LIBRO #2 DE LA TRILOGÍA PSICÓPATA (LOS FANTASMAS DEL PASADO)

(22) +Camilex

Te pedí que me destruyeras, y tan solo fue literal pues no imaginaba que te irías llevándote mi vida..

Siento una estruendosa luz chocar en mi rostro que me obliga abrir los ojos, extiendo mi mano a mi lado derecho y me paro de repente al notar que no hay nadie. Siento un incómodo dolor en mi trasero pero eso no importa ahora, es muy extraño que no este aquí es demasiado temprano.

Recuerdo todo lo que paso ayer, la noche tan increíble que tuvimos y la forma en que se entrego no la puedo describir no existen palabras, no lo puedo comparar con nada. Realmente te amo Camilo, solo espero que esto de paso a una nueva oportunidad por que no soportaría perderte.

Salgo de la cama y me doy una larga ducha, salgo me visto por algo cómodo y bajo a la cocina donde me sirven de desayunar y no veo a nadie, ya que es demasiado temprano, estoy demasiado ansioso y extasiado, mentiría si dijera que he podido dormir la noche completa.

Al terminar salgo rápidamente de la cocina y subo a su habitación encontrándome con un enorme desorden en su habitación y también se alborota mi corazon, recorro el lugar con la mirada y corro al closet pero esta vacío, los cajones, todo esta vacío.

No, no puede ser lo que estoy pensando, Dios por favor no permitas esto otra vez. Salgo corriendo de la habitación buscando desesperado por todos lados, busco en las demás habitaciones, el garaje, el jardín y nada.

Corro hacia la playa sin parar hasta perder el aliento entrando en desesperación, sin embargo no logro encontrarlo por ningún lado grito desesperado sin saber que hacer y vuelvo a la casa en busca de alguna pista, llamo a los demás pero nadie responde.

Camilo dime qué no es cierto.

Veo entrar a nana y al verme su rostro cambia a preocupación.

- Donde está - niega con la cabeza y se acerca a mí.

- Alex, primero cálmate y vamos a hablar por favor - Intenta tocarme pero me alejo sintiendo la impotencia drenar mi sangre - Dijo que no volverá, que no lo busques mas que.

- ¡Dónde está maldita sea! - Grito pegándole a la pared.

- Se ha ido Alex.

Busco mi celular por todas partes y siento como me tiemblan las manos, al encontrarlo marco su número.

- Responde Camilo no me hagas esto por favor - Mi paciencia se acaba.

- El número que ha marcado se encuentra apagado o fuera de servicio.

- ¡Maldita sea Camilo, por que! - Estrello el celular contra la pared y se vuelve añicos.

- Alex cálmate por favor.

- ¡Pasamos la maldita noche juntos, me dijo que me quería y ahora me sale con esto! ¡Largándose de nuevo!

Caigo al piso y las lágrimas empiezan a salir, no puedo creer que me hayas hecho ésto Camilo, por qué ahora, despues de que te confesé mis sentimientos me entregué a ti y solo huyes como un cobarde.

- Lo siento hermano sabes que cuentas conmigo siempre - Me abraza y lloro en sus brazos.

-¿Por qué nana? nunca voy a entender esto.

Me pongo de pie y voy hasta mi habitación, no quiero seguir un minuto más en éste lugar, no quiero recordar más y ahora menos después de esto.

Preparo la maleta me colocó una camisa, zapatos y salgo de la habitación.

- Alex a dónde vas - Mira la maleta sorprendida

- Iré a casa no quiero estar un segundo más aquí.