Valeria.
Hoy por fin sale Sebastián del hospital así que Edson, Sofía, Bruno, Haret y yo estamos preparándole una pequeña bienvenida en su departamento.
Decoramos con globos, le hice un cártel y preparamos unos cuantos bocadillos.Queríamos que se sintiera a gusto después de aquel mal rato que César y Mariana le hicieron pasar.
Mi papá lo traería a casa, estaba en contacto con el para que estuviera todo listo para cuándo el llegara.
- Ya vamos para allá, como en
10 minutos.- Gracias papá.
Estaba tan nerviosa y ansiosa al mismo tiempo, ya quería que entrara por aquella puerta.
~~~~~~~~~~~~
Paso el tiempo que mi papá me había dicho, escuchamos voces en el pasillo mi corazón comenzó a latir con fuerza.Apenas abrió la puerta y todos gritamos a coro:
- ¡Sorpresa!.
Se sorprendió y una sonrisa se dibujó en su rostro, los chicos se acercaron a él para abrazarlo y saludarlo, después lo hizo Sofía hasta que llegó mi turno:
- Bienvenido a casa Sebas.- dije dándole un abrazo.
- Gracias bonita, que linda sorpresa.- me susurró al oído.Sofi me ayudó a traer los bocadillos y unas cuantas bebidas mientras ellos, incluído mi padre, platicaban del único tema que puede existir para los hombres: fútbol.
Después de un rato mi papá se fue para que solo nosotros nos quedáramos con Sebastián, le dije que llegaría un poco tarde a casa, en estos momentos quiero estar con Sebas y no separarme de él.
- Gracias por la sorpresa, me encantó.
- Te lo mereces hermano.- dijo Edson.
- Ahora solo tengo que pensar en recuperarme para regresar a entrenar lo más pronto posible.
- Sebas acabas de salir del hospital, debes de ser paciente.- le dije.
- Lo sé pero no quiero estar inactivo.Su pasión y amor a lo que hace es lo que más admiro de el, a pesar de que está suspendido por mi padre siempre lo veo entrenar con tantas ganas y se esfuerza día a día, y entiendo que no quiera dejar de jugar fútbol pero debe dejar pasar el tiempo para recuperarse.
- Valeria tiene razón, nos debes comer ansias.- le dijo Edson.- Debes recuperarte al 100 antes de regresar.
- Si pero no quiero que me borren del equipo, de por sí no juego.
- Prometo que hablaré y convenceré a mi papá para que no te deje fuera y al menos te siga contemplando pero no apresures tu recuperación.- dije tomando su mano y me respondió con una sonrisa.Estuvimos hablando por un buen tiempo hasta que poco a poco los chicos se fueron yendo, mi papá me envió un mensaje diciendo que ya iba en camino pero aún faltaba tiempo.
Estábamos en el sillón viendo una película mientras esperaba a papá.
- Me alegra mucho que estés aquí conmigo de nuevo.- me dijo.- No sabes lo mucho que te extrañé.
- Yo también te extrañe mucho Sebas.- respondí.Lentamente nos acercamos el uno al otro para besarnos, acarició mi mejilla con tanta suavidad me jalo para que me sentará encima de él. Nuestras respiraciones se agitaron, comenzó a acariciar mi espalda por debajo de mi blusa mientras yo pasaba mis dedos por su cabello.
Justo cuando intentaba desabrochar mi sostén tocaron la puerta y una voz que dijo:- Valeria, soy yo.
Era mi padre arruinando este momento, solo cerré los ojos separándome de Sebastián.
- Tengo que irme.- dije. Volvió a tocar la puerta.
- Si bonita, me envías un mensaje cuando llegues.Solo asentí y le dí un último beso para despedirme.
Salí de casa de Sebastián y mi padre estaba esperándome frente a la puerta.
- Tardaste mucho, ¿Qué estaban haciendo?.- preguntó.
- Estaba ayudandole a recojer las cosas.- conteste pero obviamente le mentí.Salimos para ir a casa y una vez llegando le envié un mensaje a Sebastián.
Sebastián.
Me sentía más cómodo en mi casa que que en el hospital. Aquella sorpresa me hizo muy feliz pero lo que más me gustó fue que Valeria estaba de nuevo en mi vida.
No recuerdo quién me había herido y la verdad no estoy interesado en saberlo, no quiero recordar aquel momento donde sentí que mi vida se iba.
Terminé de levantar las cosas cuando me llegó un mensaje en mi celular:
- Ya estoy en mi casa.😽
- Está bien bonita.❤️ Te adoro.
- Te adoro más.☺️
Todo en mi vida está retomando su camino nuevamente, lo único que me faltaba para que todo sea perfecto era volver a jugar.
El médico me dijo que debía estar dos semanas en reposo, sin hacer ninguna actividad física, y terminando estás semanas podría volver a entrenar.
• 1 semana después •
El papá de Valeria me citó en Coapa para darme un aviso importante, lo primero que me vino a la mente fue que me sacaría del equipo.
Conduje hasta allá, cuando llegue me dio mucho gusto volver a ver la cancha de entrenamiento y a todos mis compañeros que se acercaron a mi para saludarme.
El papá de Vale fue el último en acercarse hacía mí:
- Córdova que gusto verte ¿Cómo estás?.
- Mucho mejor, ya no siento dolor.- contesté.
- Que bueno. Te llamé porque estuve platicando sobre tu situación con la directiva.Estaba tan nervioso, realmente anhelo que no me dejen fuera este torneo.
- Y vemos que tú ya estás recuperado.- me dijo.- De mi parte de felicito porque seguiste con el tratamiento.
- Muchas gracias.- respondí.- ¿Y que decidieron?.- estaba ansioso y preocupado.
- Decidimos que puedes regresar a entrenamiento el día de mañana.- me dijo.Sentí la mejor sensación, el volver a jugar fútbol era todo para mí y aunque se que mi suspensión interna sigue en pie.
- Gracias, gracias por dejarme volver.- dije emocionado.- Aunque se que mi suspiro sigue activa.
- De nada y efectivamente sigue activa pero serás contemplando como antes.- me dijo.Estaba realmente agradecido, está vez le echaría más ganas para poder volver más pronto.
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𝗔𝗺𝗼𝗿 𝗮 𝗣𝗿𝗶𝗺𝗲𝗿𝗮 𝗩𝗶𝘀𝘁𝗮 || 𝐒𝐞𝐛𝐚𝐬𝐭𝐢𝐚́𝐧 𝐂𝐨́𝐫𝐝𝐨𝐯𝐚
Teen Fiction•|| «Aunque la historia no estaba prevista, somos la prueba de que existe amor a primera vista»||•