Fuera del set #1

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Cuando me despierto, no sé qué hora es. Ni siquiera estoy segura del día y eso me aturde. Killian no está en la cama pero escucho su voz desde la cocina.

—ella ahora está bien, al menos desde lo físico—lo escucho decir cuando me apoyo contra el marco de la puerta—no, claro que no. Isla es fuerte, va a estar bien—sigue—ella seguramente hablará contigo luego, pero quería avisarte. Evan también sabía pero no... no tengo su número para avisarle, no quiero que le pregunte a Isla y que ella se ponga peor. ¿Podrías decirle?

Tomo una respiración entrecortada antes de avanzar por el pasillo.

—hola—me siento en una de las sillas frente a él y él gesticula una respuesta silenciosa.

—...está bien. Genial, gracias.Ella acaba de despertarse... Si, hasta luego—Killian corta el teléfono y me observa—¿Cómo te sientes?

—mejor—carraspeo.

—Llamé a Peter para avisarle que no iríamos—me dice—él te manda saludos.

—está bien—le doy una leve sonrisa, intentando no llorar más.

Ya no quiero llorar.

—¿Tienes que tomar el antibiótico, cierto? —asiento, agradecida de que él me lo recuerde. Estoy tratando de bloquear todo con tanta fuerza, que incluso olvidé eso—¿La doctora te dijo algo más?

—voy a tener sangrado por tres días o menos—murmuro entrecortadamente—si son más días tengo que ir—él asiente en silencio y busca la caja de antibióticos que dejé en el comedor—Killian... ¿Qué me hicieron? — le pregunto cuando regresa.

Él se detiene de abrir el cartón y me mira.

—¿A qué te refieres?

—en el quirófano, no... no me acuerdo qué me dijeron—digo la verdad—estaba demasiado abrumada y sé que... que dijeron algo de una intervención, pero no recuerdo qué exactamente.

—Isla... —él niega—no es necesario.

—por favor—murmuro—lo es para mí, necesito saber lo que me hicieron. Siento como si me hubieran vaciado.

—un raspado—dice con la voz un poco temblorosa—es como una limpieza—asiento lentamente—tenían que... que vaciarte para que no hubiera ninguna infección—siento mis manos temblar un poco. Vaciar. Vacía, así me siento— cuando terminaron, la doctora habló conmigo y me explicó que el... que el bebé ya estaba desprendido desde antes, que tuviste suerte de que fuera ahora y no en unos meses porque podrías haberte muerto—me dice—cuando vio la ecografía dijo que ahí ya se notaba que el feto estaba... no lo sé, ella dijo una palabra que no recuerdo... y que independientemente de que hicieras fuerza o no, iba a pasar—Tomo una respiración profunda, intentando mantenerme con calma— el estrés que tuviste las últimas semanas tampoco te ayudó, ella dijo que el estrés es una hormona que afecta el funcionamiento del cuerpo, así que tampoco...—durante unos cuantos segundos siento la mirada de Killian sobre mí, sin decir nada—dime algo.

—no sé qué decirte—murmuro—me siento vacía, siento como si me hubieran sacado algo que ni siquiera... —me cubro la boca, intentado ahogar el sollozo—Dios, ni siquiera sé por qué demonios me afecta tanto— digo, llorando.

Killian de nuevo me abraza, de nuevo me contiene y me molesta no poder dejar de llorar o sentirme así. Tenía muy poco tiempo de embarazo, ni siquiera fue un embarazo planeado, ¿Por qué duele tanto? ¿Por qué no puedo parar de llorar?

—está bien que te afecte, Isla—murmura contra mi cabello—a mi también me afecta. Es un duelo, es una pérdida, está bien que duela—me dice—tienes que llorar y sacarte todo el dolor de adentro y aprender a convivir con ello—sigue—uno aprende a vivir con el dolor y lo transforma y... Odio usar esta frase, pero el tiempo lo cura, cariño, o al menos te ayuda a sobrellevarlo. Sé de lo que te hablo.