• 26 •

2.2K 124 10
                                    

—¿Eh?

—¿Dime cuánto quieres?

—¿Acaso no tienes con quién conversar en casa?... Además cuánto podrías ofrecerme tú a mí, seguro ni tienes dinero.

—Mira... Sé que para ti solo soy un niño, y sí... tienes razón, no traigo demasiado dinero pero solo dame diez minutos de tu tiempo, necesito conversar con alguien.

—Con dinero baila el mono, y si no tienes dinero no sé qué haces en un lugar como este. Ahorra y regresa.

—Cien dólares... Tengo cien dólares.

—¿Cien? —se sorprendió.

—Sé que debe ser una miseria comparado con lo que cobras por otro tipo de servicio y sé que tu tiempo es valioso pero solo te pido diez minutos para conversar, es todo, no pido más.

—¿Solo diez minutos?

—Sí, solo eso.

—Primero el dinero.

Saqué el billete de cien dólares de mi billetera y se lo entregué.

—Te daré media hora —agregó—. Hay días en los que no se consigue mucho y hoy parece uno de esos días. No quiero aburrirme.

—¿Enserio me darás medía hora?

—Qué, solo querías diez minutos, si es así entonces no hay problema, cumplimos los diez minutos y...

—No no, no quise decir eso... Me sorprendí, es todo.

—Bueno —acomodó su cabello—. Vayamos a las mesas del otro extremo, por allá no pasa mucha gente y conversaremos más a gusto.

—Vamos entonces.
 
   
   
   
---------------------
 
   
   
    
   
Mientras tanto...

En el banco de un parque en medio de la fría  y oscura noche.
 
  
   
   
  
Por _______:
 
   
  
     
   
  
—_______ dime, ¿Qué te hicieron esos tipos?

Traté de hablar pero las cuerdas vocales no me respondieron, solo podía hacer ademanes con las manos.

—No me asustes... Si no te tranquilizas no podré ayudarte.
 
   
No podía calmarme aunque quisiera, estaba aterrada. A pesar de estar a salvo, aún podía sentir las manos de ese asqueroso hombre sobre mi piel... Me sentía sucia.

—Calma calma... Respira profundo y calma...
  
—Ellos... ellos... —la voz se me cortó.

—No pensemos en eso ahora —habló sereno.

—Me están buscando... Vendrán por mí... ellos vendrán por mí denuevo.

—No pasará eso, tranquila.

—¡SÍ VENDRÁN! —grité con todas mis fuerzas mientras mis ojos se abrían como platos mirando a la nada—. Su jefe... ¡Su jefe me quiere conseguir!

—No entiendo, ¿Jefe? ¿Cómo sabes eso? ¿Tú ya los conocías?

—¿En verdad llamaste a la policía? Dime que no es cierto... por favor.

—No, no los llamé, solo lo dije para asustarlos pero cálmate por favor.

No pude articular más palabras, tenía la mirada perdida y no lograba estabilizar mis nervios.
 
  
—Llévame... Llévame... —pronuncié con evidente dificultad—. Llévame a mi casa...

—Sí, eso haré pero ahora necesito que estés calmada. Espérame aquí, buscaré un taxi...

—¡No! No me dejes, no me dejes aquí sola... —miré de izquierda a derecha— ¿Y si regresan?

Mi hermano se enamoró de mí (Jungkook fanfic ©)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora