Paul
Me llamo Paul Gordón tengo cuarenta y dos años, tengo un hijo llamado Julián es sacerdote y mi orgullo. Bueno que les voy a decir de mi.
_ Que eres idiota- dice una voz en mi cabeza, se que es Corey, lleva hablando en mi cabeza desde que tenía quince años, pues es una de las voces que me hicieron tomar la decisión de querer ser un sacerdote- porque es lo mejor para ti- dice en mi cabeza joder odio eso, bueno os contaré mi historia.Flashback
Cuando tenía quince años ya cumplidos era un niño feliz, atractivo, uno de los mejores en clase, tenía como mejor amiga a la chica más popular del colegio, Cara Brown, morena con ojos grises, pero solo era eso mi mejor amiga, pero no sabía que tiene sentimientos hacia a mi, el padre Marcus, era el sacerdote de la iglesia de Miami donde vivía con mis padres, pues si eran ricos pero egoístas, no les interesaban mis sentimientos, apenas aparecían para la cena, si os digo cena, digo el desayuno y la merienda, ni mucho menos en alguna función del colegio o mis cumpleaños en fin que me acostumbré a la Soledad, gracias a la compañía del Padre Marcus y de Cara, la soledad no me importaba tanto, pero a veces la gente no son como lo crees, mi amiga vino el viernes en la tarde a mi casa ya que prácticamente vivía solo con mi nana y los demás sirvientes, me pasaba la vida en la biblioteca.
_ ah estás aquí- me dice Cara entrando en la biblioteca- vamos hay una fiesta a la que debemos ir, quiero que salgas de aquí un poco- me dice acercandose a mi para cerrar mi libro.
_ No, Cara sabes que no me gustan esas cosas, prefiero quedarme aquí- la digo.
_ Vamos P nos vamos a divertir- me dice y yo asiento es mi amiga confío en ella.
Nos fuimos a la fiesta estuvimos disfrutando, bueno ella yo solo estaba en una esquina observando mientras ella me traía los refrescos que me hacían marearme, lo único que recuerdo es que me invitó a bailar y se puso a tocarme, al amanecer me levanté con un dolor de cabeza terrible, miré hacia cada lado y detrás de mi en la cama estaba Cara, desnuda.
_ ¿ pero qué...- ni siquiera terminé cuando la vi, despertarse cuando ella ya estaba levantándose y la veía salir desnuda de la cama.
_ Buenos días P- me sonríe la muy descarada, intenta acercarse pero yo retrocedo.
_ Es una cualquiera- dice una voz en mi cabeza, pero no la presto atención, bueno fue la primera vez que la escuché- tenía planes para ti quería que fueras sacerdote ahora estás lleno de pecados y te irás al infierno- yo me asusté.
_ Pero P, ¿ porqué me rechazas?- me pregunta y yo la observo- a noche la pasamos muy bien, siento ira, asco hacia ella ahora.
_ ¿ Qué ha pasado?- la pregunto, ya que ahora está creciendo en mi una ansiedad inmensa, tengo miedo, pánico a que ella me toque.
_ Obvio, nos acostamos- dice muy suelta- yo te amo- dice mientras que se pone delante de mi.
_ Pero yo no, quiero ser un sacerdote, me gustan las mujeres pero no es para tanto, ¿ porqué hiciste esto?- la pregunto ya con lágrimas en los ojos.
_ Por amor, porque te quiero.
_ Solo tengo quince años, soy un niño, no tengo la necesidad de tener nada de eso, yo también te quiero pero como a una hermana- salí de allí para el baño, me vestí y me fui a mo casa, al llegar mis padres me echaron una bronca.
_ ja, como si les importara- dijo otra voz en mi cabeza- creo que si dejaran de existir sería lo mejor- dice otra vez, yo sacudo mi cabeza para no escucharla.
Un mes más tarde llevo desde aquel día escuchando estas voces en mi cabeza, me obsesioné con la iglesia, todo lo que tenga que ver con la Biblia, el padre Marcus me llevó a ser monaguillo, todo el tiempo sentía pánico como si me observaran y las voces se hicieron más frecuentes, era una tortura, ya no dormía normalmente, no he hablado con Cara desde entonces, no quiero saber nada de ella, es una hipócrita.
_ Que debería estar muerta desde el día en que cometió tal pecado- dice Jack en mi cabeza- mejor nunca te acerques porque tienes una misión en la vida, eso es lo que ocurre cuando confías en las mujeres al final abusan de ti- dice.
_ ¡ ya cállate!- grito tapando mis oidos, joder estoy en la biblioteca y la gente me está mirando así que me levanto para irme a mi casa.
_ Tenemos que hablar- me dice Cara ya que me espera en la sala de mi casa.
_ Matala, es una pecadora- dice Jack en mi cabeza, pero no le hago caso.
_ No quiero, puedes irte- la digo subiendo las escaleras.
_ Estoy embarazada- me dice y yo me quedo en shok.
_ ¿ Qué?- la miré bajandome de las escaleras.
_ Pues si, estoy embarazada, aquella noche me quedé embarazada- me dice para después irse.
_ Este bebé es un niño del pecado, así que para purificar su alma tú renunciarás a el sacerdocio y él o ella será un sacerdote o una monja solo así tu alma se salvará- me dice Jack y yo asiento
Mis padres llegaron esa misma noche y nos pusimos a cenar, con tranquilidad charlando con mis padres y con las voces de mi cabeza, escuchamos ruidos, eran los padres de Cara entrando en casa.
_ ¿ dónde está?- preguntó Sammuel el padre de de Cara, se acercó y nos levantamos a su encuentro- aquí estas sinvergüenza- quiso aventarse a mi pero mi padre me defendió, algo extraño.
_ ¿Qué te pasa?- preguntó mi padre muy alterado y vimos a Cara llena de lágrimas.
_ Pasa que el descarado de tu hijo ha embarazado a mi hija y he venido a regalárselo- dice con desprecio y se va, veo a Cara con las maletas en el suelo.
_ ¿ Cómo has podido?- pregunta mi madre y no sé que decir porque entro en pánico.
_ Ahora coge a tu novia y lárgate de mi casa, no quiero a un bastardo aquí en mi casa- dice empujando con Cara fuera de la casa, la ayudé con las maletas, bueno me esperaba eso de ellos pero no la reacción de los padres de Cara.
_ ¿Vez donde nos ha llevado tu estupidez?- la pregunto y ella se pone a llorar.
_ Lo siento, perdóname- me dice en sollozos.
_ Que te perdone Dios porque yo jamás lo haré- nos fuimos a la casa del Padre Marcus y me ayudó a conseguir donde quedarnos, me dio trabajo con la ayuda de un amigo suyo, cobraba muy bien para mi edad así que la daba todo lo que quería.
_ Tienes que matarla, después del parto- me dice Jack- así tendrás mayor influencia sobre ese mocoso que lleva dentro- no yo no soy un asesino- pues yo si y me ocuparé de tu cuerpo el día de parto.
_ ¿ Donde vamos?- me pregunta sollozando.
_ En la casa del padre Marcus, él nos ayudará.
Nos fuimos a la casa del padre Marcus y nos recibió, con el tiempo busqué trabajo, pero gracias al padre Marcus un amigo suyo me enseñó a trabajar para cuando Cara ya tenía ocho meses de embarazo yo ya trabajaba en una oficina la verdad es que aprendí rápido, de mis padres no supe nada, mi enfermedad avanzaba cada día más pero trataba de ocultarlo con antidepresivos hasta que llegó el día del parto de Cara y discutimos, la empujé y se hizo daño pero lograron salvar al niño y ella estuvo delicada así de fácil la maté, sus padres vinieron después cuando ella ya estaba muerta, lloré pero no de dolor sino de felicidad, las voces de mi cabeza estaban muy felices pero cuando tuve a mi hijo, se callaron, eso durante un tiempo, quisieron quitarme a mi bebé pero no se los dejé, unos años después el padre Marcus me transfirió su empresa y todos sus bienes, así que dejé el colegio para ocuparme de las empresas y mi hijo, las voces volvieron quince años después cuando el pequeño Julián comenzó a pecar, anteriormente Jack me incitaba a matarlo por pecador pero Piter me decía que no, que él podía ser el sacerdote que me libre de mis pecados, que además es mi hijo, mis padres y los padres de Cara se acercaban a mi hijo, se los dejé pero cuando vi que querían meterse conmigo, las voces de mi mente, me hicieron matar a mis padres en un incendio dentro de la casa, así que heredaron todos sus bienes a Julián y este a sus quince años comenzó el trabajo en las oficinas clave le ayudaba, yo jamas tuve un sentimiento negativo hacia mi hijo siempre y cuando sea un sacerdote, Julián se ocupaba de todo, mientras que yo a escondidas llevaba mi tratamiento ya que descubrí que tenía esquizofrenia Paranoide, fue muy duro llevarlo pero lo que me dijo mi psiquiatra es que se detonó gracias a un acontecimiento no voluntario que realicé en la niñez así que imaginen quién fue la culpable, y las pagó con creces.
Mi hijo a los diecisiete comenzó una relación con una chica muy bonita y eso me molestó porque como dije tengo planes para él, seduje a su noviecita, me acosté con ella mientras que la muy zorra lo hacía también con mi hijo, así que tuve que actuar el último día del colegio, la encontré en el sofá y calculé que mi hijo iba a volver en cualquier momento así que la seduje pero mi hijo apareció y con todos lo que pasó decidió irse al seminario.
_ Ah objetivo conseguido- dijo Jack en mi cabeza y me puse a reir.
Para mi mala suerte el dijo que no quiere volver a verme pero a mi me da igual lo único que quiero es recibir su penitencia para así salvar mi alma.
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Bajo las Garras De Un Santo #1
Mystery / Thriller_ Ave María Purísima padre- digo de rodillas al lado del confesionario y desde aquí puedo percibir su aroma. _ Sin pecado concebida- me dice. _ Padre he venido a confesarme, porque he pecado de pensamiento- le digo con lágrimas en los ojos. _ Dime q...