hermanito. Pobre. Ella me contó la historia de su vida, la cual me hizo llorar como condenada, y entonces pensé: "¿la cosa más kawaii del universo tuvo una infancia tan triste?", pobre Misaki.

El otro día la invité a ver a Eri, quien estaba durmiendo como una princesa durmiente. Y casi se muere de diabetes.

─¿Esta bebé hermosa es la hija del tigre Kojiro Hyuga?

─Síp, y mía.

─¡Ahora el tigre y la tigresa del fútbol tienen a una cachorrita de tigre!

─Kojiro quiere que sea una tigresa muy feroz, pero yo le digo que no atropelle a nadie.

─Va a ser una nena hermosa cuando sea grande, y todos los chicos se morirán por ella. Sólo asegúrate de que coma bien.

─El papi cocina bien rico. He ido a su casa varias veces y me ha preparado sushi, takoyakis, carne con puré de papas. Es un gran chef. Dijo que quería conseguir empleo cuando se graduara de la secundaria, y yo le digo que sea cocinero porque en definitiva sabe cocinar bien rico.

─Me imagino. Qué suerte tienes al tener a un novio así.

─¿Ken no cocina?

─Él apenas cocina arroz y no sé qué más. Le sale bien rico, pero la verdad es que las mejores comidas salen de la cocina de mi mamá.

─Ah, sí, nada es mejor que la comida de una madre.

─En fin, te digo que alimentes bien a este pan de Dios.

─Así será. Por cierto, ¿vas a seguir en el Nankatsu o te vas para el Toho?

─Trataré de convencer a mamá de que me deje ir al Toho con Ken.

─Ojalá se te dé, mereces estar con tu chico...

─¡Ya está lista la comida!─ grita mi tigresito desde la cocina.

─Vamos, hizo un sushi espectacular─ la tomo de la mano y la llevo a la cocina.

[Narra Mizumi]

Estoy muy contenta de tener una vida nueva, en una casa nueva y con un padre nuevo. Ya me acostumbré a decirle "papá" a Daisuke.

Hablé con el director del Toho para decirle que me cambié de casa, y que deje de cubrir los gastos de comida y vivienda, ya que a mi hermano y a mamá los llevaron a prisión por maltrato y violencia doméstica. Ahora puedo vivir en paz sin preocuparme de que quieran cobrar venganza.

Aunque dentro de todo, me siento un poco mal de que no pude tener una vida normal con mi verdadera familia, esa herida va a tardar mucho tiempo en cerrar, pero lo importante es que ahora tengo la oportunidad de empezar de cero. Daisuke, Takeshi y Kaito van a ayudarme mucho en este proceso.

Con Takeshi y Kaito salimos todo el tiempo al parque y a otros lugares como la cafetería, McDonald's, etcétera. Es la primera vez en la vida en que realmente estoy feliz.

Justo ahora estamos caminando por la plaza, los pétalos de las flores de cerezo le dan un espectáculo al lugar. Entonces es ahí cuando veo a Kazuki, Rika y Suzuki acercarse a nosotros.

─¡Sorimachi!

─¡Takeshi!

Los dos chocan los cinco.

─¡Awwwww! ¡Pero si es la cosita más hermosa del mundo!─ Rika pellizquea los cachetes de Takeshi.

─Jeje, gracias Rika─ dice, un poco sonrojado.

Entonces veo que Kaito se queda mirando a Suzuki mientras habla con Takeshi y los otros.

─Kai, dile la verdad a Suzuki─ le susurro.

─Quiero hacerlo, pero...

─Es el escenario perfecto para una confesión. Hazlo, porfi─ junto las manos en señal de suplicio.

─Está bien, lo haré por ti.

─¡Gracias! Pero no solo por mí, hazlo por ti también.

─Sí, obvio.

Me voy con Takeshi, Rika y Sorimachi a hablar lejos para dejar solo a Kaito para que se le declare a Suzuki.

[Narra Kaito]

Estoy parado debajo de un árbol de cerezo. Suzuki espera impaciente a que le diga por qué le pedí quedarse.

─¿Y bien, Eien? ¡Perdón, quise decir...!

─No te preocupes, te perdono.

Doy un largo suspiro y empiezo a hablar:

─Sé que no nos hablamos mucho en el colegio, pero la verdad es... que tú...

─¿Yo qué? Kai, ya dímelo...

─Tú me... me gustas...

Pensé que me iba a decir que tenía novio, que iba a decir que no le gustan las chicas varoniles, que iba a decir que buscara a alguien más, pero en vez de eso recibí un "rechazo" pero no me desilusioné por lo que dijo:

─Escucha, Kai, no quiero romperte el corazón, pero yo no siento lo mismo que tú. ¡Ojo! No digo que seas feo, sólo digo que no me gustas.

─Oh, no, no. Está bien, lo entiendo...

─La verdad es que no sé quién me gusta, ya sea hombre o mujer.

Yo doy la vuelta y estoy por irme, pero un agarre de muñeca no me deja dar un paso.

─Pero estamos bien, podemos salir si quieres, tal vez en alguna de esas me puedas llegar a atraer.

─¿En serio?

─Sí. No me caes mal, y para ser honesta, creo que eres genial.

─Nah, exageras, tú eres mucho más genial.

─¡Oigan, ¿quieren ir al Shopping?!─ nos grita Rika.

─¡Ya vamos!─ Suzuki me toma de la mano─¿Vamos?

─¡Síp!

Vamos corriendo hacia allá.

Me siento bien al saber que podemos salir en modo amigos hasta que ella elija con quién quiere estar.

Siento que mi vida dio un giro de ciento ochenta grados, justo como la de Mizumi.

𝗠𝗔𝗟𝗗𝗜𝗧𝗢 𝗙𝗘𝗟𝗜𝗡𝗢 ❱ 𝗖𝗧 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora