Mi hermano se enamoró de mí (Jungkook fanfic ©)

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Minutos después...

En los servicios higiénicos para chicas.
 
  
   
   
 
Por _______:
  
   
   
   
  

Decir que no podía creerlo sería una completa mentira, digamos que fue inesperado.
No esperaba que Soojin confesara haber hecho algo tan psicópata solo para acercarse a una persona, ganarse su confianza y mantenerla vigilada.

O sea, le dijo a Yoongi que arruinara las cosas de Lisa para luego utilizar ese desastre como excusa, ayudarla a limpiar sus cosas y acercarse a ella... Se ganó su confianza con un método tan calculador que me asusta. Si su conciencia no la hubiera obligado a confesar, nunca lo hubiéramos sabido.

¿En qué momento mi amiga se transformó en ese tipo de persona? ¿En qué momento su corazón se corrompió a tal grado? Lo pienso y no puedo hallar el momento exacto.

Si hay algo que me tranquiliza es que aún tiene cargo de conciencia y que se angustia por sus maldades, eso significa que sí tiene la intención de enmendarse y que muy en el fondo, aún está esa Soojin con la que compartí mi infancia, mi niñez y parte de mi adolescencia... Ahí está la Soojin que era mi mejor amiga.

Por un momento creí que la culpable de su cambio había sido mi culpa, pero ahora que lo pienso no fue de esa forma. Lo que le hizo a Lisa no tuvo nada que ver conmigo, en ese tiempo Jungkook y yo no estábamos juntos; todo esto sucedió por su obsesión con un amor que por más que se esfuerce hasta la muerte, jamás podrá obtener... Nunca será para ella.
 

—_______ —llamó mi nombre mientras acomodaba su cabello detrás de sus orejas— ¿Ya me veo mejor?

—Sí, te ves muy bien.

—Eso parece —se miró al espejo—. ¿Sabes? Ya me siento mejor. Lisa me odia, pero almenos mi conciencia por fin está tranquila. Ahora debo buscar la manera de hacer que me perdone. Lo intentaré un par de veces, pero si no quiere tampoco voy a insistir, lo que le hice fue horrible, no merezco perdón.

—No digas eso, todos merecemos una segunda oportunidad y tú no eres la excepción.

—Yo no me perdonaría.

—Ya aceptaste tus errores y confesaste los ocultos. Las cosas van a mejorar pero debes calmarte. Tampoco puedes estar preocupándote demasiado, no le hace bien a tu salud mental.

—Tienes razón, intentaré no pensarlo mucho —suspiró— ¿Nos vamos?

Me era inevitable, tenía que preguntar esto antes de salir de aquí, era una necesidad para mi cerebro...

—Antes de irnos, dime una cosa —tragué saliva— ¿Cómo rayos conociste a Yoongi? Son amigos me parece.

—¿Yoongi? —rió con solo escuchar su nombre— Es un tonto, lo conocí en uno de los tantos recesos.

—Pero cómo pues...

—Estaba comprando helado en la cafetería y el idiota me tiró un codazo, fue por casualidad, me hizo tirar mi helado al suelo, es un tonto.

—¿Así nada más?

—Sí, nada en especial —sonrió—. Él estaba en mi salón pero no habíamos hablado hasta el día en que pasó eso. Al principio no nos llevamos nada bien pero con el tiempo nos hicimos cercanos. Tampoco es que seamos los mejores amigos del mundo pero es una persona leal y yo lo soy con él... o bueno, lo era... hoy lo delaté y si se entera, va a decepcionarse de mí.

—Jungkook me contó lo que pasó en el hotel... ¿Cómo puedes seguir siendo su amiga después de eso? —susurré impaciente.

—Pues... esa es otra historia, es incómodo, loco y estúpido... como todo lo que viene de mí.