Capítulo 25: Tú tienes la culpa.

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|Robin|

A la mañana siguiente, sonó el despertador y lo apagué, me levanté al instante, no sabía lo que pasaría hoy, pero solo esperaba tener un buen día.

Me di una ducha, me vestí y bajé a desayunar.

Mis padres aún no se habían ido, mi madre le daba un sorbo a su café y mi padre leía el periódico.

–Buenos días.–dije a ambos.

–¿Cómo has dormido?–preguntó mi madre al verme.

–Bien.–mentí, la verdad me había costado mucho dormir con tantas cosas en la cabeza.

Me quedó mirando, a veces odio que ella me conozca tanto, sabe cuando le miento y sabe cuando algo anda mal conmigo.

Me serví un vaso con jugo de naranja y tostadas que había hecho mi madre y me senté a su lado, mi padre seguía leyendo su periódico, tal vez estaba muy interesante.

Mi madre me hablaba y yo solo podía responder moviendo la cabeza, quería que fuera un buen día pero a la vez me sentía triste y sin ganas de nada.

Cuando acabé de desayunar me levanté de la mesa y tomé mi bolso.

–Ya debo irme al trabajo, lindo día.–dije fuerte para que ambos me escucharan.

Abrí la puerta sin esperar una respuesta de mis padres y me encontré con la sorpresa de que Steve estaba esperándome afuera.

–¿Qué haces aquí?–le pregunté riendo.

–Te vine a buscar, sube.–dijo abriendo la puerta del auto.

Me subí y él comenzó a reír.

–Eres un idiota, Harrington.

–Pero tú idiota.–bromeó, o al menos eso quiero pensar.

–¿No crees que deberíamos irnos? ¿o quieres llegar tarde al trabajo?

Rió y miró al frente para conducir.

[...]

Ya habíamos abierto la heladería, los clientes comenzaban a llegar y nos turnábamos con Steve para atender.

La mañana pasó muy rápida y ya era hora de almorzar, al menos Steve me había alegrado un poco el día, me encanta trabajar con él y no podría haber tenido un mejor compañero de trabajo que él, es muy gracioso y me hace reír bastante.

–¿Qué harás ahora?–preguntó Steve.

–No estoy segura.

–¿Almorzamos juntos?

–Está bien.–respondí con una sonrisa.

|Clarity|

Llegó la hora de almorzar, la mañana había sido muy agotadora, habíamos tenido muchos clientes así que estaba esperando esta hora con ansias.

Estar peleada con tu novia y tener un día de trabajo tan agotador como el mío, definitivamente no era la mejor combinación.

That's my girl | Robin BuckleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora