Fuera del set #1

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Killian y yo terminamos de grabar una escena cuando Peter nos llama. No fue una escena demasiado intensa, fue algo corto, porque el productor decidió que quería hacer varios vídeos cortos, en vez de pocos largos.

—como estamos cerca de fin de año, vamos a hacer una reunión de todo el staff para divertirnos un rato—nos habla—les pasaré la dirección del lugar al grupo que tenemos de todos y nos veremos ahí.

—está bien, nos vemos... ¿El lunes?

—Lunes, sí.

El tiempo está pasando demasiado rápido. Killian y yo comenzamos a salir a mediados de marzo y ya estamos a trece de diciembre. Me cuesta creer cómo pasó el tiempo y todo lo que pasó en estos pocos meses.

—ayer me mandó un mail Paula, la secretaria de Jamilson— le comento a Killian, luego de que ambos salimos de la casona— me dijo que van a seguir investigando a Emerst, porque les llegó una denuncia, de otra universidad. ¿Sabías que las universidades tienen una red de comunicación para casos de violencia de género?

—¿Emerst siguió dando clases? —Killian me mira con el ceño fruncido— pensé que lo habían removido del cargo.

—al parecer sí, en otra universidad— suelto un suspiro— voy a intentar conseguir el teléfono de la chica y ayudarla, tal vez... si ella no conoce el protocolo no sabe cómo seguir, además de la denuncia. Emerst no puede seguir dando clases— me pellizco el puente de la nariz y miro por la ventana.

—está bien. Todo ese asunto terminó de forma extraña, ¿No crees? Digo... lo que pasó ese día fue extraño. Él ni siquiera reaccionó cuando lo golpeaste.

—Si, lo sé, pero no quiero pensar en eso. Se terminó y ya está. Necesito cerrar problemas, no seguir enroscada a esto. Él retiró la denuncia y ya estoy de vuelta en la universidad. Eso es lo que importa— suelto un suspiro— Killian, quiero el número de Diana.

—¿Para qué?

—Quiero hablarle, Killian. Me ayudó a sacarme a Emerst de encima y ella tal vez tenga alguna forma de demostrar que él le robó los vídeos. Tal vez si tenemos eso, podamos hacer que él no de más clases en ninguna universidad.

—es difícil de probar, Isla. Nuestro vídeos están en internet, cualquiera tiene acceso a ellos y creo que meterte en ese meollo será peor para ti, porque al final van a darle la razón a él, de que eres actriz porno.

—no quiero dejarlo estar— murmuro— no pierdo nada con preguntarle.

Killian aprieta los labios y asiente.

—no sé si me agrada la idea de que te hables con Diana—sonrío cuando lo escucho.

—no vamos a hablar sobre ti.

—lo sé, pero Diana...

—¿Sabes? No creo que Diana sea mala—murmuro—después de todo, lo único que hizo mal fue enamorarse de alguien que no la amó de vuelta—digo— eso no la hace mala.

—Diana me engañó, Isla, no te olvides de eso—me dice Killian con la voz un poco dura— cuando ella quiso ser madre, no me preguntó, no hubo charla ni nada. Dejó de tomar la píldora e intentó quedar embarazada. Intentó que fuera un accidente, tuve suerte de darme cuenta.

—lo sé.

—me sentí engañado en ese momento—sigue.

—está bien, lo entiendo.

—¿Lo ves? Hay diferencias—habla mientras dobla en una esquina—tú al menos me hablaste sobre lo que querías, no intentaste mentirme.

—Killian—le pongo una mano en el muslo—yo tuve horas y horas de terapia antes de poder hablarlo. La doctora Lawrence debió hartarse de escucharme hablar sobre esto.