Relatos [TWD]

11. Negan.

¿Me ves en tus sueños?

¿Aún piensas en mí?

¿No me extrañas? Porque yo a ti sí, y mucho.

¿Me recuerdas cada vez que besas a tu mujer?

¿Sus caricias se igualan a las mías?

¿Me sientes cuando haces el amor con ella?

¿Me sientes?

Doy otra calada a mi cigarrillo y sigo contemplando el oscuro cielo lluvioso, que acompañan mis lágrimas y mi corazón roto. Esta tarde se casaba el amor de mi vida con la que era la mujer de su vida. Qué cruel es el destino, ¿verdad? Enamorarte de alguien que no te ama... y que esa persona ame a otro y no a ti. ¿O que es peor? ¿Que te ame pero actúe como si no lo hiciera? Que te busca cuando le da la gana y cuando se siente solo, cuando no tiene diversión en otro lado y sabe que tú eres la única tonta que está dispuesta a atenderlo a cualquier hora. Mi relación con Negan era sumamente tóxica y ahora estoy pagando las consecuencias de haber mantenido un noviazgo sin futuro.

Negan era feliz, tenía una nueva esposa.

Yo había perdido a todas mis amistades y familiares por él.

Pero... ¿por qué no puedo dejarle ir? ¿Por qué aunque esté casado no puedo aceptar que ya no esté a mi lado? La rabia se apodera de mi ser y estrello el botellín de cerveza contra el suelo. Mis sollozos me desgarran el alma y siento que me falta el aire. Me hago una bolita en el suelo y me aferro a mis rodillas como si mi vida dependiera de ello. Creo que me estoy volviendo loca... me siento sola. Muy sola. ¿Dónde está Negan? ¿Por qué yo no puedo ser el amor de su vida? ¿Tan mal lo quise? Si por él era capaz de cualquier cosa, hasta lo más ilegal y terrorífico del mundo.

Pero vas a volver a mí. Porque todavía me amas, ¿verdad?

Pronto volveremos a estar juntos. Te lo prometo, Negan.

Había estado preparando todo cuidadosamente por un mes, pensando en que hacer cuando lo viera, haría cualquier cosa por traerlo de vuelta. Todo era válido. La suerte estaba de mi parte y había conseguido engendrar una vida. Mis esperanzas estaban por las nubes. Dicen que con un bebé puedes atar a un hombre de por vida, ¿verdad? Estaba esperando un bebé de Negan. Teníamos algo que nos seguirá uniendo. Estaba la mar de feliz.

Así que salí de casa lo más arreglada posible y me encaminé al consultorio de mi amorcito. Mientras subo por el ascensor del hospital observo meticulosamente que todo esté en orden, aquel vestido rosa palo que él me había regalado, me quedaba completamente diferente. Ahora se veía un pequeño bulto, no había mucha diferencia pero ahí estaba. Mi pequeño bebé.

La secretaría, que ya sabía lo mío con Negan me atiende lo más amable posible y le pido de por favor que no le diga quién soy. Pues ella sabe que en realidad soy la amante, que me metí sin pensarlo en una relación de años. ¿Pero quién es el malo de la historia? Negan permitió todo y cuando él se enteró que su actual esposa estaba embarazada dijo que no podía continuar conmigo. En ese momento yo no quería hijos, pero él lo ansiaba. Así que eligió un futuro seguro. Pero ahora estaba yo, la que no deseaba ser madre, con un bebé suyo en camino. Entonces podremos ser los mismos de antes.

Toco la puerta con toda la seguridad del mundo y escucho su gruesa voz decir que pase. Su rostro se torna pálido al verme, ¿se alegra de verme? Sonrío lo mejor que puedo y cierro la puerta.

—¿Qué haces aquí?—pregunta y se pone de pie.

¿Por qué está tan serio?

—Hola, ¿cómo estás?