—¡Dylan! —lo llamé pero no hizo caso.
«¿Por qué habría dicho algo así?»
Tal vez era por el alcohol, parecía haber estado tomando toda la noche. Si eso debía ser.
¿Pero por qué lo diría? ¿Sabría algo? No, eso era imposible.
Dylan era un patán, quizás solo estaba tratando de jugarme una broma. Ese tipo de bromas no me gustaban para nada, y menos si se trataba de algo tan serio.
«¡Dylan es un idiota!»
—¿Qué te hizo Dylan ahora? —Liam se sentó donde antes había estado Dylan.
—Nada.
—Cómo te escuché decir que era un idiota.
«Maldición, ¿lo dije en voz alta?»
—Sí, y otra vez lo hiciste —dijo con una sonrisa.
—A veces pienso en voz alta y no me doy cuenta.
—¿Me dirás qué te dijo Dylan?
—Solo una tontería, que seguro lo dijo porque estaba ebrio.
—No lo creo —tenía la mirada perdida—. Dylan no es de las personas que pierden el control de lo que dicen.
Después de escuchar a Liam, se produjo un silencio incómodo, ahora quería saber por qué razón Dylan había dicho algo así.
—Mejor no hablemos de Dylan, me pone de mal humor —dije con una sonrisa—. Más bien cuéntame de ti.
—Bueno que te puedo decir, no soy tan interesante que digamos.
—¿En serio?, yo creo que en todos hay algo de interesante.
—Breeze, cuando me conociste, ¿qué pensaste de mí?
—Bueno, que eras un buen chico, y divertido. Además parecías tener una buena relación con Eleanor.
—No, cuando casi te atropello.
—Ah, ese día —dije, no creí que se refería a ese incidente—. Que eras el chico con los ojos más hermosos que había visto.
—Así que te gustan mis ojos —sonrió—. La verdad no creo que sean nada especial.
—Claro que sí. Además eres una buena persona.
—Y... —sabía que era lo que quería que dijera, pero decidí fastidiarlo un poco.
—Amable.
—Y...
—Educado.
—Y... —empezó a perder la paciencia.
—Y muy lindo.
—¿En serio soy lindo? —comenzó a ver su reflejo en el vaso— ¿ Crees que debería ir a probar suerte con alguien?
—Por supuesto. Todas se echaran a ti como abejas a la miel.
—Interesante comparación —me miró a los ojos de una forma tan intensa que me vi obligada a apartar la mirada.
—¿Quieres algo de beber? —decidí cambiar de tema, aunque fue una forma torpe de hacerlo, ya que Liam tenía su bebida en la mano.
—Yo no, y tú —de repente comenzaba a hacer mucho calor. Necesitaba un trago para relajarme.
—Creo que sí —me giré y llamé al que estaba sirviendo las bebidas.
—¿Quiere otro vaso de agua, señorita? —preguntó al acercarse, vi que Liam se estaba aguantando la risa.
—No, sírvame una piña colada, por favor.

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You... my beginning
Fiksi RemajaTodos tienen un pasado, un secreto que esconden en su interior. Muchos buscan enterrarlo, otros lo superan, pero a otros los atormenta por el resto de su vida. ¿Y si la historia de tu vida hubiera sido una completa mentira? Teniéndote al margen con...