||Cosa de Manada||

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N/A: La Viñeta está ambientada en la primera temporada de Hawaii Five-0.

[Pairings: McDanno] Pre-Slash, Shifter!AU. Wolf!Steve. Viñeta.

Danny oye a Steve gruñir, el sonido es gutural y amenazador. Una clara advertencia para que nadie alrededor se acercara a ellos, incluso Duke muestra un respetuoso espacio mientras ambos se hacen paso hacia las oficinas del Palacio Iolani. Kono a pasos de ellos muestra una sonrisa satisfecha y Danny simplemente quiere gritarle por todo lo que ha ocurrido ¿Qué puede ser tan gracioso? ¡Casi ha sido un jodido desastre!

Steve se ha comportado más como un Neanderthal de lo que comúnmente es en los últimos días, casi ha atacado a otro oficial de policía y el perpetrador al que seguían en Waikiki por un asunto de drogas se había orinado por completo después de que el idiota de su compañero lo asustara con un tremendo rugido a juego con sus garras y colmillos.

Como un lobo Alpha entrenador por la marina y un Seal condecorado, uno podría esperar que Steve tendría más control sobre sí mismo y sus instintos más primitivos,  pero desde que se asociaron para ser compañeros y dirigir Five-0 juntos ésto no fue lo que precisa a ocurrido. En más de una ocasión ha sido Danny quien puso a raya al temerario hombre con un poco de gritos y amenazas para que volviera a tener el control de la situación.

Sabe que los instintos de lobo de Steve son necesarios para las misiones en el extranjero y que las regulaciones no son tan estrictas como lo son para los agentes de la ley y civiles. Lo último que Danny quiere es que el Centro de Shifter viniera a por su compañero solo porque Steve se va más de la cuenta en sus casos, el Centro de Control no son muy amables con aquellos Shifter que se salen de la raya.

Molesto e ignorando a Chin a medio camino, Danny lleva a Steve a su oficina y los encierra allí a pesar de que las ventanas son de vidrio y la privacidad es una mera ilusión.

- ¡¿Qué demonios te sucede, tú Neanderthal Animal?! -grita Danny, moviendo una mano mientras que con la otra golpea a su jefe en el pecho. Si Steve no fuera su amigo, el hecho de molestar a un Shifter de esa manera seria una muy mala idea.

Las orejas caninas sobre la cabeza de Steve se mueven lentamente, su ceño se frunce y toma a Danny de su muñeca con firmeza. Para alguien que estuvo furioso hace menos de quince minutos, su toque es suave y controlado.

- No sucede nada, Danny -responde Steve acercándolo a su cuerpo- Y sentarse pensar de los que puedes pensar de mí, tengo un buen control de mis instintos.

Danny ríe sarcástico. Steve se molesta por ello.

- ¿Tú, buen control? -se burla sin hacer nada por librarse del agarre de su compañero- ¡Pero si hace instantes asustaste a la mitad del Departamento de Policía! Y no me hagas hablar de Kaoa, Steven -dice Danny en reproche- Sé que estás nuestro sospechoso pero eso no te da derecho a amenazarlo con tus colmillos.

- ¡Te atacó! -ruge Steve en consecuencia, tomando el cuerpo de Danny y atrapandolo contra su colchón- Él te puso en riesgo, le demostré las consecuencias de amenazarte... -dice mientras se cuela entre las piernas de Danny, el hombre de Jersey en verdad desea que nadie pueda verlos en aquella sugerente posición- Nadie amenaza a mi compañero -susurra por lo bajo, acercando sus cuerpos.

- Steven, estás siendo malditamente raro -dice Danny queriéndose librar de su prisión. Sin éxito, claro- ¿Puedes salir de encima?

Steve niega ferviente a pesar de que no fue una petición, el rubio en verdad quiere que el lobo fuera de su cuerpo.

- No, Danny, tengo que cuidarte -responde Steve a una pregunta no hecha- Tengo que bañarte con mi aroma, así nadie podría alejarte de mi otra vez. El HPD no podrá reclamarte de vuelta.

- ¿Reclamarme? Cariño, lamento informarte que no era Miss Popular en el Departamento de Policía precisamente.

Steve gruñe bajito mientras entierra su rostro contra su cuello, el ronroneo casi le hace reír. Tal vez lo haría sino fuera porque el loco de su jefe al perdido la capacidad de sí mismo y ha sucumbido a su lado lobo en la oficina de todos los lugares inapropiados. Mierda.

- No. Puedo olerlo, el perro te desea.

Danny parpadea confundido.

- ¿Perro? -pregunta- ¿Hablas del agente Hakura?

Que Danny recordase, el oficial Hakura había sido uno de los tantos agentes que no recibieron a Danny con los brazos abiertos. El único que había sido bueno con él fue Meka, su primer amigo allí en Hawaii.

- Puedo oler su deseo cada vez que te mira. Es desagradable, eres mi compañero ¡Yo soy tu socio! Él no debe mirarte de esa manera.

Danny respira hondo, después de todo sabe que Steve sólo quiere poder cuidar de él como sus instintos le dictan. No hay malicia allí, solo las intenciones torpes de un lobo para con su amigo.

Suspirando, el rubio alza la mano y pasea las yemas de su dedos contra las suaves orejas peludas de su jefe. La cola afelpada con pelaje oscuro se balancea feliz ante las intenciones cariñosas que su dueño recibe por parte de Danny.

- No hay nada de que preocuparse, Steve. No voy a irme a ningún lado, somos socios ahora, mi lugar a está a tu lado.

- ¿No te irás? -pregunta el Shifter aún contra la piel de su cuello.

- No. No me iré -responde con calma. Pero ha pesar de que el gran cuerpo del lobo se relaja entre sus brazos, Steve no retrocede ni hace alusión de irse. Danny espera que ni Chin ni Kono vuelvan pronto- ¿Sabes, cariño? Espero que ésto de marcarme con tu olor arrojandote sobre mi no ocurra seguido y menos en nuestro ambiente laboral.

Para su suerte, Steve niega con una tonta sonrisa feliz y satisfecha por salirse con la suya.

- Descuida, Danno, cuando te regalé los boletos para nadar con los delfines a ti y a Grace pasé la noche en tu horrible departamento -responde el lobo como quien no quiere la cosa- Marqué mi olor en tus sábanas, tienes suerte de tener un lugar pequeño, así todo huele a mi más rápido. Pero sería bueno que deje mi esencia en tu cuerpo al menos una vez a la semana, así nadie querrá alejarte. Serás manada por siempre...

El Shifter habla feliz por su hazaña, como si fuera algo bueno, pero la mente de Danny queda en blanco por la declaración.

¿Qué Steve hizo qué?

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