𝗔𝗺𝗼𝗿 𝗮 𝗣𝗿𝗶𝗺𝗲𝗿𝗮 𝗩𝗶𝘀𝘁𝗮 || 𝐒𝐞𝐛𝐚𝐬𝐭𝐢𝐚́𝐧 𝐂𝐨́𝐫𝐝𝐨𝐯𝐚

Capítulo 16.

Sebastián.

Estaba destrozado, me sentía perdido, sin vida, todo lo bonito de ella se había esfumado mi mejor amigo y la chica de mis sueños ya no querían verme ni siquiera en pintura, los había traicionado a ambos y todo por la maldita trampa que Mariana me impuso pero culpa mía por no haberle puesto un alto desde un principio.

Intenté localizar a Valeria y explicarle que no es lo que ella pensaba pero al llamar una, dos, tres...hasta diez veces y ver qué no había respuesta me di por vencido, realmente la había perdido.

Solo necesito que Edson me escuche, que sepa que no quise que esto pasara y muchos menos quería hacerle daño a la persona que amo.

Estaba en mi habitación mirando hacia la nada cuando Bruno me llamó:

- Hola pecas ¿Cómo estás?.- preguntó.
- De maravilla Bruno, la estoy pasando genial.- contesté sarcásticamente porque ni al caso su pregunta.
- Lo siento, fue una pregunta estúpida.- dijo apenado.
- No te preocupes, no debo desquitarme contigo.
- Solo quiero decirte que Edson está en mi casa por si quieres venir y arreglar esto de una buena vez.

Me quedé pensando un poco, tenía miedo de ir y que me volviera a gritar o golpear, pero es mi mejor amigo y quiero que se arreglen estos problemas con el.

- Gracias Bruno, voy para allá.- colgué el teléfono. Agarré las llaves del auto y baje al estacionamiento.

Mientras conducía no podía borrar la imagen de Valeria yéndose de mi lado para siempre.

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Al llegar a casa de Bruno me sentí muy nervioso.

- ¿Qué hace este imbécil aquí?.- dijo Edson apenas viéndome entrar.
- Ya siéntate Edson, escúchalo.- dijo Bruno obligándolo a sentarse de nuevo.
- Ya te dije que no quiero escuchar a este idiota.- dijo molesto.

Es un sentimiento horrible el ser rechazado por tu mejor amigo y más cuando es por algo que tú no hiciste.

Hubo un silencio incómodo, Bruno tomó la iniciativa de hablar primero.

- Mira flaco se que estás molesto pero al menos escúchalo para que no lo juzgues mal.
- Está bien.- dijo rodeando los ojos.- Te escuchó.

Me quedé un rato paralizado un momento hasta que tomé valor para hablar. Yo sabía que no era culpable de nada.

- Edson te prometo que no paso nada con Mariana.- hice una pausa para después volver a hablar.- Anoche que regresé a mi departamento todo estaba bien, me fuí a dormir tranquilo y cuándo desperté ella ya estaba a un lado de mi, te juro que no le puse ni una mano encima. Ella armó todo esto.
- No se si debo creerte.- dijo serio.
- Edson.- me acerqué a él.- Sería incapaz de hacerle daño a la persona que amo, Valería es lo mejor que me pudo pasar y Mariana no soporta verme feliz con alguien más por eso armó todo esto.

Se podía notar la desesperación en mis ojos, realmente quiero que me crea que me perdone. Necesito de su apoyo.

- Edson... Pecas está diciendo la verdad.- dijo Bruno a mi defensa. Lo volteó a ver y después a mí.
- Te conozco Sebastián, eres mi mejor amigo y aunque esas fotos parecen muy reales sé...que serías incapaz de hacer algo así.- dijo para después darme un abrazo.

Afortunadamente pude arreglar las cosas con Edson, su apoyo y su confianza es importante para mí.

- Ahora ¿Qué harás con Valería?.- preguntó.
- No lo sé, no quiere verme ni en pintura.- dije cabizbajo.
- Creo que podemos empezar buscando pruebas de que Mariana es responsable de todo esto.- dijo Bruno.
- Tienes razón.- respondió Edson.- Puedo preguntarle a Sofía, estoy seguro que sabía de todo esto. Tú pecas debes intentar hablar con ella.
- ¡Qué parte de que no me quiere ver no entiendes! Anoche le llame pero nunca hubo respuesta. Valería no quiere saber nada de mi, le fallé y ahora debo darme por vencido.

Edson se levantó muy decidido de lo que iba a hacer, aunque yo no tenga ni idea de que se trata y eso me aterra porque cuando algo se le mete a la cabeza no hay forma de hacerlo cambiar de opinión.

- Haces mal en quedarte así. ¿De verdad la quieres?.
- La amo, la amo con todas mis fuerzas.- contesté.
- Pues no parece, si la “amaras” lucharías por ella y harías hasta lo imposible para recuperarla.
- Quiero darle su espacio.- dije.

Debo dejarla en paz por un rato, le hice daño y no quiero hacer más grande esta herida.

Valeria.

Me encerré en mi habitación, no quería ver a nadie, mi corazón estaba destrozado. Sebastián me llamó unas cuantas veces, todavía tiene el cinismo de hacerlo, acaso no entendió que no quiero escucharlo ni verlo ni saber nada de él.

Mi mamá vino a tocar a mi puerta pero no estoy de humor para contarles lo que pasó:

- Vale, abre la puerta.- dijo, no contesté.- Valeria.
- ¡Déjame sola! ¡No quiero ver a nadie!.- le grité.

Toda la noche me quedé mirando por la ventana. Estaba tan segura de lo nuestro, hice hasta lo imposible por defender este amor y darme cuenta de que para Sebastián era solo un juego hizo que me bajará de golpe de la nube en la que estaba.

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Al día siguiente me levanté y me puse lo primero que vi, no tenía ánimos de hacer nada.

Mi madre tocó mi puerta otra vez ¿Por qué no pueden dejarme tranquila?:

- Vale.- tocó otra vez.- Vale tienes visita.

La primer persona que se me vino a la mente fue Sebastián pero no quería verlo, aún no.

- Vale es Edson, quiere hablar contigo.- ¿Edson? ¿Por qué vendría a verme?.

Salí de mi habitación y baje a la sala, estaba sentado esperándome.

- Hola Vale.- se levantó apenas me vio.
- Vamos a afuera ¿Quieres?.- le sugerí solo asintió.

Cerré la puerta pues no quería que mis papás escucharan.

- ¿Qué haces aquí?.
- Me enteré de lo que pasó. Se que Sebastián es un idiota pero esas fotos no son lo que parecen.- dijo.- Dale oportunidad de que te explique.
- No Edson, no puedo hacerlo.- contesté con lágrimas en mis ojos.- Más bien no quiero hacerlo porque  si lo perdono le entrego a Sebastián la oportunidad de romper mi corazón de nuevo y no quiero pasar por eso una vez más.
- Te entiendo pero al menos...- lo interrumpí.
- Edson hazme un favor.
- Claro.- dijo.
- Dile a Sebastián que no te envié ni a ti ni a nadie para tratar de convencerme de hablar con el porque todos van a recibir la misma respuesta.- no pude controlar las lágrimas. Caminé hacia mi casa sin darle tiempo de que me contestara.

Se muy bien que Edson haría esto, es su mejor amigo pero no quiero que me pase esto por tercera vez si lo perdono.

Esta decidido y aunque me cueste mucho trabajo y me duela hacerlo, tendré que olvidarme de Sebastián.