¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Existen personas que cuando están molestas no miden lo que sale de su boca, no razonan, no sienten empatía en ese momento y lamentablemente yo era una de esas personas.
—¿Yo? ¿Celoso? —reí a carcajadas— Por favor, ¿por qué estaría celoso de ustedes?, si lo que sea que hayamos tenido fue un revolcón, bueno, varios revolcones —aclaré.
Vi como sus hermosos ojos se llenaron de lágrimas para después deslizarse sobre sus sonrosadas mejillas. Su labio inferior tembló y soltó un suspiro cargado de pesadez.
¿Qué mierda acabo de decir?
—¿Solo fui eso para ti? —sollozó— Te odio, vete a la mierda Peter Hale.
Se fue llorando con el estúpido del sabueso tras ella.
Tomé asiento en un escalón y me quedé unos momentos pensando, pasando mis manos por mi rostro.
—La cagaste —me miró seriamente— que estúpido eres.
—Gracias, sobrino. Admiro tu motivación hacia mí —me senté en el sillón.
—Espero que arregles esto —habló molesto para después retirarse.
¿Ahora qué hago?
[...]
Una semana ha pasado y la extraño mucho.
La vi hace dos días caminado en la calle, tenía un sobre en sus manos, caminaba apresuradamente y podía oler que estaba nerviosa.
Necesito un plan para que me perdone.
Lo peor es que tendré que recurrir a otro método, uno que no me agrada demasiado.
[...]
—¿Qué rayos haces aquí? Creí que ya estabas muerto, otra vez —¿Cómo se me ocurrió pedirle ayuda a Stilinski? — aunque ahora que veo, sí que te ves como uno, estas horrible.
—Tú también te ves muy guapo —le mostré una sonrisa falsa. Él en cambio me miró feo.
—Soy hermoso —susurró—, solo esta celoso.
Rodé los ojos y miré a los estúpidos frente a mí.
—Necesito su ayuda. Quiero recuperarla.
—¿Por qué te ayudaríamos después de lo que le dijiste? —habló Scott, se había mantenido callado desde que llegué.
—Porque la amo.
—Oh, claro que la amas, se nota demasiado, tu manera de querer es excelente.
Me dan ganas de arrancarte la cabeza.
—Solo ayúdenme.
—No lo creo, de todos modos, no creo que seas buen padre —susurró lo último mirando hacia otro lado.
—¿Qué mierda dijiste? —me acerqué a Stilinski.
—Él no dijo nada —miente Scott.
—Dilo —ordené.
Negó rápidamente.
—Te puedo escuchar Stiles, soy un hombre lobo —enseñe mis colmillos.
—Vale, vale —dijo torpemente—Ella está embarazada.
—¿Qué?
—¿No que eras hombre lobo? —lo miré mal.
—Si te escuché, idiota.
Rodó los ojos.
—Si la quieres recuperar más te vale dejar de ser un completo imbécil. Porque iré y te patearé el trasero... o bueno, Scott lo hará —Stiles lo señaló, en cambio el otro idiota alzó una ceja.
—Tranquilos, lo solucionaré.
Me fui de ahí pero antes...
—Gracias.
Ambos abrieron la boca sorprendidos.
[...]
Esperé a que ___ cerrara el negocio y me acerqué.
—Cariño —susurré y me volteó a ver, se quiso ir, pero la agarré del brazo—. Perdón, fui un completo imbécil contigo. Tal vez me odies mucho en estos momentos, pero quiero que te quedes a mi lado, te amo mucho, me puse celoso porque el estúpido sabueso estaba muy pegado a ti desde hace días.
Tome sus manos y las acaricie suavemente.
—Tú no eres un revolcón, —la miré y estaba llorando, me odie mucho por eso— ahora que estas embarazada quiero que estemos más juntos que nunca y tener una familia unida —sus ojos se abrieron, sorprendida ante lo que dije.
—¿Cómo lo sabes?
—Me enteré solo —sonreí de lado.
—Fue Stiles ¿Verdad?
—Si —reí un poco— ¿No pensabas decírmelo?
—No después de lo que dijiste, Parrish me acompañó, yo tenía dudas sobre si estaba embarazada, quería que fuera una sorpresa, pero terminó mal, no te lo dije porque creí que no era importante para ti.
—Lo eres, te amo. Perdóname, cariño, intentaré todo por ti, quiero estar contigo.
Ella se quedó pensando.
—Ni creas que la tendrás fácil ¿eh?, te vas a tener que esforzar, mucho —retiró una mano y se limpió la cara.
—Prometo hacerlo. Ya lo verás.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
