¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Estas nervioso? —le pregunté a Stiles.
—Algo, siento que hace mucho no nos vemos.
—Sí, dos años —reí ligeramente.
—Es mucho tiempo —se defendió.
—Lo es —lo abracé.
Llegamos a la puerta de la casa de Lydia donde iba a ser reunión de toda la manada. Hace dos años no nos vemos todos y ahora que hay vacaciones nos pusimos de acuerdo para reunirnos.
La puerta fue abierta por la anfitriona de la casa, quien apenas vio a Stiles se lanzó a sus brazos apretándolo en un fuerte abrazo, esto fue un poco incómodo porque su abrazo duro muchos segundos.
No es un secreto que antes ellos tenían una relación y fue difícil para Stiles cuando terminaron, cuando eso paso nos fuimos acercando poco a poco hasta que nos enamoramos y empezamos una relación.
Lydia se separó de Stiles y ahí fue cuando reparo en mi presencia.
—Grace —saludó y me dio un beso en la mejilla.
—Lydia.
—Pasen —se hizo a un lado dejándonos entrar—, solo faltaban ustedes.
—Genial.
Entramos y efectivamente todos ya estaban aquí. Fuimos saludando uno por uno y después nos sentamos en los sofás para charlar un poco.
—¿Ustedes están juntos? —pregunto Isaac señalándonos a Stiles y a mí.
—Si —respondí después de ver que Stiles no decía nada—, desde hace casi un año.
—Yo siempre dije que ustedes terminarían juntos —Scott nos miró con una sonrisa.
Reí y entrelace mi mano con la de Stiles dándole un apretón, lo voltee a ver y él estaba viendo a Lydia. Yo solo voltee a ver hacia abajo.
Paso el día y al final quedamos en reunirnos otro día para seguir platicando.
Subí al Jeep azotando la puerta y recargando mi cabeza en la ventana.
—¿Qué pasa? —preguntó Stiles viéndome a la vez que encendía el carro.
—Nada —respondí cortante.
—Estás extraña —dijo.
Me vale un pepino tu comentario.
[...]
Pasaron tres días y vi que no tenía que enojarme por algo así, tal vez yo solo malinterprete sus miradas y me estoy poniendo paranoica. Por lo que las cosas continuaron normales después de ese día. Hasta ahora.
—Stiles, amor —lo moví suavemente esperando que se levantara.
