La vida no tiene color

483 41 11
                                    

[Narra Hisako]

Mi tigresito y yo estamos hablando por teléfono. Como estoy en mi descanso luego del entrenamiento, aprovecho a saber de él.

─¿Van a entrenar para el partido de mañana?─ le pregunto.

─Sí. Nos vamos a enfrentar al Musashi, así que tenemos que tener cuidado.

─Oh sí, Misugi es muy poderoso.

─Cambiando de tema, ¿me extrañas?

─Obvio, te extraño más a ti que a mi padre.

─Wow, sí que me extrañas, jeje.

─Bueno, mi descanso terminó. Te hablo más tarde. Mándale saludos a todos los del equipo, y que tengan suerte mañana. Le voy a pedir al entrenador que me deje ir a ver su partido.

─Awww, eres una dulce.

─Jijiji.

─Bueno, adiós, tigresita.

─Matte ne─ eso significa "hasta luego" en japonés.

Corta y dejo el celular en mi mochila. Estoy dispuesta a entrenar como nunca para poder jugar sublimemente en el torneo.

[Narra Sorimachi]

Estamos en medio de una reunión para plantear estrategias para el partido de mañana. Realmente estoy aburrido (más bien estoy ¡harto!) de escuchar la voz del entrenador hablando. Parece un monólogo, pero el de Hamlet es mucho mejor, jaja.

En eso, la veo:

─Hey, Sori─ me susurra Rika, mi mejor amiga y una de las mánagers del equipo─. Mírame─ empieza a escalar el marco de la puerta con las piernas, pero se cae, jaja, el entrenador parece no darse cuenta. Esto es muy divertido.

Rika y yo somos amigos desde la primaria. Hemos estado en la misma clase desde siempre y nos dedicamos a hacerle bromas al entrenador sin que se dé cuenta.

Es una chica de pelo rosa y ojos del mismo color. Es muy divertida y... y linda.

La veo pararse encima del escritorio, justo detrás del entrenador, y se sube la camiseta hasta los senos, dejando ver un dibujo del entrenador diciendo: "Soy un viejo lesbiano"... ¡Diooooos, me muerooooo!

Todos se mueren de risa, incluido yo.

─¡¿Ahora qué?!─ se da vuelta y se encuentra con Rika, quien sale disparada del salón─¡Ven acá! ¡Voy a encontrarte!

Dios, esta chica es una loquilla.

[Narra Mizumi]

Otro día de mi vida sin sentido. Ya estoy harta de vivir. La vida no tiene color.

Desde que nací fui criada en un ambiente violento. Muy violento. Mis padres discutiendo, mi hermano insultándome... No puede haber nada peor.

Ahora mismo estoy caminando hacia el baño, donde veo a Rika corriendo hacia él. Esta chica volvió a hacerle una broma al entrenador. Hay veces en que quisiera ser como ella: feliz, alegre, simpática... Yo no tengo ninguna de esas cualidades.

Yo crecí escuchando a mi madre quejarse de que engordó durante el embarazo (cuando me dio a luz a mí), que perdió pelo, que quedó caderona, en pocas palabras, que quedó fea, pero yo la observo y sigue siendo una hermosa mujer, aunque su carácter hacia mí no es hermoso. Pelea con papá por eso y porque nuestra situación económica no es muy buena que digamos. Y luego está mi hermano: que desde que era una bebé me decía: "cara de rata" (cuando era niño) y "error" (ahora). Mi padre sale al bar a beber, mamá suele salir con sus amigas, y mi hermano casi siempre se queda, y yo tengo que salir de casa, porque es capaz de golpearme o de insultarme. No tengo mi propio espacio, al no ser que sea en la noche, que le pongo tranca a mi puerta y corro la mesita de mármol pesada que tengo para que esté más segura. Me escondo dentro de las sábanas y me pongo a llorar hasta que no me queden lágrimas.

Fue así toda mi vida. Extraño a Yuri y Taro, mis únicos amigos en la escuela. Desde que empecé la primaria, ellos se fueron y yo me quedé sola. Ahora tengo a una amiga, Eien, pero aún así los extraño infinitamente.

Lo único que hago es llorar todo el tiempo, justo como ahora.

Lo único que hago es llorar todo el tiempo, justo como ahora

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

[Narra Hyuga]

Terminamos el entrenamiento. Me estoy yendo a mi casa, caminando tranquilamente.

En eso, Hisako me llama.

─Hola, tigresa.

─Holiiii.

─¿Cómo te fue?

─Muy bien, aunque...

─¿Aunque qué?

─Cuando estaba por anotar el décimo gol..., sentí un fuerte dolor de cabeza, y ganas de vomitar...

─¿Qué?─ pregunto, sorprendido y un poco preocupado.

─Me ha pasado mucho estos últimos días... Por momentos me siento bien, pero siempre aparece el dolor de cabeza, vómitos y desmayos constantes.

─Eso es preocupante. Tendrías que ir al doctor...

─Tal vez, pero estoy muy ocupada...

─No entrenes mucho, o te puede pasar más seguido.

─Está bien. Nos vemos, tigresito. Sólo quería saber cómo estabas─ escucho que me tira un beso.

─Jejeje, bueno. Bye.

[Narra Hisako]

Si esto continúa, tendré que ir al doctor, tal vez tenga una enfermedad grave... No, no debo pensar en eso o lo voy a manifestar, y no quiero que suceda...

Upps, mi mamá me llama a merendar.

𝗠𝗔𝗟𝗗𝗜𝗧𝗢 𝗙𝗘𝗟𝗜𝗡𝗢 ❱ 𝗖𝗧 ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora