Capítulo XXIII

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Julián 

Ya han pasado tres semanas desde que Ana está en el hospital, encontraron el cuerpo de su madre en el sótano de la casa de los abuelos de Ana, ella ha estado deprimida llorando, no se hable de su padre y sus hermanas, hoy salimos para otra ciudad, ella y yo somos los señalados del pueblo y no quiero que ella viva incómoda, por una parte ella está preocupada por dejar a Kailie todavía en coma, pero es lo que tenemos que hacer, a Kailie mi padre ha decidido llevársela a un buen hospital y yo junto con Ana nos vamos con él, porque tengo que cuidar de su medicación.
Kailie no se despierta y odio ver a mi padre así de deprimido, es como sino tuviera un alma eso me molesta pero lo bueno es que toma en serio su medicación, su terapia aunque se queja por la terapéuta que lo acosa y se insinúa, él odia a este tipo de mujeres, dice que no le gustan, por más que ella sea su terapeuta él lucha contra las voces de su cabeza para no matarla. 
Ahora estoy en el cuarto de Ana, ella se ha quedado dormida entre mis brazos, me duele verla triste, lleva varias noches junto con mi padre durmiendo en en el hospital, oficialmente ya no soy un sacerdote, así que ne he concentrado en mi trabajo, las empresas que heredé y las otras que tiene mi padre, quiero irme a Dubái para instalarme, ya que la familia de mi padre es mitad árabe de eso mis rasgos árabes y tienen las empresas allí, tengo que irme junto con mi familia.
_ Ana- la llamo, ella se remueve- tienes que comer.
_ No tango ganas.
_ Hazlo por mi, Ana, yo me estoy muriendo viéndote así no quiero ayer te enfermes.
_ Lo intento te lo juro, pero es que no es fácil, Kailie está en coma, mi madre está muerta y esa asesina sigue en la calle como si nada obsesionada conmigo.
_ Pero nada de esto es culpa tuya- la digo casi agitado.
_ La muerte de mi madre tal vez, pero ¿y lo que le pasó a Kailie?, si no me hubiera enamorado de de ti nada de esto pasaría- es entonces cuando la saco de mi regazo y me levanto.
_ Si tanto lamentas estar conmigo y me hechas la culpa de lo que le pasó a tú mejor amiga mejor me voy- digo para así irme hasta la puerta de su cuarto, pero cuando estoy apunto de salir siento su mano agarrando la mía.
_ No mi vida- me dice y me abraza desde atrás- no te vayas- me dice pegando su nariz en mi nuca, últimamente hace esto, me giro y nos quedamos viendo de cerca, ella pega su frente con la mía mientras que la frota una y otra y otra vez- perdóname- me dice y me besa la nariz- eres mi vida- dice y yo ya respiro con dificultad, siento cómo mi pene se hincha entre mis pantalones.
_ No hagas esto sino puedo hacer nada para remediarlo- la digo tratando de apartarla, su simple roce me abruma.
_ Te hecho de menos, deseo que me toques, hace mucho que no me tocas- dice pasando su nariz en mi cuello y yo suspiro- hazme tuya Julián- dice dándome besos por toda la cara- hazme el amor como antes, hazme olvidar mi vida- me dice besandome y yo no puedo hacer nada más que devolverla el beso.
_ Te echo de menos- la digo mientras que la saco el vestido, ella se queda solo con la ropa interior, no lleva sujetador.
_ Hazme sentir bien- me dice y yo la llevo a la cama otra vez para así ponerme sobre ella, la quito la ropa interior y la beso, nos besamos desenfrenadanente, bajo hasta su cuello, sus gemidos me vuelven loco, lo hago con cuidado porque su herida no se ha curado del todo, los beso van bajando hasta sus senos, lamo, chupo, muerdo y succiono cada pezon, ella gime en voz alta- Julián- no dejo de chuparlos, los besos bajan hasta su ombligo- muerden Julián- lo hago llego a su clitoris lamo, succiono y muerdo su clitoris- más Julián- dice casi en un gemido, muerdo, lamo y succiono, joder la he echado de menos casi tres semanas sin tocarla, no es sano para mi, solo su gemido me hace ponerme duro hasta el extremos de querer romper mi pantalón, pero no es así como la quiero.
_ Ana- la llamo, ella me observa- no es así como te quiero.
_ ¿Qué...- me mira con el ceño fruncido.
_ Te quiero en mi cabaña, atada, sabes que no sé hacerlo de otro modo, quiero experimentar cada paso que doy contigo, así que vístete y vamonos- la digo para así apartarme y nos vamos a la cabaña, treinta minutos después llegamos, y nos sentamos en la mesa mirándonos- ¿me deseas?- la pregunto y ella me mira con intensidad.
_ Sabes que si Julián- me dice casi en un susurro, toda su piel está enrojecida, tiene las pupilas dilatadas, los labios entreabiertos e hinchados, no hay nada más sexy que esto.
_ Entonces ponte sobre la mesa y tócate delante de mi- la digo y ella me sonrie pícara, se pone de pie y se quita el vestido lentamente, movimiento sus caderas de un lado para otro, y yo inhalo y exhalo, mordiendome el interior de la mejilla, cómo ¿se puede ser tan sexy?, joder me duele la polla de tanto palpitar entre mis pantalones, ella me mira con lujuria, el vestido se cae en el suelo, se queda desnuda ante mis ojos- vamos nena, sabes lo que quiero- ella se coloca con cuidado sobre la mesa larga, y se abre de piernas delante de mi- tócate los pechos Ana- la digo y ella lo hace, joder desde aquí solo a un metro puedo oler su excitación y no se diga de lo mojada que está- tócate como lo hiciste alguna vez- la digo y ella lo hace procede ha bajar la mano derecha entre sus piernas, me acerco con mi silla y respiro el aire fresco a almizcle que sale entre sus piernas, me encanta, me encanta saber que todo esto es por mi, me hace sentirme poderoso, me encanta saber que tengo ese poder sobre ella, pero lo que más me incomoda ahora es ese falo palpitante entre mis piernas, así que me lo quito, comienzo a masajeando de arriba a abajo, escuchando sus gemidos- Ana no es suficiente- digo ahora con la cara entre sus piernas percibiendo su olor- mueve rápido los dedos y meterlo en ti- la digo y ella lo hace ella comienza ha dar masajes con rapidez.
_ Julián- me llama pero yo lo unico que quiero es pasar mi lengua en esos jugos que se forman en sus manos- Julián porfavor- está apunto de correrse, quito su mano y pasión mi lengua entre sus pliegues- oh- suelta un suspiro, así que atrapo su clitoris entre mis labios y lo chupo con intensidad, rasco con los dientes sus labios vaginales, lamo y chupo su raja, enterrando mi lengua en él, la follo con la lengua, vuelvo a su clitoris lamiendo, chupo y sacudo mi cabeza con él entre mis labios y ella grita- ¡Julián!- me aparto inmediatamente para irme a uno de los cajones y sacar un huevo vibrador con pinzas de cuerda.
_ Vamos preciosa, él necesita tú atención- la digo colocando con cuidado las pinzas para irme entre sus piernas, rozando mi miembro en él una y más veces, me sumerjo en ella- oh joder- digo mientras que salgo y entro en ella con toda la calma disfrutando de lo caliente, mojada y apretada que está- nunca me prives esto- la digo mientras ella y yo solo somos gemidos y embestidas suaves.
_ Nunca más- me dice en un susurro, pero lo que más quiero ahora es su boca, salgo en ella, ella protesta, meto el huevo en ella y lo activo- Julián- es lo que escucho.
_ Vamos nena, necesito tu boca- la digo mientras la doy media vuelta sobre la mesa y se apoya sobre los codos para así tener acceso a mi polla, subo la intimidad del vibrador y ella gime, esa es mi oportunidad para meterla la polla en la boca y que ella lo mame como si de un caramelo se tratara, comienza lamiendo poco a poco, para después chupar con intensidad tanto que hasta me tambaleo, ella me hace perder las razón, la cabeza pero ahora lo hace con la energía, es toda una diosa, una afrodita, mi afrodita, muerde mi glande, lo chupa y lo succiono intenta tocarme pero me parto- quiero tu boca no tus manos- me aparto y entro en su boca hasta al fondo haciéndola atragantar, para dejarla tiempo de tomar aire y cuando ella se tranquiliza, agarro sus cabellos y follo su boca, saco mi pene y la dejo respirar.
_ Julián, me corro- me dice, pero yo la follo la boca mientras que subo la velocidad de las vibraciones, así se que cuando se corre succiono mi glande hasta tensarme los testículos, no es hora de correrme así que aparto apagando el huevo, la coloco y la dejo parada atando sus manos en cruz, su doblo su pierna y la ato junto con la mano derecha de paso se queda solo con una pierna suspendida.
_ Mantente suspendida con una pierna- la digo y ella lo intenta, con esfuerzo así que vuelvo a encender el huevo, ella comienza a moverse inquieta- Ana, mi preciosa Ana, ¿ quieres que te folle?- la miro impaciente esperando su respuesta cuando ella intenta hablar subo la intensidad, ella gime en voz alta.
_ Si, si joder quiero que me folles- dice casi en un grito y yo estiro la cadena que une las das pinzas, ella gime- me corro Julián- me agacho ante ella y chupo su clitoris- oh Julián- me mira mientras que chupo, muerdo y succiono su clitoris y ella grita mi nombre con un orgasmo muy largo- ¡Julián!- dice mientras vibra, quiere caerse pero yo la sostengo, no dejo de besarla lamer y succionar su clitoris, tragando de ella, me aparto me levanto y voy a besarla, nos besamos desenfrenadanente- te amo- me dice cuando nos separamos y yo la sonrío, me coloco tras ella, quito el huevo, beso su cuello cuando arrastro mis dientes en su cuello ella suelta un gemido largo y yo coloco mi mano sobre su clitoris y lo masajeo entre mis dedos, vuelvo a repetir el proceso con mis dientes en su cuello y siento cómo se moja más, en una sola estocada me hundo en ella, desde atrás, entro y salgo con cuidado, sintiendola, subo mis embestidas, sus gemidos me vuelven loco así que entro en ella y salgo sin preocupación, estiro con cuidado las pinzas pero ella grita y succiono mi penf en su interior, joder me vuelve loco, así que salgo en ella y entro en la parte trasera, lubricandolo con sus propios jugos, cuando me introduzco en ella, lo hago con cuidado ya que hace mucho que no entro en ella por esta parte- oh Julián- dice cuando masajeo su clitoris mientras entro en ella- más rápido- ¡descarada!, ¿ dónde se quedó la Ana de hace unas horas?, lo que hace el sexo con la gente, pero empiezo con mis estocadas fuertes mientras masajeo su clitoris que ya está casi chorreando, estiro la cadena de sus pechos, ella gime y me aprieta mucho más y yo jadeo, joder eso es la gloria, me alejo de ella, voy hasta la pared y me coloco un arnés del tamaño de mi polla, y vuelvo a su encuentro, desató su pierna, las enrollo en mis caderas y meto el arnés en su entrada vaginal y mi pene en su trasero.
_ Ana, ahora vamos a follar duro- comienzo con las embestidas lentas, después con las dolorosas, duras, fuertes, muerdo cada seno, saco las pinzas de sus pezones mientras la embisto con fuerza, me vuelve loco, su cuerpo todo de ella me enloquece,no me controlo, soy como un animal cuando estoy en ella, soy un animal cuando la tomo, su animal, mientras la follo desato sus manos y me la llevo a la cama, elevando sus caderas para tener más acceso, la penetro con brusquedad, eso es lo que quiere que yo pierda la cabeza mientras la tomo, ya que sus gemidos no ayudan, el choque de nuestros cuerpos mientras la penetro, el olor a sexo, a su aroma y el mío mezclado tampoco me ayudan en nada.
_ Ya... no pu...puedo... más- dice y me succiona el miembro yo gruñó varias veces porque yo tampoco puedo, ella se curva soltando gemidos, mis testículos se tensan, la tensión y el calor por toda mi espalda aumenta y no soy más que gruñidos cuando me corro y ella también gritando mi nombre- ¡Julián!- me grita y me vacío en ella sintiendo nuestros corazones palpitar como locos, la beso y nos separamos, salgo de ella despacio, froto su clitoris ya que esa vagina sigue succionando mi polla y ella suelta un gemido mientras vibra, eso quiere decir que acaba de tener otro orgasmo, salgo de ella con cuidado y la coloco sobre mi pecho con las piernas abiertas.

Ana

Hacía casi un mes que no me tocaba, he echado mucho de menos sus caricias, definitivamente solo él me hace sentir bien, apesar de todas las temporadas, él es mi calma, tenerlo dentro de mi es la mejor calma del mundo, he pasado por tanto este mes, la perdida de mi madre, mi mejor amiga y hermana en coma, las humillaciones en las calles por haberme metido con un santo, lo ultimo no me interesa lo otro sí, mi padre me ha apoyado, apesar de su duelo me ha apoyado, se ha ido de viaje para despejarse un poco, mis hermanas están con lo suyo, yo solo me preocupo por mi amiga, mi suegro y mi hombre, ahora estoy acostada sobre el pecho de Julián, rozando con la llena de mis dedos su torso.
_ Te he echado mucho de menos- me dice y yo sonrío, para después depositar un beso sobre su pecho.
_ Tú a mi mi vida, creo que estar así contigo me ayuda mucho con lo que me está pasando, solo quiero que llegue mañana para poder irnos- le digo con esperanzas.
_ He contratado a una enfermera para Kailie, mi jet viene esta noche para irnos a primera hora en el aeropuerto.
_ Mejor porque quiero irme, ya nada me ata a este pueblo, mis hermanas son felices con sus vidas, apenas se acuerdan de que tienen una hermana pero las entiendo, ya tienen sus propias vidas, sus familias como yo quiero formar la mía- le abrazo y nos besamos.
_ Eres tan hermosa- dice con un tono de admiración, mi mejilla se tiñen de rojo, para así sentir su mano entre mis piernas, acariciando mi clitoris, ciero los ojos soltando un gemido, cuando lo abro veo su mirada oscura, prendida en mi- montame- me dice y yo le observo para después obedecer su orden, me subo a horcajadas de él y meto su polla en mi con cuidado saboreando el momento y sintiendo cómo mi sexo se la traga por completo, una de mis manos se apoya en su pierna mientras que la otra se apoya en su pecho, me muevo hacia arriba cuando bajo los dos gemimos en voz alta- vamos preciosa tú puedes darme mucho más- me dice y yo comienzo con las embestidas fuertes y rapidas, hago varios ochos, me inclino para besarle, succionar su cullo y el suelta un jadeo- ah, Ana- dice y me siento orgullosa de todo lo que hago, me muevo más rápido, siento que un animal sale en mi, me siento una fiera, todo el odio, el rencor hacia esta mujer, las humillaciones de la gente del pueblo, todo esa frustración la saco en mi durante el sexo- vamos Ana, sacarlo todo- me dice con voz ronca, el odio de esa mujer, las veces que me pegaba y no podía defenderme porque pensaba que es mi madre, las veces que la zorra del restaurante tocaba a mi hombre, si mío- Tuyo, solo tuyo mi amor- me dice en voz ronca mientras jadea, de repente me gira y me coloca por debajo de él y me embiste con brusquedad, los dos nos movemos juntos, nos tensamos y sé que él también siente la necesidad del orgasmo, suelta gruñidos y yo también hasta que los dos nos corremos- mía, mía, mía- me encanta que sea así de posesivo, después de esta sesión de sexo volvemos a casa, para comer y dormir ya que es tarde y mi suegro está apunto de volver, bueno él ha mejorado mucho, dice que ya no escucha las voces solo que no ha mejorado del todo.
Al amanecer nos vamos todos en una camioneta grande ya que el aeropuerto está un poco lejos del pueblo, decidimos ir en coche hasta allí, mi hombre y yo estamos juntos mientras que mi suegro no se ha despejado de Kailie, de repente todo pasa como una cámara lenta, un camión enorme no sabemos dónde sale, nos arrastra sacandonos de la carretera para así romper el coche y yo salir volando de los cristales, todo se vuelve negro, cuando me despierto solo escucho las sirenas, la gente hablando por todas partes, pero solo pienso en él.
_ Ju... Julián- digo con dificultad, veo a varios para médicos llevándome en una cama, yo solo quierosaber dónde está- Ju...lian- vuelvo a repetir.
_ Señorita calmese- me dice una enfermera, pero no puedo.
_ ¿ Q...qué me pasó?- digo con dificultad.
_ Tuvieron un accidente y lo siento es usted la única superviviente- me dice y yo solo veo todo negro, no veo nada más, no sé si estoy muerta, solo sé que ya no está, ya no están.
_ Ana, Ana- escucho que me llaman desde el fondo, esperen es la voz de mi madre, abro los ojos y veo a mi preciosa madre sonreirme.
_ Ma...mamá- la digo y ella me sonríe lo único que hago es abrazarla.
_ Vamos, despierta, tú hermano y Kailie te están esperando para el viaje, asegúrate de que tome sus medicinas, puede que él ya sea grande pero esta enfermo y está aferrado a ti y a ella- me dice y yo la observo con el ceño fruncido- Paul te está esperando cámbiate- me dice para así salir de mi cuarto y Kailie entrando.
_ Joder, he tenido un sueño loco- me dice y yo la miro- he soñado que te enamoras de un cura, tu madre está muerta, yo me enamoro de Paul- eso lo dice y se ruboriza- y que todos acabamos muertos- joder ha soñado igual que yo.
_ Créeme yo también- la digo en un hilo de voz tapando mi cara con la almohada, todo eso ha sido un puto sueño, un jodido sueño, aunque lo único real que quiero es Julián.


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Bajo las Garras De Un Santo #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora