19. DYLAN

40 4 0
                                    

El fin de semana había pasado, y Luke que no se cansaba de preguntarme porque había contestado el teléfono de Breeze. Ya le había dicho que no era por un motivo en especial, pero no me creía.

—Dylan sé que lo que me dices es falso.

—Es tu problema si no me crees Luke —dije y fui bajando las escaleras.

—Dylan, Luke... les preparé el desayuno —Lauren estaba de pue con una sonrisa—. Hice... tus tortitas preferidas Dylan —dijo ella.

—No tengo hambre. Además ya es tarde —respondí.

—Escucha Dylan, quiero llevar la fiesta en paz, solo te pido que comas un poco y luego puedes irte —tomó una postura fuerte, algo raro en ella. Siempre se quedaba callada y aceptaba todo lo que yo decía—. Me preocupa que enfermes. —ella frunció el ceño. Lo último que dijo tenía cierto tono maternal.

—Dije que no tengo hambre —respondí—. Me voy —comencé a dar un paso, pero me detuvo.

—Tu padre no está, ha salido de viaje por la madrugada. Las llaves de los autos las tengo yo. Siempre sales sin comer nada, a tu padre le preocupa y a mi también. Te sugiero que desayunes, a menos que quieras ir a pie al instituto.

—Vaya, nunca habías reaccionado así, Lauren. Como si... fueras mi madre —ella no dijo nada—. Me da igual si Vittorio se fue o está aquí. Para tu tranquilidad Lauren y considerando el estado en el que te encuentras, voy a hacerte caso.

Ingresé a la cocina y probé lo mínimo posible. Las tortitas no estaban mal, pero no me permití seguir comiendo. Tomé una taza de café y salí de casa. Luke no dijo nada en el camino al instituto. Estaba enfadado.

—¿Hablaste con Sowie? —pregunté.

—Dijo que se encargaría de todo, ella no le dirá nada de lo que ocurrió —respondió.

«A menos que lo recordara todo».

Pero eso era imposible, bebió demasiado esa noche. No recordaría nada en absoluto.

Al llegar al instituto aparqué el auto.

—Dylan necesito hablar contigo después de clases —dijo Luke antes de bajar del coche.

***

Las clases habían acabado. El trabajo de Física había sido entregado. Las clases habían sido aburridas como siempre.

Tenía clase de deporte, era la última del día. Iba de camino al gimnasio cuando alguien me llama.

—¡Dylan! —era Monica.

—¿Qué quieres?

—Lo sé todo. Sé que fuiste tú quien estuvo con Breeze en la fiesta.

—Varios me vieron. No me importa.

—Me refiero a que fuiste tú quien la llevó a casa.

—¿Qué te parece si ahora me cuentas una de vaqueros? —sonreí y seguí caminando.

—¡Breeze me lo contó! —gritó y eso me detuvo. Sentí como si de pronto me hubiera caído un baldazo de agua fría.

«No».

No podía ser posible. Estaba demasiado ebria, no podría haber recordado... nada.

—¿De qué hablas?

—Me lo contó, cuando fui a su casa el día sábado. Dijo que llamaron a Luke para que los recoja... ¿Lo seguirás negando? —me giré y me dirigí a ella. La tomé del brazo y la llevé a un lugar donde nadie pudiera escuchar.

You... my beginningDonde viven las historias. Descúbrelo ahora