VEINTICUATRO
Killian está de pie en la zona de espera. Lo veo cuando bajo del micro, al estar de regreso en la ciudad. Es bastante llamativo y resalta entre los demás, sobre todo por sus tatuajes.
—Hola—me acerco, acomodando la mochila sobre mis hombros, en un gesto nervioso por tenerlo tan cerca.
—Hola— se inclina, me saca un mechón de pelo del rostro, con el ceño fruncido y me observa, cambiando su expresión a una sonrisa leve—. Tienes mejor cara, nena. ¿Hablaste con tus padres?
Asiento lentamente.
—Ellos van a hacer algo por Charly, así que es una preocupación menos, supongo — respondo—. ¿Cómo están los chicos? — le pregunto, porque ayer, domingo, él se fue al orfanato cuando yo decidí irme de su departamento.
—Ellos están bien — su gesto se ablanda —, Mateo preguntó por ti, dice que aún le debes un partido y no va a dejar de insistir hasta que vayas, ya lo conozco— pasa su brazo por mis hombros mientras caminamos hacia la salida de la terminal, entre toda las demás personas que estaban conmigo en el micro.
—Iré pronto—prometo, soltando un suspiro.
No creo que sea una buena idea jugar a la pelota por un tiempo, al menos mientras esté embarazada, pero no puedo explicarle eso al hombre, todavía.
—Conseguí una cita con mi amigo — me dice cuando estamos cruzando la entrada de la terminal—. El abogado que te comenté el otro día, Andrei— ya estamos llegando a su coche cuando me lo dice—. Me dijo que puede vernos el jueves cerca del mediodía. ¿Qué te parece?
—Está bien, perfecto—abro la puerta del coche y ambos nos sentamos. Reprimo un suspiro, porque me siento un poco cansada, si soy honesta.
Ni siquiera nos hemos dado un beso. Aunque todo parece bien, normal, hay algo tensándose entre nosotros. NO sé que es, o quizás solo estoy siendo paranoica.
—¿Cómo estuvo eso con tus padres? ¿Resolvieron algo?
—Ellos van a hablar con la última psicóloga de Charly para hacer algo—Killian saca el auto del estacionamiento de la terminal—. Tal vez haya que llevarlo a rehabilitación de nuevo, pero supongo que es bueno.
—¿Cómo te sientes con eso?
Mal, quiero llorar. Siento que estamos retrocediendo.
—Bien, es lo mejor — digo, porque también creo eso—. Necesita ayuda.
Killian estaciona el auto en la entrada de mi departamento casi media hora después — en la que estuvimos en silencio — y ambos subimos por las escaleras.
—Mi casa está hecha un desastre, como siempre—le advierto.
ESTÁS LEYENDO
Fuera del set #1
ChickLitBajo el seudónimo de Penny, Isla Simone hace sus videos. Ella es una actriz porno que trabaja para una de las página más conocidas de la industria. Su trabajo le permite costear sus estudio y mantenerse, y realmente no es tan desagradable como parec...