Bajo las Garras De Un Santo #1

Julián

Aquí está ella, delante de mi, tanto hermosa como natural, es tan perfecta mi preciosa Ana, nos miramos durante un largo tiempo, salí del seminario pidiendo permiso para pasar unos días en la casa de mis padres, atender a mis negocios y en el concierto la vi, tan preciosa cantando en el escenario y cuando salía del baño, adivinen qué, la tenía delante de mi.

_ Bienvenida mi preciosa Ana- la saludo y veo cómo se estremece, me encanta tener ese poder sobre ella.
_ Buenas noches ¿señor?- me pregunta con duda.
_ Julián Gordon , llámame Julián- la digo acercándome a ella y veo cómo tiembla- bienvenida a mi humilde morada, pase- la guío y ella entra, cuando llegamos al living la doy una copa de vino sin alcohol.
_ Estoy aquí para entregarle su celular.
_ Y cenar conmigo- terminé su frase aunque a decir verdad dudo que fuera eslabón lo que quiso decir, ella se puso nerviosa y se mordía el labio- no lo hagas, no lo muerdas- la digo porque la boca se me hace agua.
_ Perdón- dice y se lame los labios mirando su copa, joder quiero besarla y eso haré, me acercó lo suficiente como para sentir su aliento- No- dice casi en un susurro cuando la atraigo ami pasando mi brazo por la cintura, recé mi nariz con la suya y mi mano subía hacia sus nalgas y las apreté mientras que restregaba mi nariz en su rostro robando la el aliento- tengo un novio, de toda la vida no puedes venir aquí y quererlo todo para ti, tomarme como si te perteneciera- gritó para luego apartarme.
_ Es que me perteneces- la atraigo más ami- eres mía, tu cuerpo me pertenece- meto mi mano bajo su suéter largo y solo lleva una ropa interior con con medias de medio muslo y ligas- dios llevas ligas- me volví loco ese es mi sueño desde hace mucho, me viene una visión donde la invité a cenar en mis sueños.

Flash back

_ Ave María Purísima padre- dice de rodillas al lado del confesionario y me pongo atento cuando sé que es ella mía, mi mujer, en el restaurante estuvo tan excitada que a simple vista me daba cuenta.
_ Sin pecado concebida- dije prestando atención.
_ Padre he venido a confesarme, porque he pecado de pensamiento- y de echos, pofndo; vi lágrimas en sus ojos, ella solloza.
_ Dime ¿qué es lo que te atormenta tanto hija?- le digo.
_ Tengo sueños húmedos con un hombre prohibido- ohhh preciosa no son sueños.
_ ¿Le conozco?- espero que no sea otro porque solo yo puedo tocarte, solo yo puedo mirarte.
_ Muy bien padre- me dice limpiandose las lágrimas- usted padre, tengo sueños húmedos con usted- me dice y la miro con intensidad.
_ Explicate- jodrr mi voz sale ronca, solo de pensar en su cuerpo, sus gemidos, sus gestos y cómo me se estremece, me la pone dura.
_ Desde que descubrí un lago en el bosque a los dieciséis años siempre tenía sueños muy calientes solo que hasta hace dos meses eran solo sexo, el hombre tenía tus ojos todo el cuerpo eran iguales, dos meses antes de tu llegada se convirtieron en sexo, hasta hace dos días que vi tu rostro y me dijiste una frase- dice respirando- eso es para que no vuelvas a pensar en vez que me veas te estremeceras, tu sexo se humedecera, tu clitoris palpitará por el deseo, la lujuria, se te endurecerán los pezones y me desearás tanto que vendrás a esta cabaña a tocarte o al río a enfriar tu calentura pero no se te acabará el calenton porque solo me vas a desear todos los días aunque estés lejos de mi- oh bebe me acuerdo perfectamente mi preciosa Ana, mía solo mía - ahora no puedo concentrarme, cuando te vi ayer ya no podía más, hoy ha sido peor, necesito tocarte, necesito sentirte, porfavor- descarada, no tiene vergüenza, señor gracias creado un monstruo y es uno muy hambriento y quién soy yo para negar le la comida.
_ Al lago en una hora, toda lo que resta de día solo nosotros, no lleves tú coche ni nada parecido al celular lo dejas todo en casa, llevaré la cena, ponte solo un abrigo con ligas y medias negras - adoro las ligas y si es en su piel blanca mucho mejor.
_ Gracias - me dice con una sonrisa, ohhh preciosa eres mía y yo te voy a dar todo lo que quieras.
_ Para eso estoy, para complacerte solo a ti, eres mía- y se lo hago saber, creo que si yo fuera un lobo la reclam y reclamaría con posesividad
_ Si, tuya- pues claro que si ca red ajo, ¿es que hay otra persona que pueda hacerte sentir lo que yo te hago sentir?
_ Ahora ve a casa y ponte una buena ropa interior porque hoy serás mía- mi preciosa Ana hoy me haré un buen festín con tu cuerpo, ahhh estoy tan impaciente.